Dejarte ir

Dejarte ir

Ananké

07/07/2021

Dejarte ir, como la monotonía deja ir el deseo, pasando tiempo frente al espejo tratando de ver lo que nos mantuvo unidas, buscando en mí aquello que nos dejó ser, que nos dio vida. Las estaciones ahora desconocen los tiempos, en medio de este caos enero se hace invierno con mis lágrimas, mientras diciembre ríe psicótico en el desierto de tus sentimientos. Es solo dejarte ir, pensé; es solo cerrar los ojos para no verte más… suponer no estar en los lugares que guardan recuerdos ambientando lo que fue, evitarlos; como único camino a una posible cura.

Hasta el ayer del tiempo de hoy, me hice consciente de perder, de lo que sentía, el ayer dejó al hoy en el sinsabor del estallido súbito de una verdad irremediable, tú te habías ido y yo había perdido. Esa conciencia tardía es el peor karma, me dije; su destino es llegar tarde al banquete de la razón objetiva, siempre vulnerable, atemporal, entrópicamente egoísta.

Ya no habrá más portarretratos que exhibir en aquella pared, los recuerdos no quieren colgarse, no quieren dejar que el polvo los desvanezca, que la oscuridad los nuble; hoy no seremos más lo que eras antes, mañana será un extraño despertar en una cama para dos. El odio solo deja de cesar en el espacio latente de esta ignorante despedida, no vislumbrar soluciones por esta miope perspectiva; hoy no tenemos más presente que el de aquel día, una carga de arrepentimientos lacerantes se pasean en las noches frías, reposan cálidos en mis pensamientos, hogar de mis desdichas. Dejarte ir; para entrar al valle infinito de mi vulnerabilidad, dejarte ir; porque era lo único realmente necesario.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS