¿Sabes que odio de las últimas veces?

Nunca eres consciente que eran una despedida.

Un brazo cálido, una sonrisa, un beso, un aliento.

Parecemos estar destinados a finiquitar 

la vida que pasa lijera ante nosotros;

irrepetible e inamovible.

No me molestan los cambios,

me molesta no poder respirar agudamente

extendiendo un segundo más

la proximidad con alguien que amo, quiero o aprecio.

Permiteme vida existir en el ahora, para que nada duela en el futuro, sobre el pasado.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS