Se callará el silencio,
Cuando alumbres con tus ojos,
El serpenteante camino,
De este Tauro lleno de enojos.
Se parará el tiempo,
Cuando soples mis pestañas,
Y me despierte cuando choque en mi cara tu aliento,
De fresca menta y olorosas flores de enredaderas.
Se activarán mis sentidos,
Con tu voz de palabras cultivadas en los cielos de tu pensar,
Se deleitarán mis oídos,
Con la pasión que sudarán nuestros poros, cuando te grite te quiero sin parar.
Se erizará mi piel,
Con los abrazos cálidos y caricias de terciopelo que salen te tu ser.
Y rebosará la miel,
Que untarás en tus labios para dejar huella en los besos que me mandes en aviones de papel.
Y me abriré el pecho,
Y saldrán las palabras,
Que guardo para nuestro encuentro,
Y prenderán las ascuas.
Que tengo tanto amor por dar,
En este cuerpo de vestir descuidado,
Y tantos temas por hablar,
Sentadito a tu lado.
Que borraré las nubes grises,
Pagándoles un soplido,
Para que libre vueles,
Y me traigas a Cupido.
Que nos atravesará con su flecha,
Y nos unirá para siempre,
Y nos tatuaremos nuestra fecha,
Justo debajo del vientre.
Entonces haré un lazo y te bajaré la Luna,
Brillarán más las estrellas,
El mar batirá su espuma,
Y nos bañaremos desnudos mientras nos acariciamos con el vaivén de las olas.
Escribiendo en verso,
Esperando por verte,
Y aunque aún no te conozco,
Cuando te encuentre…
«Y si quieres sentir, te empiezo a rozar, y si quieres llorar, te hago reír»
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