204 TE ODIO ❤️

I

TE ODIO.

Odio cada poro de tu piel, esa piel a la que soy adicta.

Si, adicción, necesidad y obsesión.

A tocarte, a sentirte y amarte.

Odio tu boca, dulce, salvaje, suave, tan mía que me duele, y me hace soñar.

Odio los momentos vividos y los no vividos.

Odio el tiempo que pasa sin ti.

Odio no verte, no poder saciarme con tu piel.

Odio el pasar del tiempo y la vida sin ti.

Odio no ser fuerte.

Y te Odio de Amarte, cómo nunca y como a nadie.

II

TÚ SABES.

Sabes.

Te sigo queriendo.

Te quiero más que nunca y como a nadie.

Yo sé que tú me Amas, lo sé, lo siento… Me lo dijiste tantas veces y de tantas maneras que no puede ser de otra manera.

Esta separación no cambiará nada, aumentará más la añoranza, el deseo y el amor.

Lo bonito no es malo.

El querer, el sentir, necesitar y amar, no puede ser malo.

Juntos somos más fuertes, juntos podemos con todo.

Juntos podemos volar…

III

TU BOCA.

Tu boca me pierde, me vuelve loca.

Nunca pensé que un beso, me tocara el alma.

Y por muchos que te diese, no me saciará nunca.

Quiero comerte la boca, marcarte y morderte el alma…

Que tu boca es mi cielo, y mi infierno.

Tu boca… mi boca… son insaciable.

En tu boca mis fantasías se hacen realidad. Tu boca es mi principio y mi fin, mi todo. Porque tu boca es el candado y mi lengua su llave.

Amor, es tu boca mi boca, me pertenece desde siempre y por siempre.

IV

DIME AMOR.

Necesito saber de ti.

Son las ganas que me pueden.

Preguntas sin respuestas, mi tormento.

Quiero ver tu cara, tus ojos, tu cuerpo.

Necesito saber, si mis ganas son tus ganas.

Si tu boca, me echa de menos, y tu piel grita mi nombre.

Necesito saber que te mueres por verme y por tocarme.

Amor, yo con impaciencia y desespero, esperaré el día, en que mi amor, mate tus fantasmas.

Y me necesites tanto, tanto, tanto y me corras a buscarme.

V

ESTAS EN MÍ.

Eres tú, esas mil y una maneras de decir Te Quiero…
Dime Amor, que son mis ojos tu debilidad.
Que es mi piel, la que te excita y pervierte el pensamiento.
Que es mi boca la que deseas y mis besos los que te pierden.
Dime si no son mis manos tu tentación y mi cuerpo tu pasión.
Que mi ser es tu Tormenta y el Fuego de tu ser.
Que el calor de mi corazón son tus ganas de todo y mi latido es tu fuerza.
Dime, que soy yo, tu luz, tu aire, tu vida, tu Tormenta.
Dime Amor.

VI

NO OLVIDES.

Que estoy grabada en tu piel.
Que tus labios tienen mi nombre
Que tu cuerpo es mi templo.
Que tus manos son mi capricho.
Que tus ojos son mi luz.
No lo olvides nunca…
Que tu boca es mi tortura.
Que tu ser es mi tentación.
Que tú eres mi tormenta y mi calma.
Que somos uno e infinitos.
Que te deseo y que te quiero.
No olvides.
Que tú, eres mi Cielo, mi sol, mío.
No lo olvides.

VII

ABRÁZAME.

Abrázame con la mente y el Alma …

Abrázame y rodéame entre tus brazos, deja que nuestros corazones se toquen y sean uno con cada latido.
Abrázame más fuerte amor, siente como poco a poco voy matando tus frustraciones, miedos y fantasmas.
Abrázame y no me sueltes, bésame, tócame, déjate envolver por la intensidad y el calor de la piel.
Abrázame, deja que la lujuria de las bocas, y el deseo de los cuerpos nos haga sentir vivos.
Abrázame Amor, siente la paz, la tempestad, el deseo, la tentación y la vida.
Abrázame y siente el lenguaje de nuestras almas al sentir el calor de nuestros cuerpos unidos.
Abrázame, Cielo, de cerca o de lejos, con el pensamiento o en sueños …
Abrázame y no me sueltes nunca.

VIII

LA VIDA CUESTA.

Me cuesta la vida intentar olvidarte, no pensarte y dejarte ir…
Me cuesta, imaginar, que intentes seguir sin mí.
Me cuesta la vida renunciar a tu piel, a tu ser, a ti.
Me cuesta la vida que tu piel no me busque, que tu alma no me llame y que tu boca no me respire.
Me cuesta la vida sentir como pasa el tiempo sin más…
Me cuesta la vida renunciar, a ti, y sentir tu rendición.
Me cuesta la vida vivir sin sentir, vivir sin vivir, vivir din ti…
Me cuesta la vida Odiarte como te Odio…

IX

VEN.

Ven Amor, déjate envolver por mi locura.

Que mi piel te llora, y mi cuerpo te necesito más que nunca.
Enrédate entre mis brazos, déjame sentir tu calor, tu pasión, tu ser.
Aún siento, tu voz, tu sabor y el olor de tu piel y me nubla el pensamiento.
Yo te haré tocar el cielo y el infierno.
Haz poesía de nuestros latidos desbocados y nuestros gemidos de placer.
Renace en mi ser y rinde a nuestras almas, llénandome de ti como nunca.
Callemos nuestras almas, siendo uno, sin prisas, sin miedos, sin porqués.

XX