Aunque tenga la ilusión de esperar toda una vida sin enfermarme, no se cumplirá, lo pensado fue muy lindo en una crisis en la que viví. Me olvidé a carta cabal que el cielo seguía, y que no es casualidad mirar sin recordar, sus regalos quedarán por siempre en mi mente. Su beso en la frente significará la luz que apague mis temores y diga un te extrañaré como despedida. En cada año que pasé no solo en una fecha tendré como despertador su voz, sino que me acompañará en cada mañana en la que esté vivo de verdad. Al culminar, mis lágrimas y el frío, se irán convirtiendo en un tiempo de paz. Con mucho cariño tu papá.
OPINIONES Y COMENTARIOS