En nuestra cultura se le da una promoción excesiva al romance y las relaciones de pareja , como si fuera una parte vital o una necesidad para poder estar completo o ser feliz.

Y poco al amor propio, a la importancia de tener una relación sana con uno mismo , cuidar de ti , de tu persona.

Incluso muchos lo ven como una meta para su vida el emparejarse, cómo un proyecto que los hará alcanzar la plenitud.

Que padre cuando eliges estar con alguien por qué en verdad deseas compartir tu vida y no porque solo necesitas al otro para vivir una fantasía romántica, o esperas que te dé el amor que tú no te das .

Le hace más falta darle propaganda al amor propio y no a cupido.

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