Año diferente.
Recuerdo con nostalgia este día hace un año, bueno, más bien estos días.
Miro hacia atrás y veo una versión de mi totalmente apagada, asustada, triste y con una sensación de abandono que sin querer duro una pandemia entera, o bueno, el inicio y la peor parte de esta.
Y es que, ¿quien nos avisa que pasaríamos un confinamiento entero solos?; sin el amor de tu vida, sin mama, sin papa, sin tu mascota, sin eso que nos hacía latir más rápido el corazón. Miro hacia atrás y solo me veo existiendo, más bien SOBREVIVIENDO, justo eso, hoy en día me aplaudo hasta el hecho de empezar a leer un libro nuevo, hasta doblar mi ropa, buscar trabajo, en fin cualquier cosa que haga, pues hubo un tiempo en que simplemente mi alma y mi cuerpo no estaban pero ni en la mínima sintonía y sentía que era prácticamente imposible hasta el hacerme desayuno, el pararme de la cama, despertar, bañarme.
De amor no te mueres, pero como duele.
Volviendo al tema, como extrañe y como perdí hace un año, perdí hasta las ganas de vivir, miraba al cielo y le rogaba a Dios o a quien fuera que me escuchara que por favor volvieras, que mi mayor anhelo era enmendar mis errores, esos malditos errores, arreglar mis defectos. Los reales y aquellos que inventaste; deseaba tenerte de nuevo y esta vez hacer las cosas bien , pues juraba que todo era mi culpa, pero entre más te necesitaba más lejos estabas de mí, y mis fuerzas cada vez se agotaban más y más.
Verte feliz con ella me dolía porque en mi egoísmo solo me interesaba la idea de verte feliz si era conmigo, vivía creando escenarios falsos en mi cabeza, y todos me llevaban hacia a ti, siendo esa versión o esa mujer que nunca pude ser, que nunca existió, que siempre quisiste que fuera, y vivía en deuda contigo; ¿por que no fui lo que esperabas?. Pues quien realmente fui jamás te lleno el alma, y francamente también yo te idealice, y el apego y la poca experiencia que tenía y tengo en la vida me llevó a lugares, personas y momentos muy dolorosos. Empezando por ti.
-Dolor: Si alguien me preguntara el significado del dolor para mí, iniciaría con tu nombre, pues hasta el día de hoy dueles, duele saber que me dañaste y jamás sentiste que lo hiciste, lo nuestro murió y me duele ver que nunca volteaste hacia atrás para ver que sin ti yo podía volverme loca, el dolor que provocaste no me cabía en el pecho, así que poco a poco se fue apoderando de mi cuerpo, de mi rostro, de mi mirada, y aquella luz que había en mi simplemente se apagó.
Llego un momento en que mi parte favorita del día era la noche, pues al dormir en mis sueños te veía, era la única forma en que te veía, te veía conmigo y tu maldita indiferencia no estaba y de nuevo veía a ese hombre que alguna vez existió, pero ya no estaba más, o quizá nunca paso, y todo fue creación de mi mente, de nuevo, IDEALIZANDOTE.
Al final, te perdone y poco a poco se drenaron todas esas sensaciones que me aterrorizaban y torturaban día con día, una mañana simplemente deje de pensarte, de revisar tus redes, de llorar por ti, de buscarte, de buscar respuestas, un buen día desapareció el nudo en mi estomago y ahí entendí eso que todos te dicen , eso de que “TODO PASA”, pues si, hasta tu te fuiste de mi mente y de mi alma.
Hoy no me interesa tener más éxito que tú, ni hacerte daño, hoy me conformo con saber que estas bien, y eso es bueno porque quiere decir que no te odio, y si es que alguna parte de mi lo hace, lo que te quise es más grande lo que puedo o pude llegar a odiarte.
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