A la chica del columpio
«Mi voz buscaba el viento para tocar su oído»
Pablo Neruda. Poema XX

¡Malditas sean las circunstancias
que me han privado del momento
de verte amando una sala repleta!

Condenado eternamente sea, al más
profundo infierno, el instante en que mi alma
fue privada de la presencia del arte tuyo. 

Mas ten en tu saber presente,
que en los arreboles que vemos
desde lugares diferentes,
está mi corazón presente
soltando al viento aplausos y vítores,

y a través de las pantallas
que muestran la realidad doblada
observo gozoso tu alma,
en otra persona sublimada. 

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