7 PK2 capitales

Se encontraban en una reunión un circulo siete personas, cada una sentada en su silla, con una cara triste cuando en eso llego un sacerdote, -“buenos días lamento haber llegado tarde peor tuve un contra tiempo, soy el padre Zaid y ya saben para que estoy aquí, vengo a escucharlos y a que expulsen los sentimientos que quieran, aquí ya es el último día para ustedes”- dijo el padre Zaid.

Todos los presentes se miraban, ellos se veían tristes, nerviosos, se tocaban las manos, unos más tranquilos, -“alguien desea empezar primero, dar la iniciativa y contar su historia”- dijo el padre Zaid mirando a cada uno, un hombre de contextura robusta, que mostraba mas tranquilidad levanto la mano, -“inicia hijo por favor te escuchamos, y ante todo te agradezco ser el primer voluntario”- dijo el padre Zaid.

Ira: -“Mi nombre es Imanol tengo 58 años, trabajo arreglando televisores en el mercado, yo tenía 38 años antes de que mi vida me cambiara, vivía una vida plena para mí, tenía mi esposa Dora y una hija de 7 años que se llama Dorali, yo muy tranquilo era, me consideraba un padre cariñoso y un esposo amoroso, no tengo vicios, no sé en que falle, solo sé que la ira me llevo acometer el acto que me lamente por toda mi vida, mis clientes se iban contentos por mi trabajo que realizaba”- dijo Imanol recordando.

-20 años atrás, se encontraba Imanol en su puesto de trabajo, -“me ha quedado muy bien el televisor gracias Imanol”- dijo un hombre muy agradecido, -“es mi trabajo y hago lo mejor que se pueda mi buen amigo”- dijo Imanol amable, despidiéndose de su amigo, -“Imanol aquí está el recibido del agua, de la luz, del gas necesito dinero y para hacer las compras en el mercado”- dijo una mujer seria, golpeo su mesón de trabajo, -“Dora recién estoy empezando a trabajar podrías esperar”- dijo Imanol avergonzado, veía sus vecinos de trabajo que lo miraban, -“¡y mientras que voy a comprar en el mercado, con qué dinero cocino, necesito dinero para comer, tu hija necesita alimentarse y los servicios como se van a pagar!- dijo Dora molesta, -“ya lo sé, pero mira, no tengo mucho dinero tengo solo un sencillo”- dijo Imanol revisando su caja, y mostrándole que había muy poco dinero –“pues necesito dinero y aunque sea para cocinar un atún en lata alcanza”- dijo Dora arrebatándole el poco dinero que había, -“¿sabes porque te va mal?, porque tus cobros de servicios son muy bajos, deberías aumentar los precios de tu trabajo, no tienes ambiciones ya no seas conformista, la gente paga a lo que tú les digas, sino que se compren un televisor nuevo que les va a salir más caro, ¿porque eres tan mediocre dime?”- dijo Dora molesta, sujetaba de la mano a un niña, -“¡papá!”- dijo Dorali, yendo abrazarlo, -“te dejo a tu hija iré al mercado”- dijo Dora seria, -“está bien, pero no te demores”- dijo Imanol, -“me demoro porque tengo que buscar los precios más bajos para que me alcance la comida para el día, y anda buscando mejor otro empleo porque este no te rinde para llevar una vida decente”- dijo Dora molesta se marchó, -“¿cómo te fue hija en la escuela?”- dijo Imanol sonriente, -“bien papá, hoy salimos temprano”- dijo Dorali sacando su cuaderno, Imanol le acaricio su cabeza, -“te pareces tanto a mi madre, Dorali sabes que te quiero mucho hijita y yo me voy a esforzar para que no te falte nada”- dijo Imanol sonriente, -“yo también te quiero mucho papá, sabes … necesito nuevos zapatos”- dijo Dorali abrazándolo y mostrándole sus zapatos que estaban ya viejos y con un agujero, Imanol triste se puso, -“¡a ver por favor necesito que me arregle el televisor que de nuevo se me descompuso, si no arreglas bien este televisor llamare a la policía por charlatán porque yo ya te pague!”- dijo un hombre llegando molesto y algo apresurado, Imanol se disculpó, le dijo a su hija que lo espere mientras lo atendía al hombre molesto.

Imanol estaba en su casa con su hija se encontraba almorzando, -“ de mi próximo trabajo te comprare un par de zapatos, espérame un poco si hijita”- dijo Imanol sonriente, -“si papá, gracias”- dijo Dorali sonriente, -“pues con ese atuendo de dar lastima nada mas para, no hagas promesas que no puedes cumplir, a mi antes de casarnos me hiciste tantas promesas y ninguna las cumpliste puras miserias”- dijo Dora seria, Imanol y Dorali la miraron tristes, -“deberías darme las gracias a mi que yo soy la que cocina la que se mata trabajando en esta casa como burra”- dijo Dora seria, -“no lee hablas así a la niña”- dijo Imanol , -“pues tu solo das dinero y tienes listo tus cosas pero quien lava, plancha, cocina, barre deja la niña en al escuela y ve todas esas cosas, quien hace mas trabajo y no me pagan”- dijo dora enojada, -“ya vete a tu cuarto luego lo quiero limpiecito ordenado Dorali, no quiero juguetes tirados por el suelo ni tu ropa”- dijo Dora, -“si mamá” dijo Dorali, -“Dora porque paras de muy mal humor yo también me esfuerzo en el taller me quedo hasta tarde paro casi doce horas fueras de casa”- dijo Imanol, -“sentado en tu silla conversando con tus amigos de los puestos del costado en cambio yo aquí encerrada, mírame como estoy desarreglada, con mis manos maltratadas si hubiera sabido que iba tener una vida así jamás me hubiera metido contigo”- dijo Dora molesta, -“no digas eso por favor”- dijo Imanol, -“ya no quiero hablar, me pusieron de mal humor, apresuraste en comer o lavas tú el plato”- dijo Dora enojada, se fue a la cocina.

Imanol estaba en su trabajo, cuando llego el dueño quien le alquilaba el puesto, muy molesto se veía, -“si no pagas te voy a tener que desalojar así que mejor dime ¿cuándo me vas tener el dinero?”- dijo el hombre, -“Clemente espérame una semana por favor, te prometo que luego te voy a pagar, solo dame una semana”- dijo Imanol preocupado, -“yo no vivo de esperar a la gente, si no me pagan pues se van, tu sabes cómo es el negocio aquí, y si mañana mismo no tienes el dinero te echo con tus cosas ya te dije”- dijo Clemente enojado, Imanol triste lo miro irse, -“ese tipo no tiene compasión, las ventas están bajas, dime necesitas dinero que te preste”- dijo su amigo, acercándose al puesto, -“Elías gracias, si voy a necesitar de tu ayuda de nuevo yo te prometo que cuanto consiga te pago todo lo que te debo”- dijo Imanol, -“tranquilo amigo , somos como hermanos así que yo encantado te presto”- dijo Elías, -“muchas gracias a pesar que te debo me sigues prestando, pero con este dinero, pagare a Clemente, necesitare más para pagar mis recibos de los servicios”- dijo Imanol, -“está bien yo te prestare una cantidad ahora y mañana temprano te presto para el puesto así lo vas a pagar por la tarde a don Clemente, pero ya sabes cuándo puedas me los pagas”- dijo Elías sonriente, -“muchas gracias amigo, como tu son amigos los que se valora”- dijo Imanol dándole un abrazo de agradecimiento.

Imanol llegaba a su casa y escuchaba un llanto, cuando entro apresurado, vio a su hija llorar, -“ya no me pegas mamá”- dijo Dorali suplicando mientras lloraba, -“¿porque la pegas?”- dijo Imanol abrazando a su hija, -“¡porque, porque es una malcriada!, su profesora me dice que se está portando mal en la escuela, incluso mira sus tareas está muy distraída que no trae buenas calificaciones, esta reprobada”- dijo Dora enojada tenía un cinturón en las manos, –“pero ese no es motivo para pegarle, yo le ayudare a estudiar, toma el dinero para que pagues los recibos del agua y luz”- dijo Imanol, -“¿de donde sacaste dinero?”- dijo Dora seria, -“me lo presto un amigo”- dijo Imanol, -“¿que amigo?”- dijo Dora seria, -“me lo presto Elías”- dijo Imanol, -“te vas a seguir endeudando con ese tipo, luego no te quejes cuando nos cobra los intereses porque sabes que nada es gratis en esta vida”- dijo Dora enojada, -“Elías es un buen amigo no me cobrara intereses” dijo Imanol, -“que ingenuo eres algún día te dará un puñal por la espalda” dijo Dora enojada, -“iré a enseñar sus tareas a mi hija”- dijo Imanol serio, -“necesita mano dura y tú eres muy débil para enseñarle eso, por eso no tienes carácter , no tienes agallas ya si te haces llamar hombre”- dijo Dora seria, Imanol la vio serio cuando fue al cuarto con Dorali que no dejaba de llorar, -“ya mi amor no llores, hablare con mamá para que no te pegue más sí, pero tienes que estudiar más, haber hagamos las tareas juntos”- dijo Imanol consolando el llanto de su hija, -“papá, mi mamá no me pego por mis tareas, sino porque la escuche hablando por teléfono”- dijo Dorali, -“¿la escuchaste hablando por teléfono y que escuchaste?”- dijo Imanol intrigado, -“me dijo que no vaya a decirte nada”- dijo Dorali, -“haber cuéntame será un secreto entre ambos”- dijo Imanol, -“escuche que habla con ese hombre, creo que es el mimo que viene a la casa”- dijo Dorali, -“¿que viene a la casa, de que hombre hablas hija?”- dijo Imanol sin entender, -“un señor viene por las tardes y mi madre me encierra en el cuarto para que no salga”- dijo Dorali, -“ese hombre a que hora viene”- dijo Imanol, -“viene siempre por las tardes después que almorzamos”- dijo Dorali secándose sus lágrimas, Imanol se quedó sorprendido por lo que escuchaba.

Imanol estaba en su cara pensativo pro lo que dijo su hija, miraba Dora dormir profundamente, no podía dormir tenía dudas, preguntas que mañana resolvería se decía él. Al día siguiente iba pensativo a su trabajo, cuando llego a su puesto estaban sus cosas afuera, -“pero que está haciendo Clemente, son mis cosas”- dijo Imanol, viendo sus cosas de trabajo afuera del puesto, -“te dije que si no me pagabas te echaba del puesto, es más se lo voy a alquilar a otro cliente que promete pagar puntual”- dijo Clemente serio, -“pero yo donde voy a trabajar no me corras por favor”- dijo Imanol desesperado, -“si no tienes dinero mejor te vas, ¡saca tus cosas de aquí y márchate!” dijo- Clemente serio, -“por favor dame unos días mas Clemente, no me corras”- dijo Imanol, -“lo siento tus problemas no son los míos”- dijo Clemente marchándose, Imanol veía a sus cosas, sus compañeros de los puestos de alado que se acercaron, -“te guardamos tus cosas amigo Imanol”- dijeron los demás comerciantes, -“gracias, iré a buscar a Elías que me preste el dinero”- dijo Imanol triste soltaba lágrimas , se marchó.

Al llegar a su casa hablaba solo, -“Elías no está en su casa,¿ ahora que hago?”-, en eso escuchaba gemidos, se quedó pensativo, frio cuando entro en su cuarto, veía a Dora con un hombre tenido intimidad, -“¿qué haces aquí?”- dijo Dora enojada se cubría, Imanol se quedó frio al ver la escena, su esposa con Elías, -“amigo no estabas trabajando”- dijo Elías sorprendido, -“¡mamá sácame de aquí mamá!”- se escuchaba los gritos de su hija encerrada en su cuarto, Imanol los miro lleno de ira recordó rápidamente todo lo que había vivido, -“me engañas con mi amigo”- dijo Imanol queriendo llorar, -“lo que viste fue porque eres un poco hombre ni como amante sirves”- dijo Dora enojada, -“lo siento amigo pero tenía que cobrarme lo que te prestaba”- dijo Elías serio mientras se vestía, -“te dije que algún día tu amigo te iba dar un puñal por la espalda”- dijo Dora seria, -“mamá, mamá”- gritaba Dorali encerrada, Imanol se veía lleno de ira entro a la habitación con un grito.

(Canción de fondo, La cárcel de Sing sing- Alci Acosta), Se veía a Imanol que estaba en la cárcel, arrodillado estaba lamentándose, la policía llegaba sacaba el cuerpo de dos personas, sacaban a Imanol detenido con la camisa bañada de sangre, su hija la cargaban y lloraba, miraba su padre cuando lo subían a la camioneta de la policía siendo llevado a prisión. Cuando veía al padre Zaid llegar, -“piedad, piedad de mí, mi gran señor”- dijo Imanol llorando, -“¿qué te pasa hijo?”- dijo el padre Zaid intrigado al verlo de rodilladas, -“escucha triste hermano esta horrible confusión, aquí yo condenado a muerte estoy, yo tuve que matar a un ser que quise amar, que aunque estando muerta yo la quiero, al ver con su amante a los dos los maté por culpa de ese infame moriré, minutos nada más que quedan ya papá respirara, la silla lista esta , la cámara también, a mi pobre hijita que desesperada esta, entréguele este recuerdo de mi”- dijo Imanol llorando, -“hijo abogue para que no te den la pena de muerte, pero vas a dar 20 años de prisión, te dejaste llevar por la ira”- dijo el padre Zaid, -“gracias padre por favor solo cuide a mi hija padrecito no tengo nadie en el mundo, cuídela por favor que no se sienta sola”- dijo Imanol soltando lágrimas, el padre Zaid lo consolaba.

Luego de escuchar la historia de Imanol, un joven lo veía como se sacaba las lágrimas, -“por dejarme llevar por la ira eh perdido 20 largos años de mi vida, tiempo que debí pasarlo a lado de mi hija, me arrepiento de haberlo echo”- dijo Imanol llorando.

Soberbia: -“Tranquilo, ahora es mi turno de hablar”- dijo el siguiente joven, -“soy Salvador y tengo 34 años, luego de haber escuchado aquí a el compañero, me doy cuenta que la vida no se debe desperdiciar, yo también quite la vida alguien que ame, eso es algo que no te deja dormir pero donde este ella mirándome me ha de perdonar, porque yo también me arrepiento de lo que hice”- dijo Salvador, los demás lo miraban atentos, –“te escuchamos Salvador”- dijo el padre Zaid.

Salvador despertaba en su cama , se estiraba los brazos y sonreía, -“hoy es el día”- dijo Salvador bajando de su cuarto, -“salvador, hijo”- dijo su madre, -“madre buenos días, papá buenos días”- dijo Salvador contento, -“que buen humor amaneciste hoy”- dijo su padre, -“hoy me traen mi auto, saben lo contento que estoy por estrenarlo”- dijo Salvador sonriente, -“te lo mereces hijo, has mostrado ser un buen alumno en la universidad así que espero que seas responsable conduciendo”- dijo su padre, -“papá soy el mejor conduciendo, ya me dieron mi licencia de conducir, así que espero con ansias que llegue el auto”- dijo Salvador sonriente, luego de despedirse de sus padres tomo su mochila y salió rumbo a la universidad.

Al llegar a la universidad, veía una joven de cabello rizado que fue hacia él y lo abrazo, -“como estas mi amor”- dijo ella sonriente dándole un beso, -“muy bien preciosa y tú que tal”- dijo Salvador, -“bien gracias, me encanta verte tu peinado lo traes como un muñequito de pastel”- dijo la jovencita, -“Aida mi amor, soy un muñeco lo sabes, aquí en la universidad soy el mejor de todos”- dijo Salvador, -“hola Salvador, me entere que sacaste la calificación más alta de la clase, ¿crees que pueda formar parte de tu grupo?”- dijo un compañero, -“¿parte de mi grupo?, no lo sé, veremos, primero debo ver candidatos y luego escojo,  ¿te parece si haces fila Iñaqui?”- dijo Salvador abrazando a su enamorada se fue con ella, -“el pobre de Iñaqui necesita levantar las calificaciones deberíamos ayudarlo”- dijo Aida, -“bueno que se esfuerce estudiando no, no voy a resolver su problemas, además míralo esa ropa que trae va a bajar mi imagen ante la universidad si me ven con él”- dijo Salvador, -“¿porque eres así, no me gusta la vanidad que tienes?”- dijo Aida, -“mi amor, yo sé que te gusto y mucho, soy el mejor partido de la universidad te sacaste la lotería conmigo”- dijo Salvador sonriente la abrazo y entraron al salón de clases.

Salvador estaba frente a todo la clase dando una exposición, -“¿alguna pregunta?”- dijo Salvador, un compañero levanto la mano, -“dime Salvador ¿puede esta cirugía hacerse sin necesidad de internase?”- dijo su compañero, Salvador sonrió miro al profesor, -“se nota que no has estudiado compañero mío, esta cirugía son ambulatorias y se internan por un periodo de 4 horas antes para tomarse los exámenes necesarios, como presión arterial, frecuencia cardiaca, parece que no estás en clase de medicina amigo, discúlpame pero tu pregunta es muy novata para el ciclo que estamos”- dijo Salvador, sus amigos se rieron, el profesor sonrió también, su compañero quien hizo la pregunta solo se avergonzó.

-“Creo que no debiste decirle eso, hiciste que se avergonzara”- dijo Aida, -“es que la pregunta que hizo es de novatos estamos en séptimo ciclo de medicina, ósea como va preguntar eso, que tiene en la cabeza se nota que hay gente que no tiene cerebro”- dijo Salvador serio, Aida lo miraba seria, -“felicidades alumno Salvador, como siempre buena exposición”- dijo el profesor que cruzaba por su costado, Salvador le agradecía, -“lo vez me felicitan, soy el mejor de la clase, soy el chico más guapo y popular, tengo a la novia más hermosa del mundo, qué más puedo pedir”- dijo Salvador sonriente, -“a veces no se qué te vi, tu soberbia me aleja”- dijo Aida, -“mi amor, es que no estoy a nivel de estas personas de esta universidad”- dijo Salvador, -“¿entonces porque no te fuiste a una privada, porque estas en esta que es publica para gente que no tiene suficiente dinero?”- dijo Aida, -“porque mi padre estudio aquí, los profesores lo conocen y debo aprovechar eso”- dijo Salvador sonriente.

Al llegar a casa estaba su madre, -“te tengo una sorpresa Salvador”- dijo su madre, Salvador sonrió y fue con ella, cuando llegaron al jardín veían a su padre que estaba con su auto, -“papá lo trajeron, esta espectacular”- dijo Salvador entusiasmado fue y abrazo a su auto en vez que a su padre, dejándolo con los brazos abiertos, abría las puertas y revisaba todo, -“hijo esto es por demostraste ser el mejor en la clase y porque tus maestros me dieron muy buenos comentarios sobre tu rendimiento en la clínica, espero que me ayudes a seleccionar a los mejores para que trabajen para nosotros”- dijo su padre contento, -“¿los mejores?, papá yo soy el único que destaco de ahí, los demás son una bola de mediocres”- dijo Salvador sonriente –“puedo ir a estrenarlo”- dijo salvador, -“claro que sí, si quieres vamos a ver a tus tíos”- dijo su madre, -“¿mamá como que ir a ver a los tíos? por favor, iré a mostrarle a mi novia y a mis amigos que ya tengo auto ya regreso”- dijo Salvador encendiendo el auto se marchó, su madre miro a su padre se le quito la sonrisa, -“déjalo es joven”- dijo su padre sonriente entro a la casa.

Aida estaba en casa con un par de amigos, –“la verdad que a veces se porta de una manera muy creído, se cree superior a los demás solo por su posición social , porque su padre es médico”- dijo su amiga de Aida, -“o por sus cualidades, y con nosotros demuestra un trato distinto al que era antes, ahora ya nos mira con desprecio”- dijo su amigo de Aida, -“si ha cambiado, no era como al principio lo conocí, es que sus padres lo presionan mucho y siempre lo premian con viajes regalos”- dijo Aida decepcionada, -“ luego nos presume lo que ha conocido y lo que tiene, ¿dime va a formar grupo con otros y prefiere hacer sus trabajos solo?, porque dice que los demás lo retrasan”- dijo su amiga, -“dice que está en un nivel avanzado por encima de nosotros”- dijo el amigo de Aida, me entre que lo han invitado a la fiesta de Juan miguel, aunque el aun no me ha dicho nada, pero la verdad estar con gente que ve por encima del hombro a los demás no me sentiría bien”- dijo Aida triste.

se detuvo el auto frente a casa de Aida, se escuchaba el claxon, -“quien hará tanta bulla”- dijo su amigo asomándose por la ventana, -“Aida mi amor baja por favor, vamos a dar una vuelta”- dijo Salvador sonriente, -“es Salvador y tiene un auto ahora se le subirán más los humos”- dijo su amiga, -“me dijo que le iban comprar uno pero no sabía que tan pronto”- dijo Aida, -“¿qué harás iras a verlo?”- dijo su amiga, -“chicos es mi enamorado, por favor no se molesten pero iré hablar con el, que cambie su actitud con nosotros nuevamente”- dijo Aida, -“será difícil de hacerlo, bueno te dejamos, otro día venimos a estudiar”- dijo su amiga, -“solo espero que no te vuelvas como él y caigas en el abismo”- dijo su amiga, ellos salieron del cuarto de Aida, -“ahora salgo”- dijo Aida.

Salvador veía salir a sus amigos de Aida, -“hola chicos que les parece mi auto, verdad que es una preciosidad, algún día lejano tendrán uno ustedes”- dijo Salvador, ellos lo veían y se retiraron, -“¿envidia?”- dijo Salvador sonriente los veía irse. –“Está muy bonito tu auto, ¿cuándo te lo compraron?”- dijo Aida –“hoy me lo trajeron y como eres mi enamorada quise dar la primera vuelta contigo, que te parece si vamos al muelle”- dijo Salvador, -“esta bien”- dijo Aida sonriente, Salvador subía a su auto y se marcharon.

Cuando estaban en el muelle estaban abrazados mirando el mar, -“Salvador noto que has cambiado, ya no eres el chico sencillo, amigable que eras antes, ahora te reúnes con nosotros que se son muy soberbios, no quieor que te vuelvas como ellos”- dijo Aida, -“¿quieres que sea el mejor medico?, debo juntarme con los mejores no con perdedores”- dijo Salvador, -“¿ósea que mis amigos y yo somos perdedores?”- dijo Aida seria, –“excepto tu y yo somos los únicos que destacamos en esa universidad”- dijo Salvador, -“lo dices porque no tienen el mismo nivel económico que tú?, por eso hablas así?”- dijo Aida seria, –“seguro te meten idea los envidiosos de tus amigos”- dijo Salvador serio, -“también fueron tus amigos alguna vez, ¿ahora porque te has vuelto popular ya no lo son?”- dijo Aida seria se separó de él, -“cuando necesiten empleo en la clínica donde trabaja mi padre y ahí los quiero ver, convenidos”- dijo Salvador serio, -“sabes que quiero irme a casa”- dijo Aida, Salvador serio la miro, subieron en su auto y se marcharon.

Al día siguiente, Salvador llegaba a la universidad en su auto sonriente, varios veían su auto nuevo, -“¡que buen auto, esta padrísimo!”- dijo un compañero queriéndolo tocar, -“¡hey espera no lo toques!, ¡es nuevo y no quiero que lo ensucien con sus manos”- dijo Salvador serio, sus compañeros de clases lo vieron y se fueron, -“hola amor”- dijo Salvador, Aida lo veía seria, -“¿estas molesta aun?, no me refería a ti cuando hablaba de todos estos mediocres, tu eres mi enamorada, sabes que te quiero mucho y no me gusta verte molesta”- dijo Salvador tomándole de las manos, -“no me gusta la actitud que tienes, Salvador debes cambiar sino harás que esta relación no funcione”- dijo Aida, -“no digas eso por favor, sabes que lo que más quiero en esta vida eres tú, vamos mi amor ya no estés molesta conmigo, mira hoy abra una fiesta de Juan Miguel me ha invitado y quiero que me acompañes, ¿sí?, vamos mi amor, di que sí”- dijo Salvador haciendo su cara de niño regañado, Aida lo miro, -“está bien, pero no me sentiré muy cómoda, así que solo estaré un momento ”- dijo Aida, -“lo que tú digas”- dijo Salvador sonriente la abrazo.

Era la hora de la fiesta, estaban en su auto rumbo a la fiesta, se detuvo en un semáforo, se acercaron dos niños huérfanos de la calle, -“señor le limpio el auto por favor para ganarme un dinerito para mi comida”- dijo el niño, –“como crees que van a tocar mi auto con tus manos cochinas, vete de aquí mugroso, lárgate”- dijo Salvador enojado, -“¡Salvador! no debes hablarme así”- dijo Aida –“estoy cuidando mi auto y seguro iban a robarnos”- dijo Salvador enojado, los niños asustados se fueron, -“fuera vándalos, deberían estar presos”- dijo Salvador serio, mientras limpiaba su auto donde el niño había puesto la mano, Aida lo miraba sorprendida.

Estaban en la fiesta, Salvador estaba con su amigos bebiendo se estaba divirtiendo, Aida estaba a un lado se veía aburrida, sola sin nadie con quien platicar, cuando un grupo de amigas se sentó cerca de ella, -“sabías que Salvador me dijo que me hará ingresara la clínica de su padre, creo que le gusto”- dijo una jovencita, Aida la escuchaba, -“¿Salvador te dijo eso?”- dijo Aida seria, –“si, ¿tu quien eres?”- dijo la joven, -“soy la enamorada de Salvador”- dijo Aida seria, -“él no me había dicho que tiene enamorada”- dijo la jovencita sorprendida, -“es mi enamorado y no creo que te haya dicho eso”- dijo Aida seria, -“no miento él me dijo eso, además dudo que seas su enamorada no te ves de su clase”- dijo la jovencita riéndose con sus amigas, Aida le tiro la bebida en su vestido, -“¡que eta pasa estúpida!”- dijo la joven molesta, Aida se retiró, -¿qué pasa mi amor?- dijo Salvador acercándose, -“¡quiero irme a mi casa!”- dijo Aida molesta, -“¿pero porque, que pasa, no te estas divirtiendo?”- dijo Salvador, -“claro que no, me dejas sola, tú te estas divirtiendo no yo, quiero irme”- dijo Aida, sus amigos de Salvador se reían de la escena que le hizo Aida, -“puedes compórtate, no me hables así, me estas haciendo quedar mal ante mis amigos”- dijo Salvador serio la sujeto del brazo, -“suéltame, ¡si te interesan ellos, pues quédate con ellos!”- dijo Aida molesta se fue, -“ya regreso amigos, enseguida dejare a mi enamorada y vuelvo”- dijo Salvador serio, salió tras de Aida.

-“¿se puede saber qué te pasa por que te portas así?”- dijo Salvador, -“¡porque me acabo de enterar que andas ofreciendo trabajo a las amiguitas tuyas y no saben que tienes enamorada, me estas ocultando, dime que ocultas mas, acaso te avergüenza decir que soy tu enamorada es eso, si es así dime para terminar esto”- dijo Aida molesta, -“lo que te dijeron fueron chismes, interpretaron mal porque les gusto”- dijo Salvador yendo tras ella, pero no se detenía, -“Aida vamos te dejó en tu casa si”- dijo Salvador, -“estas mareado no puedes conducir así”- dijo Aida seria, -“te dejó en tu casa y vamos hablando, sube por favor”- dijo Salvador serio, -“¡no!, ¡estas borracho!”- dijo Aida, sus amigos los miraban, Salvador serio la veía, -“me estas haciendo quedar en vergüenza”- dijo Salvador, -“pues lo lamento pero no me iré contigo”- dijo Aida, él abrió la puerta de su auto y la metió, -“¿qué haces Salvador?”- dijo Aida enojada siendo forzada a entrar, Salvador cerró la puerta subió al auto y se marchó.

-“No puedo creer que me hagas pasar estas escenas, ¿Qué no vas hablar?, esta bien Aida pero quiero que reflexiones como te has portado, me hiciste quedar como un idiota”- dijo Salvador enojado, Aida no lo miraba, no decía nada, -“tomare este camino que es menos transitado para llegar rápido que tengo que regresar a la fiesta”- dijo Salvador serio, Aida no lo veía voltio al cara y soltó una lagrima, rápido se la seco, (Los Doltons- El último beso) -“íbamos los dos al anochecer, oscurecía y no podía ver, yo manejaba iba más de cien, prendí las luces para leer, había un letrero de desviación el cual pasamos sin precaución, muy tarde fue y al frenar , el carro hasta al fondo fue a dar. Al vueltas dar del carro salí por un momento pedir la razón al despertar hacia ella corrí y aún con vida la pude hallar , al verme lloro me dijo amor, allá te espero donde está el señor él ha querido separarnos hoy abrázame fuerte porque me voy, así la abrace y al besarla se sonrió, después de un suspiro en mis brazos quedo…¿Por qué se fue y porque murió, porque el señor me la quito?, se ha ido al cielo y para poder ir yo, debo también ser bueno para estar con mi amor…)- decía Salvador abriendo los ojos con lágrimas, termino de contar su historia, sus compañeros lo miraban.

-“Por conducir ebrio, ocasionando la muerte de mi enamorado me dieron 12 años de prisión, pero mi condena la voy llevar siempre, por mi culpa  de mi soberbia se fue el amor de mi vida”- dijo Salvador triste con voz quebrantada.

El padre Zaid se acercó a Salvador, -“estoy seguro que tras tu cambio, Aida ahora está tranquila y feliz por ti, ahora debes ser lo contrario humilde para volver a ser el que ella conoció y se enamoró”- dijo el padre Zaid, Salvador le agradecía por las palabras.

Gula: -“yo no mate, pero mi hambre voraz me llevo a cometer actos equivocados”- dijo un hombre gordito, -“soy Gerald tengo 24 años, padezco de hipotiroidismo aquí en la cárcel me detectaron esta enfermedad, tras verme que mi apetito era insaciable, gracias al padre Zaid por traer al médico y ayudarme a controlar esta enfermedad que me llevo a cometer un gran error en mi vida”- dijo Gerald mirando al padre Zaid

Años atrás, Se veía a un niño en la cocina metiendo sus manos en las ollas de comida, su madre le golpeo las manos, -“puedes esperar hasta la cena Gerald, si vas a comer así vas a reventar”- dijo su madre seria, -“parece un cerdo, come demasiado”- dijo su hermano mayor, Gerald avergonzado los miro, -“es que tengo hambre, mucha hambre”- dijo Gerald avergonzado, -“ya comiste, si tienes hambre bebe agua, eso tranquilizara tu ansiedad y te dará saciedad”- dijo su madre seria, -“pero eso no me gusta madre, me gusta más comer”- dijo Gerald, -“¡hay ya basta Gerald!, me desquicias puedes irte a tu cuarto”- dijo su madre molesta. Era la hora de la cena, su madre y hermano lo veían comer con desesperación y pedía más, -“ya no hay, es suficiente por hoy”- dijo su madre enojada, -“la verdad que se me quita las ganas de comer al verte tragar de esa manera”- dijo su hermano, -“que vergüenza me das, eres capaz de comerte el plato, por favor modérate”- dijo su madre seria, -“lo siento mamá”- dijo Gerald avergonzado.

En una fiesta de cumpleaños infantil de una amiga, se encontraba la madre de Gerald conversando con sus amigas, veía aun grupo de niños jugar pero no veía Gerald, -“¿done esta mi hijo?”- dijo la madre de Gerald, cuando en eso lo veía detrás de la mesa comiendo los bocaditos, comiendo pastel, -“se está comiendo el pastel Gerald”- dijo la niña cumpleañera gritaba, su madre avergonzada lo sacaba de las orejas, -“que vergüenza me haces pasar, me avergüenzo de ti, no pareces persona sino un animal”- dijo su madre, -“perdóname mamá, es que tenía mucha hambre y no podía esperar más”- dijo Gerald, -“deja de lamerte las manos Gerald, me desesperas”- dijo su madre, pegándole en las manos, -“discúlpame mamá”- dijo Gerald soltando lágrimas.

Una noche, Gerald no podía dormir, se movía de un lado a otro en su cama, se puso de pie, en la cama de alado estaba su hermano dormido, él bajo muy despacio para no hacer ruido, al llegar a la cocina abría la refrigerado y se sentaba a comer lo que veía. Al día siguiente, su madre entraba molesta a su cuarto, -“te comiste la comida de hoy, ya estoy a cansada de ti, eres un marrano que tragas”- dijo su madre empezando a darle de golpes, Gerald lloraba mientras pedía perdón.

Gerald estaba ya un adolescente con 17 años, estaba en la escuela, veía sus compañeros salir a la clase de gimnasia, él se quedaba a rebuscar entre las cosas de los demás alumnos, si había algo de comer, lo juntaba todo y se ponía a comer en la parte trasera del salón, -“seguro fue Gerald, si nuevamente fue Gerald”- dijeron sus compañeros quejándose con la profesora al ver sus mochilas vacías, Gerald los veía avergonzado , todos le lanzaban basura, -“¡ya basta chicos!, Gerald vuelves hacer una cosa como esta y vas a estar expulsado, porque no es primera vez que les robas, mañana tendrás que ingresar a la escuela con tu madre”- dijo su profesora haciéndole un reporte, -“por favor profesora no me haga un reporte sino mi madre me va a castigar”- dijo Gerald asustado, -“esto es para que entiendas, ya me asustas con tu hambre insaciable”- dijo la maestra seria, Gerald agachaba la cabeza y se iba a su lugar soltando lágrimas.

Al llegar a casa su madre lo veía, -“ya no sé qué hacer contigo, sabes que creo que mejor deberías salir de la escuela, ¿para qué estudias? si solo sabes comer, no eres bueno para nada”- dijo su madre molesta, -“perdonadme mamá”- dijo Gerald –“sabes que vete a tu cuarto y no bajes hasta que yo te lo diga, vete que tu cara me enferma” dijo su madre, Gerald subía a su cuarto, se sentó en su cama y esta se rompió las patas.

Su madre hablaba con la maestra, mientras Gerald estaba afuera del salón, avergonzado, -“hola Gerald, ¿cómo estas?”- dijo su compañera de clases, -“se podría decir que mal, mi madre me dice que esta es la ultima oportunidad otro reporte más y me sacara de la escuela”- dijo Gerald triste, -“tu apetito es desmedido, no has probado ir a ver a un médico, ocupar tu mente en otras actividades que pensar en comida”- dijo su compañera, -“gracias Luz pero no puedo, no me puedo llenar fácilmente, mi hermano dice que mi estómago es de un elefante”- dijo Gerald, -“para mí que debe ser una enfermedad, esa ansiedad por comer”- dijo Luz, -“¿que enfermedad produce comer tanto?, soy un puerco”- dijo Gerald, –“no digas eso, solo eres humano no un animalito, mira come verduras, frutas te llenan mas rápido porque tiene mucha agua, eres un gordito simpático”- dijo Luz dándole un manzana, -“gracias Luz”- dijo Gerald sonriente, ella le sonrió y se marchó, -“Luz es tan linda, ¿acaso le gustare?, no como una chica como ella se va fijar en alguien como yo”- dijo Gerald tocándose el abdomen, -“pero si me regala esta manzana, dijo que soy simpático, tal vez le gusto”- dijo Gerald sonriente se entusiasmo.

En casa Gerald se miró en su espejo, -“¿qué hago?, debo hacer dieta, ejercicios, eso debo hacer, delgado le gustare a Luz”- dijo Gerald decidió.

Garlad estaba en la mesa con su madre y su hermano, él tomaba mucha agua, comía ensaladas, -“¿de verdad piensas comer solo eso?”- dijo su hermano, -“Mike voy a demostrarte a ti y a mi madre que voy a bajar de peso empezare hacer dieta, para que ya no se avergüencen de mi”- dijo Gerald, Mike y su madre se empezaron a reír, – “pues eso está por vérselo lo ¿a quién quieres engañar?”- dijo su madre, -“eso no lo creo Gerald, tú en dieta”- dijo su hermano imitando el gruñido de un cerdo, Gerald los miraba, -“ya lo verán, ustedes no me tiene fe pero yo lo voy a lograr les voy a demostrar, porque hay una persona que si cree en mí, ya lo verán”- dijo Gerald.

En la escuela, -“hola luz, sabes hoy amanecí decido, estoy decidido hare dieta”- dijo Gerald empeñoso, -“enserio, que bueno Gerald, estoy segura que si te lo propones con esfuerzo lo vas a lograr”- dijo Luz sonriente le acaricio la mejilla y se marchó, Gerald sonreía y suspiraba, -“¿le gusto?”- dijo Gerald tocándose su mejilla. (Moenia- ni tu ni nadie Canción de fondo), Gerald estaba caminando por la calle hace ejercicios, intentaba conducir bicicleta pero eta se rompió la llanta en cuanto el subió a manejarla. Gerald que subía escaleras y ya estaba cansado, cuando miro el letrero que decía tercer piso. Estaba comiendo frutas, verduras y tomaba más líquidos, se veía que hacia abdominales cuando intentaba se cansaba, -“tres, ya no puedo más”- dijo él cansado. Estaba saliendo de la ducha, empezaba oler, -“que rico huele, son galletas de coco”- dijo Gerald bajando apresurado, veía a su hermano Mike con sus amigos y amigas en una reunión,-“que haces aquí abajo sube a tu cuarto”- dijo Mike molesto, -“es que empecé a oler y creí que…”- dijo Gerald, -“bajaste a devorar todo lo que encontrarías, vete no vez que me avergüenzas, mis amigos se ríen de ti, márchate a tu cuarto”- dijo Mike serio, -“discúlpame”- dijo Gerald avergonzado veía a los amigos que murmuraban al verlo y se reían.

Gerald estaba en la escuela, -“¿cómo va la dieta?”- dijo Luz sonriente, -“bien, ya estoy bajando de peso”- dijo Gerald sonriente, -“así veo, sigue así no te rindas, vez que puedes”- dijo Luz, -“gracias a ti que me has dando ese apoyo de confianza, has visto ese rayito de luz en mí”- dijo Gerald, -“aprovechando, te quiero invitar a una fiesta que abra en mi casa, será el cumpleaños de mi madre y me dijo para invitar a unos amigos, me gustaría que fueras”- dijo Luz dándole la invitación, -“¿enserio quieres que vaya?, no te avergüenza que fuera una persona como yo”- dijo Gerald –“no, eres mi amigo y me gustaría que estés ahí para bailar un momento”- dijo Luz sonriente, -“gracias, ahí estaré, no te fallare”- dijo Gerald sonriente.

Estaba alistándose para la fiesta, -“¿enserio crees que tu amiga le gustas?”- dijo Mike riéndose, -“si, hay chicas que le gustan los gorditos”- dijo Gerald – “de verdad que das risa, le gustaran los gorditos, ¿ pero tú?, mírate Gerald tu estas muy pero muy obeso, una chica como ella jamás se fijaría en alguien como tú”- dijo Mike, -“Luz es distinta, es una en un millón, yo tendré suerte esta noche, tal vez le pida que sea mi enamorada”- dijo Gerald entusiasmado, –“que iluso eres, pero bueno cuando te despiertes de tu sueño, procura que la ciada no haga un gran agujero”- dijo Mike riéndose, Gerald serio lo miro y se marchó.

Cuando bajaba por las escaleras, su madre lo veía, -“solo espero que sepas comportarte y que no vayas atacar a la comida, no me hagas pasar vergüenzas, suficiente las tengo con tener un hijo como tú”- dijo su madre, -“despreocúpate, no te voy avergonzar”- dijo Gerald triste.

Al llegar a la fiesta, muy sonriente, buscaba con la mirada a Luz, -“pasa por favor toma asiento, muchas gracias por venir”- dijo Luz sonriente, -“gracias a ti por invitar estas guapísima, traje estos chocolates a tu madre espero que el gusten”- dijo Gerald, –“mucha gracias Garlad”- dijo Luz recibiéndolos. Cuando fue a sentarse en un lugar, la gente que estaba a su lado lo veía y murmuraban, el fingió no darse cuenta de las miradas con burla que le daban.

Era la hora de la cena, tenia tantas ganas de comer pero se detuvo de probar bocado, empezó la hora del baile, Gerald sonrió veía Luz, se levantó sonriente, se dirigía a ella para invitarle a bailar, cuando vio un joven apuesto que la tomo de la mano le dio un beso y salieron a bailar, él se quedó en plena pista mirándola, -“a un lado siéntate mastodonte”- dijo un hombre al tropezarse con él cuando bailaba, Gerald no dejaba de mirar a Luz, -“hola Gerald te presento a mi enamorado Gustavo”- dijo Luz sonriente, Gerald lo miro triste, -“¿tu enamorado…?”- dijo él decepcionado, -“que tal”- dijo Gustavo dándole la mano, -“vine a…, despedirme es que tengo también otro compromiso y pues me tengo que ir”- dijo Gerald triste, -“que pena, y yo que quería bailar también contigo, bueno, gracias por venir”- dijo Luz, Gerald fingió sonrisa, dio media vuelta, los ojos se pusieron rojos llenos de lágrimas, recordaba las palabras crueles de su madre, de Mike, de sus esfuerzos en hacer dieta, -“¿de que me sirvió la dieta, si no la tendré?”- dijo Gerald, veía el pastel de la fiesta, -“ya no vale la pena, nada…”- dijo Gerald dirigiéndose hacia el pastel y empezó a comerlo de forma desesperada, la gente lo miraba la forma tan rápida de comer, -“¿que le pasa a tu amigo?”- dijo Gustavo viéndolo comer, -“¿Gerald?”- dijo Luz asustada al verlo como comía, , -“oiga joven deje de comer así, muestre modales”-dijo el padre de Luz, -“¡déjame comer!, voy a comer hasta saciarme ya no me importa nada”- dijo Gerald soltaba lágrimas, comía todo lo que había en la mesa, –“oiga deténgase son para todos los invitados”- dijo el tío de Luz, Gerald lo empujo haciendo que se caerá, la gente asustada lo veía, otro hombre lo sujeto, Gerald lo embarro de pastel y lo golpeo, luego seguía comiendo, -“¡que alguien lo detenga!”- dijo la madre de Luz asustada, -“¿Gerald, que te pasa!”- dijo Luz sujetándolo del hombro pero él la empujo, la vio caerse, volteo y seguía comiendo mientras lloraba, -“¡como te atreves hacerle esto a una dama!, llamen a la policía”- dijo Gustavo sujetándolo, Gerald enojado lo golpeo, se lanzó sobre él embarrándolo de pastel por todo el cuerpo, al verlo de pastel cubierto lo mordió la nariz, Gustavo grito adolorido, -“¡detente Gerald, deténganlo!”- gritaba Luz asustada, la gente lo separaba, Gerald seguía comiendo y los empujaba, a quien se le acercara, se armaba un enfrentamiento.

Gerald estaba detenido en la cárcel, -“el joven que mordiste está en el hospital, los padres de tu amiga van demandarte por los desastres que ocasionaste, tienes una demanda por agresión, sabes no pienso hacer nada para ayudarte, es mejor que te quedes encerrado como animal, porque eso eres”- dijo su madre enojada, viéndolo a Gerald sé que se chupaba los dedos mientras lloraba, -“¡deja de lamerte, me desesperas!”- dijo su madre furiosa, – “nunca me has querido, no te importe, tal vez estoy enfermo, no me ayudaste a tratarme, por fin estando aquí por lo menos ya no te avergonzare madre”- dijo Gerald llorando, su madre lo veía y se marchó.

(Jose Augustin- Aguanta corazón) -“corazón dime a mí, porque yo siempre termino sin aliento, corazón no es así, te apasionas y en mi pecho hay sufrimiento, porque mejor no paras de soñar, era un deseo y nada más, y ahora que es lo que hago, para olvidar tanta dulzura que me está llevando a la locura, no es justo, así entra en mi vida, no es correcto dejar sin salida, no lo es, ahora aguanta corazón, ya que inventase esta pasión, yo te conté tenía miedo, amar no es tan solo un juego, ahora guanta corazón, tú ya no tienes salvación te entregas y te olvidas que tú eres yo..)- decía Gerald mirándose en la celda.

-«hable con tu madre, no sabes lo arrepentida que esta por haberte dejado solo todo este tiempo, la vida tampoco fue fácil para ella y tu hermano, creo que deberías hablar con con ellos»- dijo el padre Zaid, -«tantos años abandonados pero creo que todos merecemos una segunda oportunidad,  lo que me alegra es que el apetito desmedido de comer ya lo controle»- dijo Gerald aun con lagrimas sonrió.

Envidia: -“soy Eleonor tengo 27 años, el motivo que estoy aquí es por haber envenenado a un elenco completo de ballet, todo por envidia, por cegarme de envidia y no poder controlarme, este deseo por tener lo que mi hermana tiene… me llevo a ser una criminal, esta es mi historia”- dijo Eleonor mirando a todos.

Años atrás, se veía Eleonor, que miraba un traje de bailarina de ballet, ella lo acariciaba y sonreía, luego se tocó su nariz, -“soy narizona fea, por eso no entre a el club del ballet, por ser fea”- dijo Eleonor mirándose al espejo triste, se tocaba le rostro, -“Eleonor ponte de pie, tienes que preparar el desayuno de tu hermana”- dijo su madre molesta, -“ahora voy a mamá”- dijo Eleonor guardando su vestido de bailarina, -“mirando tu vestido, creíste que ibas a utilizarlo algun día, date cuenta hija no das para ser una bailarina, ellas son bellezas, y tú eres feíta, ellas tienen talento y tú eres una inútil lo mostraste en tu participación, hiciste el ridículo cayéndote al piso, nunca había pasado una vergüenza semejante peor la culpa la tuve yo por pensar que tu…., pero ya vete a la cocina ayudar tu tía si, rápido” dijo su madre, -“si mamá”- dijo Eleonor triste se fue apresurada.

En la mesa se encontraban su madre, su tía y su hermana, -“Barbe hija estoy tan orgullosa de ti, has llegado lejos y estoy segura que vas a brillar con el papel principal si eres una estrella”- dijo su madre, -“mamá aquí esta el desayuno”- dijo Eleonor, -“ aparte de fea eres muy lenta hermanita”- dijo Bárbara, -“perdón es que estuve buscando la mermelada”- dijo Eleonor, -“excusas es que no tienes talento, lo único que sabes hacer es cocinar”- dijo su madre, -“no deberías hablarle así”- dijo su tía, -“te recuerdo que estas en mi casa para atenderme, no para opinar”- dijo su madre a sus prima, -“prima Fabiana no te molestes solo es que el trato que le das a Eleonor es tan frio también es tu hija como Bárbara, y la tratas muy mal”- dijo su tía, -“cállate imbécil y anda plancha mi blusa de seda que te dije, nadie quiere escucharte y si no te gusta como trato a mis hijas te me vas”- dijo Fabiana, -“eso le pasa por meterse donde no le importa, y no me compare con Eleonor la diferencia es enorme”- dijo Bárbara riéndose miraba a su hermana, Fabiana se reían también, Eleonor no decía nada

Bárbara esperaba afuera en el auto junto con su madre, -“ya las llaves rápido”- dijo Fabiana tronando los dedos a Eleonor, -“aquí están mamá”- dijo Eleonor, -“que lenta eres hija en verdad, cuando yo doy una orden tiene que ejecutarse rápido, te quedas en la casa haciendo los quehaceres, yo estaré en la clase de ballet de tu hermana”- dijo Fabiana seria, -“que te vaya bien hermanita”- dijo Eleonor sonriente, -“no finjas, envidiosa”- dijo Bárbara seria subió al auto, su madre subía, -“si viene Michel le dices que ya nos fuimos, no me contestó el teléfono así que no le pude dejar el mensaje”- dijo Bárbara seria, -“va venir, si yo le digo”- dijo Eleonor sonriente, viéndolas marcharse.

Cuando tocaron el timbre rápido fue abrir, estaba un joven apuesto sonriente, -“hola Michel ¿cómo estás?”- dijo Eleonor alegre, -“hola Eleonor, ¿tu hermana ya salió?”- dijo Michel, -“si ya se fue hace unos minutos”- dijo Eleonor mirándolo sonriente, -“se me hizo tarde fui a ponerle gasolina al auto, seguro se molestara porque quede en pasar por ella, bueno te dejo cuídate”- dijo Michel, –“espera ¿no quisiera tomar lago antes o comer algo?”- dijo Eleonor, -“no gracias iré alcanzarla, adiós”- dijo Michel subiendo a su auto, Eleonor lo veía muy alegre, -“¿te gusta Michel verdad?”- dijo su tía acercándose, -“tía que dices”- dijo Eleonor avergonzada, -“ me doy cuenta por como lo vez, te brillan los ojitos, y lo atiendes mejor que Bárbara, la verdad no sé cómo él se puede fijar en alguien tan fría como tu hermana, tu eres más buena, amable, pero que vamos hacer hija, el eligió a tu hermana-” dijo su tía, -“mírame como me visto, en cambio Bárbara se viste mucho mejor, es más bonita, tal vez eso le deslumbro a Michel”- dijo Eleonor, -“si tu madre también te ayudaría en arreglarte estoy segura que te lloverían los galanes como a tu hermana”- dijo su tía, -“¿mi madre?, sabes a veces pienso que no me quiere tía”- dijo Eleonor, -“tu madre es así dura yo la conozco hace años, siempre fue así, pero debo agradecerle por mantenerme en su casa”- dijo su tía despidiéndose y diciendo que se iba al mercado.

Eleonor entraba al cuarto de Bárbara, veía tan arreglado, con fotos de Michel, veía su closet y veía la ropa tan bonita, -“que linda ropa, como me gustaría tener un vestido así”- dijo Eleonor, tocando el vestido que iba usar el día de la función, cuando entro Bárbara, -“¡se puede saber qué haces aquí en mi cuarto tocado mi ropa!”- dijo Bárbara, -“lo siento es que estaba limpiando tu cuarto y acomodando tu ropa”- dijo Eleonor, -“ no vuelvas tocar mi vestido de la gran noche, y deja hablar tanto, anda atiende a mi novio que estaba en la sala esperándome”- dijo Bárbara seria, -“¿esta abajo Michel?”- dijo Eleonor sonriente, -“te dije que sí, anda ve atiéndelo”- dijo Bárbara seria, -“¿y como te fue?”- dijo Eleonor, -“me fue muy bien, seré el centro de atención, bueno algo que eso tu nunca sabrás”- dijo Bárbara sonriente, -“si claro permiso”- dijo Eleonor bajando apresurada.

-“Michel, buenas tardes, ¿te vas quedar comer?”- dijo Eleonor sonriente se acercó a él, -“si gracias tu madre me invito”- dijo Michel, Fabiana miraba seria a Eleonor, -“hice unos pasteles te guastaría probarlos”- dijo Eleonor sonriente, -“gracias”- dijo Michel sonriente, en eso recibió una llamada Michel pidió permiso para contestar, salió afuera de la casa hablar. Fabiana se acercó, -“me quieres explicaría ¿porque vienes adelantarte a saludar entusiasmada a Michel antes que a mí?”- dijo Fabiana seria, -“mamá discúlpame como te…”- dijo Eleonor avergonzada en eso recibió una bofetada, -“desvergonzada, es el novio de tu hermana podrías disimular”- dijo Fabiana seria, -“¿qué pasa mamá?”- dijo Bárbara bajando, -“Barbe, no pasa nada hijita, aquí está que me hace tener cólera, vete a la cocina a servir lo que habías ofrecido para los tres”- dijo Fabiana enojada, Eleonor se marchó, -“disculpen salí atender una llamada de mi casa”- dijo Michel, -“no te preocupes mi amor”- dijo Bárbara abrazándolo.

-“¿Porque lloras Eleonor?”- dijo su tía en la cocina, -“mi madre me pego” dijo Eleonor, -“¿Por qué?”- dijo su tía, -“porque fui atenta con Michel”- dijo Eleonor, -“debes disimular, mira que no se entere Bárbara porque si no ya sabes cómo se pondría”- dijo su tía, -“tratare de controlarme a mis emociones”- dijo Eleonor secándose las lágrimas.

Estaban en la mesa, -“tus pasteles estuvieron deliciosos cuñadita”- dijo Michel, -“gracias Michel tu sabes que me esmero..”- dijo Eleonor, -“mi amor, ¿a donde me vas llevar a pasear?”- dijo Bárbara interrumpiendo a Eleonor, -“bueno tengo toda la tarde libre tu elijes a dónde vamos”- dijo Michel, -“bueno vamos a pasear”- dijo Bárbara sonriente, -“está bien vamos a donde tu querías”- dijo Michel sonriente, -“si hija ve, yo sé que estas en buenas manos”- dijo Fabiana, -“vamos mi amor, quiero ir a ver una película al cine”- dijo Bárbara sonriente lo beso y tomo del brazo, Michel se despedía de todas, Eleonor los veía irse muy contentos, cuando su madre se puso de pie y se acerco, su tía le toco del brazo a Eleonor que se diera vuelta a mirar a su madre, -“óyeme bien, óyeme muy bien es la última vez que te comportas así delante de Michel, deja de mirarlo, parece que lo quisieras comer con la mirada”- dijo su madre enojada, –“discúlpame mamá”- dijo Eleonor, -“es el enamorado de tu hermana así que respétala, pareces que te quisieras lanzar hacia él, dime acaso crees que un chico como él se va fijar en ti, eres feíta, una inútil, una torpe, una dos pies izquierdo por eso no saliste seleccionada para el ballet, tu hermana en cambio sí tiene talento, llegara muy lejos”- dijo Fabiana, -“si y discúlpame madre”- dijo Eleonor, -“así que deja de comportarte como cusca, por favor hombre nadie se puede interesar en ti, eres tan insípida, yo te lo digo porque te quiero”- dijo Fabiana seria, luego se fue a su cuarto, Eleonor soltaba lágrimas, su tía la consolaba.

Era ya otro día, Bárbara estaba en su casa practicando ballet, -“te ves tan linda con ese traje me hubiera gustado lucir uno así”- dijo Eleonor acercándose, –“no seas ridícula, el lago de los cisnes es para gente hermosa no para un patito feo como tú”- dijo Bárbara, -“¿y hoy vendrá Michel?”- dijo Eleonor, -“¿porque preguntas por mi enamorado?”- dijo Bárbara sonriente, -“solo pregunto cómo viene fin de semana a verte siempre”- dijo Eleonor, -“crees que soy estúpida, crees que no me eh dado cuenta que te gusta Michel, hay Eleonor, mira yo no me puedo poner celosa de ti porque mírate eres tan poca cosa que Michel jamás se fijaría en alguien como tú”- dijo Bárbara riéndose, -“no solo soy amable con él”- dijo Barbaba, -Michel nunca te a mirado, ni te va a mirar como mujer, hay que aceptarse no tienes la menor gracia, por eso nunca te vas a casar, en cambio yo sí, y vete que me desconcentras”- dijo Bárbara seria, Eleonor se marchó, al salir cerró la puerta y comenzaba a llorar.

Era el día del espectáculo, -“¡mamá!, mi peinado no quedó bien”- dijo Bárbara seria, -“está bien hija tiene que estar bien ajustado, dime te vas a cambiar haya verdad”- dijo Eleonor, -“mamá como crees que me voy a ir cambiada, el vestido se me arrugaría, hay madre te pasas verdad”- dijo Bárbara seria, -“tienes razón ya me parezco a la tonta de Eleonor con mis comentarios”- dijo Fabiana riéndose, -“¿mamá yo también iré a la presentación de mi hermana?”- dijo Eleonor entrando y escuchándola, -“¿tu par que vas a ir?, harías el hazme reír, no quiero que mis amigas se burlen de mi cuando vean que tengo de hermana a un esperpento”- dijo Bárbara seria, -“tiene razón tu hermana, tu mejor te quedas a cuidar la casa, si, no vaya hacer que entren ladrones, ya sabes y estas atenta en el teléfono si se me ocurre llamar”- dijo Fabiana, -“ si mamá como tú digas”- dijo Eleonor yéndose a su cuarto y mirando su ropa que había tenido lista, la guardo en su closet.

Eleonor estaba en la cocina triste, preparando unos postres, cuando abrió el cajón de la alacena y veía productos de limpieza, entre ellos vio un sobre con veneno, lo quedó mirando, -“si Bárbara no estuviera, Michel se fijaría en mi, y tal vez mamá podría ayudarme arreglarme y podría ser bailarina de ballet”- dijo Eleonor pensativa, cuando apareció Bárbara, ella rápido guardo el veneno, -“¿qué haces feíta?”- dijo Bárbara, -“preparo los alfajores que iba a comer mientras iba mirar tu función”- dijo Eleonor, -“¿de verdad te hubiera gustado ir o ser parte del elenco?”- dijo Bárbara, -“me hubiera gustado ser parte del elenco pero no me eligieron, porque me caí, porque tu hiciste algo para que me saliera mal mi postulación a la academia”- dijo Eleonor, -“me vas a echar la culpa a mí de tus fracasos tus torpezas, por favor Eleonor a ti jamás te hubieran aceptado en la academia, eres tan tonta, inútil torpe, sabes para lo que tienes eres un poquita de buena para cocinar, solo para eso, para estar en la cocina como empleada, sabes me lo voy a llevar tus postre para que no se echen a perder, así comer luego con mis amigas por nuestro triunfo en el escenario”- dijo Bárbara, -“espera le pondré un poco de azúcar impalpable”- dijo Eleonor mirándola seria se dio media vuelta.

-“¡hija ya nos vamos, ya llego Michel, apresurarte!”- dijo Fabiana, -“suerte, que les vaya bien”- dijo Eleonor despidiéndose, -“la suerte es para mediocres como tú”- dijo Bárbara seria, -“cuidas la casa y nada de encender la televisión”- dijo Fabiana saliendo con su hija y su tía, Eleonor las veía salir.

Antes de la función de ballet, -“les traje esto compañeras para tener suerte, algo dulce para los nervios”- dijo Bárbara, sus amigas se acercaron y tomaron un alfajor, empezaron a comer, la maestra les decía que era hora de salir a la función. El espectáculo comenzó, Fabiana estaba orgullosa de ver a su hija bailar, Michel miraba a su enamorado luciendo ese traje de bailarina que le quedaba precioso, cuando en eso las bailarinas se detuvieron, el público miraba el espectáculo, ellas empezaron a marearse, a dar de vómitos, el público se puso de pie preguntaban –“¿qué pasa, que llamen a una ambulancia”-, las bailarinas empezaron a votar espuma ´por la boca, -“¡mamá ayúdame, Michel ayúdame, mi estómago!”- dijo Bárbara quejándose de dolor, se arrodillo en el escenario, se desmayaba, -“¡mi hija, barbe!”- dijo Fabiana asustada al ver a su hija.

Michel se acercó al escenario, asustado estaba viendo a su enamorada inconsciente, mientras en la noche en plena lluvia camina Eleonor recordando que puso veneno en los alfajores, con una foto de Michel en sus brazos, (Natalia Oreiro- no es mi despedida), -“quisiera no decir adiós, pero debo marcharme, no llores por favor no llores, porque vas a matarme, no pienses que voy a dejarte no es mi despedida, una pausa en nuestra vida, un silencio entre tú y yo…, recuérdame a cada momento, porque estaré contigo, no pienses que voy a dejarte, por que estarás conmigo, me llevo tu sonrisa tibia tu mirada herrénate vivaras dentro de mí, yo por ti… volveré, tu por mí… espérame te pido, yo por ti… volveré, tu por mi… espérame, no me olvides…”- decía Eleonor llorando cuando entro a la comisaria, –“vengo a entregarme, porque eh matado a mi hermana”- dijo Eleonor llorando sonreía, el policía la miraba asustado.

-«Cometiste un error, pero ahora tu arrepentimiento  es sincero, solo te queda hacer el bien para limpiar tu alma mi querida Eleonor» dijo el padre Zaid, -«ayúdeme padre, ayúdeme a hacer el bien»- dijo Eleonor  llorando en sus piernas del padre, el le acariciaba y tranquilizaba su llanto.

Lujuria: Se veía una mujer en la cárcel, ella estaba entrando a su celda, varias mujeres lesbianas le silbaban, la joven asustada las veía, -“¡eres carne fresca mi amor, ven a dormir conmigo, vas a ser mía!”- dijeron las demás presas, la joven se sentó en su cama, se recogió las rodillas y lloraba.

(I love to Love- Tinna Charles, música de fondo)- Lurdes Caminaba por la calle muy arreglada con un bolso rojo y un vestido del mismo color, ella caminaba muy reluciente, vanidosa, al llegar a un edificio subía y veía a un hombre deportista que subía por las escaleras, -“hola Lurdes, ¿dime hoy nos veremos?”- dijo el joven deteniéndose a platicara con ella, -“hoy no puede ser, voy a tener que salir con mi enamorado”- dijo Lurdes –“no sé porque sigues con él, teniéndome a mi”- dijo el hombre acercándose muy coqueto, -“contrólate, nos pueden ver, ya te dije que todo debe ser con discreción”- dijo Lurdes sonriente, -“tu soltera y yo soltero que tiene eso de malo”- dijo el joven, -“Juan Carlos aquí los chismes abundan y tú sabes cómo son mis padres”- dijo Lurdes sonriente, –“entonces espero tu llamada”- dijo Juan Carlos sonriente, ella le tocaba la parte de sus genitales y se marchaba a su vivienda.

Cuando ella subía, veía a su vecino discutiendo con su esposa, -“¡seguro es para ver a esa estúpida no, esa pérdida!”- dijo su esposa, -“deja de hablar así, tus celos enfermizos ya me tienen harto, si vas a seguir así me voy de la casa”- dijo el hombre, cuando veían a Lurdes, ella sonrió, él serio estaba, -“no te pienso dar el divorcio entendiste, ¿y tú que haces aquí mirando a mi esposo?”- dijo la esposa furiosa, -“vivo a lado querida, y yo no miro a tu esposo, pregunta quien ve a quien”- dijo Lurdes entrando a su departamento, la mujer quería atacarla, pero el hombre la detenía, -“¡qué vas hacer, un escándalo, dime quieres problemas compórtate loca!”- dijo su esposo, -“desgraciado seguro estaban coqueteando”- dijo la señora enojada discutía con su esposo. Lurdes entraba y saludaba a sus padres, -“escuche que los vecinos están peleando de nuevo”- dijo su padre, -“si papá pero no hay que meternos en esos problemas, mejor mira lo que te traje”- dijo Lurdes dándole una bebida que sacaba de su bolso, -“gracias hija, no sabes cuanto me alegra verte llegar de tu trabajo”- dijo su padre alegre, -“que no te lo vea mamá, ya sabes como se pone de celosa porque te compro regalitos, eres mi favorito”- dijo Lurdes sonriente fue a la cocina y veía a su madre, -“Lurdes tenemos que hablar”- dijo su madre, -“¿que pasa mamá?, recién llego y voy a escuchar quejas?”- dijo Lurdes, -“escucho chismes, cuando subo atender la ropa en la azotea escucho a las vecinas que dicen que tú y el vecino Juan Carlos tienen algo, luego con el vecino Andrés de alado también, su esposa te tiene ganas de encontrarte y no sé que pretende hacerte”- dijo su madre seria, -“hay mamá son chismes, vas a prestarle más atención a los chismes que creerme a mí, yo que soy tu hija, tu sabes cómo me he criado, dime porque piensas mal de mí, porque no eres como mi papá que me cree, me brinda su apoyo su confianza”- dijo Lurdes enojada, –“porque yo no me dejo comprar con regalitos como él, acaso no crees que sé que le das de tomar para que no te diga nada, pero si yo me entero de tus andadas Lurdes créeme que seré yo la que te pondré un límite”- dijo su madre enojada, -“mamá tu no serias capaz de hacerlo, no tienes carácter, mira yo tengo mi enamorado lo conoces y lo quiero, y soy feliz con él, como para querer buscarme a otros hombres, así que déjame tranquila y cuidado con llegar estos chismes a mi enamorado Julián porque no quiero problemas con él2- dijo Lurdes seria, -“espero que solo sean chismes, porque ese muchacho no merece que lo engañes”- dijo su madre triste, -“ahora déjame tranquila iré a darme un baño”- dijo Lurdes entrando a la ducha, salía sonriente y se vestía con nueva ropa muy atrevida.

Ella se encontraba en su trabajo era secretaria, cuando en eso su jefe la llamo, ella entro con un libreta de apuntes, la secretaria del frente la miraba seria, -“dígame licenciado Rivas ¿qué necesita?”- dijo Lurdes sonriente, el licenciado cerro las persianas de las ventanas, la secretaria del frente la miraba, -“es una zorra”- dijo ella. –“sabes las ganas que tengo de estar contigo, desordenar mi oficina como aquella vez”- dijo el licenciado, -“te gusto de verdad, pues esta vez tienes que ser más complaciente, un bolso, una cena romántica en un hermoso hotel no es suficiente, me gustaría que sea más gentil conmigo, lucir una gargantilla, unos pendientes, un anillo”- dijo Lurdes sentándose en sus piernas, –“lo que tú quieras pídemelo”- dijo su jefe besándola y acariciándole las piernas, –“vamos a trabajar entonces porque luego quisiera un aumento de sueldo”- dijo Lurdes, -“lo tendrás todo lo que tú quieras”- dijo su jefe, cuando sonó el teléfono, Lurdes contesto, -“hola señora de Rivas, ¿Su esposo? si aquí está ahora le paso”- dijo Lurdes sonriente, -“¿dime amor que pasa?, si ahí estaré puntual para la fiesta de mis suegros, claro mi amor, yo pasare por ti solo ten listo a los niños, ok cuídate besos”- dijo el licenciado Rivas, Lurdes sonreía, -“me encanta cuando le hablas rápido para atenderme a mi”- dijo Lurdes besándolo apasionadamente, le quitaba la camisa.

Era ya otro día, cuando abría la puerta de su casa veía una rosas y detrás de ellas a un joven, -“hola mi amor”- dijo el joven, -“hola amor pasa por favor”- dijo Lurdes, -“señora, señor buenas tardes”- dijo el enamorado de Lurdes, -“Julián, me encantan a las rosas muchas gracias, madre, padre ya regreso iré con mi enamorado a pasear un rato”- dijo Lurdes, -“está bien hija no muy tarde”- dijo su padre, -“cuídala Julián, con cuidado”- dijo su madre, la pareja se marchó sonriente, el vecino Andrés los veía, se veía celoso mirando a Lurdes con Julián conversando. La pareja estaban en un hotel, ella acostada en su pecho, -“sabes creo que ya es tiempo de dar el siguiente paso,¿ te gustaría que vaya a tu casa a pedir tu mano?”- dijo Julián, -“mi amor me encantaría, tu sabes que es lo que más quiero en la vida, formalizar contigo, ya vamos a cumplir tres años de enamorado que te parece si esa fecha vas a mi casa hablar con mis padres, mientras yo arreglo todo para esa noche”- dijo Lurdes, -“entonces hablare con mis padres”- dijo Julián, -“sabes Julián, quiero decirte antes esto, nunca dudes de mí, confía en mi como yo confió en ti siempre”- dijo Lurdes acariciándole, -“claro que si mi amor, desde que te vi supe que eras la mujer de mi vida y nada ni nadie nos va a separar”- dijo Julián sonriente, Lurdes lo besaba.

Se encontraban en un cuarto de hotel, su jefe le traía un regalo, un collar, -“me encanta esta bellísima”- dijo Lurdes probándose el collar, -“lo mejor para ti mi reina”- dijo el licenciado, ella fue a una esquina del cuarto, había un tubo para que pueda bailar teibol dance,(Love hurts- Nazareth, música de fondo), mientras bailaba se quitaba la ropa, su jefe estaba en la cama mirando el espectáculo, ella se movía sensualmente en el tubo, cuando se acercaba a gatas sonriente, su jefe la abrazaba y besaba, estaban juntos, mientras el celular sonaba, se veía el nombre de Julián que le estaba llamando pero ella no le contestaba.

Su padre llegaba su casa mareado, -“viejo sinvergüenza que se podría esperar de un alcohólico y su hija una perdida”- dijo una vecina, -“cállese chismosa, no hable de mi hija, lo que usted dice es pura envidia porque ella es más bonita que sus hijas, incluso que usted”- dijo el padre de Lurdes subiendo mareado a su vivienda, -“de nuevo borracho, tu hija donde estará, Julián me ha llamado está muy preocupado por tu hija porque le está llamando a su celular hace un par de horas y no contesta, ella debió estar aquí pero no llega, no sé qué decirle al pobre Julián”- dijo su madre,-“debe estar trabajando”- dijo su padre, -“¿trabajando?, pero debería contestar las llamadas”- dijo su madre, -“tú piensas igual que las demás viejas arpías, es nuestra hija, la criamos bien, debemos estar orgullosos porque es una mujer decente trabajadora, vergüenza te debería dar el dudar del paradero de tu hija, mala madre”- dijo su esposo, -“no te das cuenta , eh entrado a su cuarto eh visto regalos caros, se cuánto gana y no le alcanzaría para comprase esos regalos, y Julián que le haga regalos tan seguidos, y más aún ella que no los quiera mostrar delante de él, crees que soy tonta, si el rio suena es porque piedras trae”- dijo su madre, -“ya cállate no hables mal de mi hija”- dijo su esposo enojado levanto la mano, -“¿qué me vas pegar?, yo no me pongo una venda en los ojos ni me dejo comprar por bebidas como lo haces tú, mi hija no anda en buenos pasos y yo lo voy a descubrí pero será para ayudarla porque es mi hija y no la quiero ver sufrir”- dijo su madre queriendo llorar, luego se fue a su cuarto.

-“No puede ser Julián me estaba llamando y mi madre también”- dijo Lurdes, -“le dices que estuviste en una junta y se acabó”- dijo su jefe cansado quería dormir a su lado, -“llamare a Julián”- dijo Lurdes diciéndole que guarde silencio, -“hola amor ¿dónde estás te estaba llamando, llame a tu casa y me dijeron que no llegabas”- dijo Julián, -“estoy en una junta muy ocupada, peor ya voy de salida”- dijo Lurdes, –“te puedo ir a recoger, te espero afuera en 20 minutos entonces”- dijo Julián colgando, -“Julián espera, Julián, no puede ser, vístete, mi enamorado me va a recoger en mi trabajo y tiene que encontrarme allá”- dijo Lurdes, –“que idiota”- dijo su jefe sonriente, -“no lo insultes y apresuraste”- dijo Lurdes vistiéndose.

Cuando bajaba del hotel muy apresurada salía y vio afuera a Julián que la miraba serio, triste a la vez, -“¿esta era tu junta?”- dijo Julián decepcionado, serio los veía, Lurdes y su jefe lo vieron, –“Julián yo…”- dijo Lurdes impactada, al ser descubierta, –“fui a darte una sorpresa recogiéndote a tu trabajo y te vi salir con tu jefe, decidí seguirlos y los vi entrar aquí, llame a tu casa para decirle a tu madre pero no me atreví a decirle la clase de hija que tiene”- dijo Julián, -“Julián escúchame por favor”- dijo Lurdes, -“no quiero escucharte, eres un perdida y usted un hombre casado, a ver qué futuro le dará porque de amante no creo que dé para más”- dijo Julián dándose media vuelta, -“¡Julián espera!”- dijo Lurdes queriendo llorar, -“¿vas a ir tras de él?”- dijo el licenciado sujetándola del brazo, -“es mi enamorado, entre tú y yo solo hay pasión y nada más, tu tienes tu familia y yo con él voy a construir la mía”- dijo Lurdes yéndose detrás de Julián, pero este subió en su motocicleta y se marchó, -“¡Julián, espera, Julián!”- gritaba Lurdes viéndolo irse se puso a llorar.

Lurdes marcaba a Julián pero no le contestaba, ella no sabía que hacer, cuando llegaba a su casa llorando, su vecino la esperaba, -“¿dónde estabas, dime dónde estabas?”- dijo Andrés abrazándola, -“suéltame ahora no tengo humor”- dijo Lurdes, –“pasa adentro tenemos que hablar”- dijo Andrés metiéndola en su casa, -“Andrés no tengo humor, quiero entrar a mi casa”- dijo Lurdes llorando, -“me tienes muy abandonado, dime que ya no te gusto, ¿es acaso ese muchacho mejor que yo? dime, la pasábamos también juntos”- dijo Andrés abrazándola y besándola por el cuello, ella se alejaba de él, -“entiende que no quiero perderte, verte con otro me hierven los celos”- dijo Andrés, -“Andrés por favor escúchame, termine con Julián no tengo humor”- dijo Lurdes llorando, -“¿terminaste por mí?, entonces yo también terminare con mi esposa, ya me tiene harto, vamos iniciemos algo juntos que te parece”- dijo Andrés, -“estás loco crees que voy a dejar a Julián por ti, un hombre que le es infiel a su mujer con la vecina para mí no vale nada, lo que hubo entre tú y yo solo fue algo pasajero”- dijo Lurdes, -“me estás diciendo que solo me usaste para apagar tus bajos instintos del momento”- dijo Andrés serio, –“te estoy diciendo que te quedes con tu esposa, la loca esa, que yo voy a recuperar a mi futuro esposo”- dijo Lurdes saliendo de la casa de Andrés, -“tu no vas salir de aquí, no me vas dejar”- dijo Andrés yendo tras ella, -“suéltame, déjame”- dijo Lurdes empujándolo, golpeando la puerta de su casa para que le abran, -“Lurdes, tu eres mía y de nadie más”- dijo Andrés, -“déjame, suéltame te eh dicho”- dijo Lurdes empujándolo con fuerza, Andrés perdió el equilibrio y cayó por la barandilla, desde el cuarto piso, Lurdes asustada lo miro caer, -“¡Andrés, Andrés que fue lo que paso!”- dijo su esposa entrando al edifico, miro hacia arriba y veía a Lurdes que se escondió rápido, -“¡asesina lo mataste!”- dijo la mujer de Andrés, ella voltio y vio a sus padres asustados que la veían, -“fue un accidente, él me estaba sujetando me quería besar a la fuerza fue un accidente”- dijo Lurdes llorando, asustada se cogía la cabeza, -“¿qué hiciste hija?”- dijo su madre llorando se cubría la boca, su padre la abrazo.

Lurdes estaba en la prisión, recibía visita y era Julián, -“¿Julián vienes a perdonarme?”- dijo Lurdes llorando, -“no Lurdes, yo no tengo nada que perdonarte, luego de lo que vi, tu declaración que fuiste la amante de aquel hombre que falleció, la verdad que yo prefiero alejarme de ti, si estoy aquí es para decirte que tu madre al escuchar la condena que te dieron de 15 años le dio un ataque al corazón, falleció”- dijo Julián triste, -“¡no!, no es cierto Julián, dime que no es cierto eso, ¡Julián, mi madre no!, Julián, dime que es mentira por favor Julián, ¡mi mamá!”- dijo Lurdes llorando.

(Marisol- señor carcelero)- “señor carcelero abra por favor, abra la puerta que yo quiero ver, a mi madrecita por ultima vez dicen que la llevan en un ataúd, Dios mío perdona mis errores yo fui una hija mala que la hizo sufrir, a mi pobre viejecita, escúchame mi lamento apiádese de mí, quiero salir a ver a mi madre y darle un beso por ultima vez (bis)”- decía Lurdes llorando encarcelada

-“soy Lurdes tengo 37 años, ahora conocen mi historia, sé que fui una hija muy mala, la hice sufrir sin ninguna razón, solo pido a nuestro señor que perdone mis errores”- dijo Lurdes mirando a todos, -“hija tu arrepentimiento fue sincero y tus errores están perdonados, tu madre créeme que ya lo hizo, ahora retomaba el buen camino”- dijo el padre Zaid, Lurdes soltaba lágrimas.

Eleonor veía Lurdes triste, ambas se abrazaron, los demás chicos veían los dos últimos integrantes que faltaban narran sus historias. El padre Zaid miro a un joven, con la mirada le invitaba contar su relato.

Pereza: -“Soy Pierre tengo 29 años, cuando me encerraron tuve 16 años, me dieron esta pena porque…, lo que hice fue algo involuntario”- dijo el joven triste mirando a todos, -“queremos saber tu historia”- dijo Gerald, -“vamos cuéntanos ¿qué hiciste?”- dijo Imanol, todos lo miraban atentos, -“adelante hijo, desahógate”- dijo el padre Zaid, -“es tan terrible lo que hice, pero les voy a contar”- dijo Pierre soltando lágrimas.

-“Termine la escuela y no tenía ganas de volver a estudiar, lo único que quería era descansar por tanto esfuerzo que tenía haciendo las tareas yendo a clases, eso me repetía yo”- dijo Pierre, estando en su mueble, -“ya terminaste la escuela , sabes que vas a estudiar o hacer por la vida”- dijo su padre serio, –“papá recién eh terminado la escuela déjame descansar”- dijo Pierre, -“¿descansar, que haces?, si solo paras echado mirando la televisión, en la computadora, metido en tu cama todo el día sin nada que hacer, deberías ir a trabajar”- dijo su padre serio, –“es cierto hijo deberías entretenerte en algo útil, que haces ahí acostado todo les nato día”- dijo su madre, -“mamá tengo mucha pereza, déjame que el próximo año ya buscare algo en que ocuparme”- dijo Pierre, -“deberías empezar desde hoy, ya se en dónde vas a trabajar”- dijo su padre, -“¿en dónde?”- dijo su hijo acostado en el sofá, -“hay una remodelación de un edificio en la avenida principal, así que trabajaras ahí, eh escuchado que necesitan gente y hablare si puedes ser ir ahí”- dijo su padre saliendo de la casa, -“¡papá espera, papá!”- dijo su hijo molesto, -“hijo vas a trabajar y vas a ganar un dinerito para tus gastos, tal vez viendo lo que hacen en esa edificación te animes por estudiar una profesión, como un arquitecto o un ingeniero”- dijo sus madre, -“mamá, ¿estudiar?, ya salí de eso, volver a meterte de nuevo en lo mismo”- dijo Pierre aburrido, -“entonces que quieres hacer por la vida dedicarte sin hacer nada, todo el tiempo con la pereza, no hijo”- dijo su madre, -“bueno mientras descansado pensare en que voy hacer con mi vida pero hasta al próximo año”- dijo Pierre yéndose a su cuarto y metiéndose en la cama a dormir.

Cuando hablaba por teléfono, –“hola bebe, dime que tal tu día”- dijo Pierre, -“fui a ver el nuevo departamento que compro mi papá, no sabes está muy hermoso, dentro de unos días nos van a entregar”- dijo una jovencita, -“pues me gustaría verlo, a ver cuándo me invitas para estar juntos ahí”- dijo Pierre sonriente, -“solo piensas en eso nada más tu”- dijo la jovencita, -“Ruth, mi amor, lo único que me interesa en la vida eres tú, mi gran amor, como me gustaría estar a tu lado y pasarme acostado contigo abrazándote”- dijo Pierre, -“mi oso perezoso, bueno cuando nos entreguen el departamento ya verás que te lo mostrare, está en la avenida principal”- dijo Ruth, -“¿en la avenida principal?, mi papá quiere para ir a trabajar en una edificación de departamentos, dice que si voy a trabajar seré útil que estar aquí acostado”- dijo Pierre, -“pues deberías hacerle caso, así podrás invitarme al cine, hace tiempo que no vamos a pasear, ojala sea el mismo edificio donde mi papá compro el departamento”- dijo Ruth, -“entonces iré a tomar ese trabajo y espero que sea donde está tu nueva casa mi bebe”- dijo Pierre mandándole muchos besos.

Al día siguiente, lo despertaban bruscamente, -“¡ya despierta haragán!, cuanto tiempo piensas dormir, hasta el mediodía”- dijo su padre, -“¿qué pasa papá?”- dijo Pierre molesto se puso de pie, “-quiero que vayas a trabajar, te conseguí trabajo, hable con el ingeniero y te va dar trabajo, serás su ayudante”- dijo su padre, -“pero que sea en la tarde ahora quiero dormir” dijo Pierre yéndose a su cama, -“¡que te levantes Pierre!, no me hagas usar mano dura”- dijo su padre quitándole las sabanas, Pierre en ropa interior estaba, -“¿qué pasa porque discuten?”- dijo su madre entrando, -“¡mamá!, estoy en ropa interior no entres , papa´ no quiere que duerma bien”- dijo Pierre, -“prepárale el desayuno, que si en media hora no esta se va sin comer”- dijo su padre molesto, -“hijo anda, vamos vas a ver que será muy útil para ti”- dijo su madre, -“tengo pereza mamá, no quiero ir, mira que te parece si voy por la tarde, déjame dormir toda la mañana si”- dijo Pierre, -“si tu padre ya dijo, es mejor que obedezcas, sabes que no le gusta que le demos la contra, vamos hijo, hazlo por mi por favor”- dijo su madre, -“mamá…, espero que sea de mi agrado sino renunciare, porque eso de andar de obrero no es para mí”- dijo Pierre yendo a vestirse.

Pierre estaba con su padre afuera del edificio, -“aquí vas trabajar, espero que seas obediente , en todo lo que te pidan con precaución tal como te dicen, no vayas a cometer errores, no me hagas quedar mal Pierre”- dijo su padre, Pierre serio lo veía, al entrar se presentaron al ingeniero, -“este joven es muy delgado, ¿crees que podrá hacer los trabajos que se necesitan aquí?”- dijo el ingeniero, -“vamos póngalo a prueba, denle trabajos no tan forzados como instalaciones, aprende muy rápido”- dijo su padre, -“está bien pero la paga no será muy buena”- dijo el ingeniero, -“si ya lo sé ingeniero, hijo te quedas aquí y obedeces”- dijo su padre.

-“Vamos necesito que saques un desmonte y luego que ayudes en instalaciones eléctricas, deberías pagarnos por enseñarte, pero como necesitamos manos pues no queda de otra”- dijo el ingeniero. Pierre cargaba en una carretilla el desmonte que había, se veía adolorido de las manos, cuando termino, fue acostarse un momento, se puso a dormir, al pasar unas horas escucho que le gritaron, -“¡Pierre!, muchacho del demonio, aquí se viene a trabajar no dormir”- dijo el ingeniero enojado, -“disculpe ingeniero recién me eh dormido, estaba descansado porque ya vote todo el desmonte que me encargo mire”- dijo Pierre señalando el desmonte limpio, -“ya vamos a que conozcas los departamentos que faltan arreglos que mañana harás trabajo con el maestro”- dijo el ingeniero serio. Pierre entraba a los departamentos veía lo grandes que eran, miraba por la ventana y era una vista espaciosa, -“¡qué haces mirando las calles vienes a trabajar no a gustar del paisaje”- dijo el ingeniero molesto, Pierre escuchaba lo que tenía que hacer.

Al llegar, -“¿Como te fue en tu primer día de trabajo hijo?”- dijo su madre, -“me duelen los brazos, las piernas, la espalda aparte que ese ingeniero se la pasa gritándome, no quiero seguir ahí”- dijo Pierre adolorido, -“de ninguna manera vas a seguir trabajando ahí, ya di mi palabra, a la primera levantada de voz no te vas a salir de ahí, vas a seguir hasta completar el mes”- dijo su padre, -“pero papá…”- dijo Pierre serio, -“eh dicho y no me des la contra en lo que te digo”- dijo su padre molesto, Pierre se fue a su cuarto, -“¿no vas a comer?”- dijo su madre, -“no tengo hambre tengo sueño, tengo el cuerpo cansado”- dijo Pierre yéndose.

-“Es un edificio del color azul, se llama los Colibríes”- dijo Pierre hablando por teléfono, -“amor, es el edifico donde mi papá compro su departamento, y mañana iremos a verlo”- dijo Ruth sonriente, -“que suerte bebe, entonces mañana te veré, conoceré que departamento será tuyo”- dijo Pierre, -“si, ellos estarán muy contentos en ver que tu estés trabajando y preparando el edificio donde viviré con mi familia”- dijo Ruth, -“bueno mi amor descasa, mañana tengo que levantarme temprano, hasta mañana”- dijo Pierre, Ruth se despedía.

Al día siguiente, Pierre estaba yendo a su trabajo, le presentaron al maestro de instalaciones, -“aquí vas a trabajar, ayúdame a conectar las instalaciones de luz, este trabajo es sencillo yo te voy guiando”- dijo el maestro, -“está bien usted dígame que hago”- dijo Pierre.

Pierre colocaba unos focos, veía contento su trabajo que hizo, -“muy bien muchacho aprendes rápido”- dijo el maestro, -“gracias, ahora ya se realizar instalaciones”- dijo Pierre, cuando abrieron la puerta entraba a Ruth con sus padres, -“hola Pierre”- dijo Ruth, -“hola Ruth, señores buenas tardes”- dijo Pierre saludando a los padres de Ruth, -“¿es verdad que estas ayudando a terminar los acabados del departamento?”- dijo el padre de Ruth, -“si señor, aquí estoy trabajando, el maestro me está enseñando todas sus tácticas”- dijo Pierre, -“me parece muy bien, tal vez seas un ingeniero en instalaciones pronto”- dijo el padre de Ruth, -“este es el nuevo departamento donde viviremos, esta hermoso, ¿la instalaciones de gas, ya están listas?”- dijo la madre de Ruth en la cocina, -“claro que si señora todo esta listo, con esto culminamos el trabajo aquí, ya pueden venir habitarlo mañana mismo”- dijo el maestro, Ruth sonreía abrazaba a Pierre, -“qué bueno, mañana mismo nos mudamos”- dijo el padre de Ruth abrazando a su esposa, Pierre sonreía con su enamorada.

Llegaba a su casa le platicaba a su madre, -“lo vez hijo ya aprendiste y ayudaste a tu enamorada a que se fuera vivir pronto a su nuevo hogar”- dijo madre, -“si mamá, mañana hay mucho trabajo, pero ahora me siento cansado, quiero irme a descasar porque hay mucho por hacer en otros departamentos”- dijo Pierre, yéndose a su cama a dormir, soñaba que estaba entrando a una iglesia y veía a Ruth vestida de blanco, el padre le decía que puede besar a la novia, él y Ruth se daban un beso, Pierre sonreía, al despertar al día siguiente, veía que era tarde, mirando la hora muy tarde.

Entraba al edificio apresurado, veía al maestro saliendo de un departamento, -“¿se puede saber dónde estabas?, pensé que ya no vendrías trabajar”- dijo el maestro, -“discúlpeme, es que me había dormido, si quiere hoy me quedó hasta más tarde”- dijo Pierre, -“esta bien, quiero que subas los tubos, alambres, focos y las llaves de gas a los departamentos, por cierto, quiero que revises las llaves de entrada de gas para que las familias puedan usarlo”- dijo el maestro, -“¿usted a donde va?”- dijo Pierre, -“iré hacer unos encargos, ya regreso”- dijo el maestro dándole un juego de llaves.

Pierre estaba subiendo y cargando el material para las instalaciones en cada departamento, se veía cansado cuando fue a ver el departamento de Ruth, -“hola Ruth”- dijo Pierre, -“Pierre, mi amor llegaste por favor ayúdame a cargar mis cosas para mi cuarto”- dijo Ruth, -“si, danos una mano porque me siento muy cansado”- dijo el padre de Ruth, -“yo voy a descasar ubique todo en la cocina”- dijo la madre de Ruth, yéndose al cuarto, -“bueno iré subir lo que hace falta señor”- dijo Pierre ayudando a Ruth a cargar las cosas y metiéndolas en su cuarto, su padre se acostó en el mueble.

Al terminar de ayudar, -“gracias Pierre, fuiste de gran ayuda, ahora descansare un momento”- dijo el padre de Ruth, -“hay mi amor muchas gracias, pero ya es tarde, ¿no te vas a ir a tu casa?”- dijo Ruth, -“aún me falta hacer unas cosas y luego me voy a mi casa”- dijo Pierre, Ruth le dio un beso en agradecimiento, -“es cierto la llave del gas”- dijo Pierre yéndose a la cocina, cuando quiso abrir la llave, estaba dura, puso fuerza pero no ponía abrirla, en eso se armó de fuerzas y la rompió, -“maldita sea la rompí, iré a traer una nueva”- dijo Pierre, saliendo apresurado, -“la deje en el octavo piso”- dijo Pierre cuando vio el ascensor ocupado, así que decidió subirlas escaleras. Ruth estaba en su cuarto acostándose, -“Pierre eres el chico más lindo”- dijo Ruth acostándose.

Pierre llego cansado, empezaba a buscar las llaves pero no las encontraba, cuando veía una cama lista, -“¿y esta cama?, no me había dado cuenta, me duelen las piernas, descansare un momento”- dijo Pierre, cuando se acostó, -“me gustaría vivir en un departamento así”- dijo Pierre cerrando los ojos, se imaginaba que estaba con Ruth besándose, entre las sabanas teniendo intimidad, -“¿aquí vamos vivir?”- dijo Ruth sonriente, -“si, es mi nuevo departamento con mi nuevo trabajo de ingeniero”- dijo Pierre sonriente, cuando abrió los ojos veía que estaba todo oscuro, -“ya se hizo de noche, no puede ser”- dijo él asustado, veía que eran las siete de la noche, -“la llave del gas”-dijo él, encontró la llave del gas, salió apresurado, bajo al piso donde vivía Ruth, -“¿Qué pasa, porque estas aun aquí?”- dijo el maestro, -“me olvide la llave del gas de la casa de mi enamorada, es que la había roto y pues voy a cambiarla”- dijo Pierre, -“¿has roto la llave?, eres un idiota descuidado”- dijo el maestro golpeando la puerta, pero nadie salía de la casa de Ruth, -“señores abran por favor es una emergencia”- dijo el maestro, Pierre se veía preocupado, -“que no vayan a prender las luces”- dijo Pierre asustado, -“¿que estabas haciendo todo el tiempo?- dijo el maestro molesto, -“me había quedado dormido en el piso ocho, por favor abra la puerta túmbela si es necesario”- dijo Pierre asustado, el maestro tumbo al puerta, el gas estaba por toda la casa, Pierre y el maestro se cubrían las narices, abrieron las ventanas, el maestro fue a colocar la nueva llave del gas y a cerrarla, Pierre fue a despertar a Ruth pero ella no despertaba, -“¿Ruth?, mi amor, ¡Ruth despierta!”- dijo Pierre llorando asustado, el maestro miraba el cuerpo del padre de Ruth, se acercó a tomarle el pulso y estaba muerto, -“¡no… Ruth!”- grito Pierre llorando.

La policía estaba en el lugar, -“fue un accidente créanme”- dijo Pierre llorando, -“¿qué paso hijo?”- dijo su padre llegando, -“el descuido del muchacho hizo que fallecieran tres personas, esto fue una negligencia”- dijo el maestro hablando con el ingeniero y los policías, -“ tendrá que asumir las consecuencias”- dijo el policía, -“mamá no quise matarlos, no quise hacerlo”- dijo Pierre llorando, veía cuando sacaban los tres cuerpos del edificio, cubierto entre sabanas, -“murieron asfixiados”- dijo el policía, Pierre gritaba de dolor al ver a su amada muerta por su culpa.

(Yo te extrañare- tercer cielo),-“yo te extrañare tenlo por seguro, fueron tantos bellos y malos momentos que vivimos juntos, los detalles , las pequeñas cosas lo que parecía no importante, son las que más invadían mi mente al recordarte…, ojala pudiera devolver el tiempo para verte de nuevo para darte un abrazo y nunca soltarte, mas comprendo que llego tu tiempo que dios te ha llamado para estar a su lado, así él lo quiso, pero yo nunca pensé que doliera tanto”- decía Pierre siendo detenido, en la camioneta era llevado mientras se alejaba de los cuerpos, sus padres abrazados lloraban, -“ya no llores por mí, yo estoy en un lugar lleno de luz, donde existe paz, donde no hay maldad, donde puedo descansar, no llores por mí, es tan bello aquí, quiero que seas feliz, que te vaya bien y cuando te toque partir, espero verte aquí…”- decía Ruth estando con él en un jardín, acariciándole el rostro, Pierre sonreía al despertar de su sueño en la celda.

-“fue un accidente hijo”- dijo el padre Zaid, -“por me descuido por echarme a pereza, por no cumplir con mis deberes, perdí el amor de mi vida”- dijo Pierre triste, todos los veían soltaban lágrimas.

Avaricia: Entraba un hombre molesto, -“tráiganla y que guarde silencio de lo contrario la voy a matar”- dijo el hombre molesto, -“por favor no me hagan daño”- dijo una mujer tapada la cabeza, entrando con dos muchachos uno llevándola en cada brazo, -“cállate o mi papá te va matar, ¿eso quieres que te mate?”- dijo uno de los jóvenes, -“tu cállate, no hables”- dijo el padre del joven, el otro joven la cargaba y metía en un cuarto, -“cuando paguen tu rescate te vamos dejar ir entendiste, así que guarda silencio”- dijo el hombre enojado, saliendo con los dos jóvenes de la habitación.

-“¿Trajeron a otra mujer?, viejo cuando vas a seguir con estos actos”- dijo la madre de los jóvenes, -“cállate, quieren dinero fácil, pues así lo vamos tener”- dijo Rodolfo enojado, -“papá secuestrar gente es el trabajo del momento”- dijo Alfonzo, -“pues yo ya quisiera terminar con esto, ya tenemos una gran casa, ya no tenemos ninguna deuda, ¿qué más quieren?”- dijo Adolfo, -“hazle caso Rodolfo, tus hijos no pueden seguir haciendo esto, pueden caer en las manos de la justicia”- dijo la esposa, –“¡te dije que te calles Celia! vete a la cocina, prepara la comida que estamos de hambre, venimos de trabajar, déjame conversar con mis hijos”- dijo Rodolfo, la esposa obedeció y se marchó asustada, –“Adolfo, Alfonzo conversare con ustedes del rescate, luego de este negocio vamos a tener dinero para darnos unas grandes vacaciones”- dijo Rodolfo riéndose, -“quiero mi auto papá”- dijo Alfonzo, -“te lo compraras hijo, y tu Adolfo que harás con tu parte”- dijo Rodolfo sonriente, -“yo quiero terminar con esto, ya tenemos el dinero suficiente papá, ¿cuánto más quieres tener?”- dijo Adolfo molesto, -“quiero tener más, mucho más, esa mentalidad que tienes hijo, es de un conformista, de un perdedor, debes apuntar a mas hijo, esta señorita tiene una familia de dinero y nos van pagar muy bien, de lo contrario ya saben lo que le espera”- dijo Rodolfo serio, -“me encantaría primero divertirme”- dijo Alfonzo sonriente, -“no, no le hagas daño hermano, déjala en paz”- dijo Adolfo serio, lo sujeto del brazo al verlo que se iba al cuarto de la secuestrada, -“¡suéltame, no me toques! ¿Qué acaso te gusta?”- dijo Alfonzo serio, -“Alfonzo has lo que dice tu hermano, no le hagas daño por favor hijo”- dijo Celia apareciendo con la comida, -“está bien, ya luego hablaremos de eso”- dijo Alfonzo, -“vamos a comer tranquilos, si hijos”- dijo Celia. Toda la familia se iba a la mesa, Rodolfo sonreía con Alfonzo y tomaban unas cervezas, Adolfo y su madre estaban callados, -“luego quiero que vayas a dar algo de comer a esa mujer”- dijo Rodolfo a su esposa, -“si ahora voy hacer”- dijo Celia asustada.

Celia subió al cuarto, veía a una mujer asustada atada de manos y cubierta el rostro, -“por favor ayúdeme, sáqueme de aquí, no me hagan daño”- dijo la jovencita asustada, -“tranquila muchacha, no te van hacer daño, te traje algo de comer y beber”- dijo Celia, –“señora usted se oye buena persona por favor sáquenme de aquí, ayúdeme a escaparme, prometo no decirle a nadie”- dijo la joven llorando, -“no puedo hacer eso, sino mi esposo me puede matar, pero yo no dejare que te hagan daño, apenas les paguen por ti, te dejaran libre créeme por favor”- dijo Celia asustada, -“¿quieren dinero, cuanto quieren?”- dijo la joven, -“no lo sé, él los ha metido en estos delitos, yo no quiero que sigan en esto, no son malos muchachos, yo aquí cuido a todos los que traen para que no les hagan daño”- dijo Celia dándole de comer, la joven no quería, estaba muy asustada para comer, -“mamá”- dijo Adolfo entrando, -“¿hijo que haces aquí?, vete a tu cuarto, tu padre te puede gritar”- dijo su madre, -“mamá, vine a ver cómo está la señorita”- dijo Adolfo, –“esta bien”- dijo su madre, -“mamá ya quiero que paremos con esto”- dijo Adolfo algo tenso, –“yo también hijo pero ya vez a tu padre y hermano, como se ponen, muy violentos cuando hablamos de este tema”- dijo Celia, –“ ya tenemos suficiente dinero, cuánto dinero más quieren llenarse”- dijo Adolfo, -“lo único que quiero es que no le hagan daño a esta muchacha”- dijo Celia, -“por favor ustedes se escuchan que son buenas personas, ayúdenme a escaparme, no le diré nada a nadie, estoy embarazada”- dijo la joven llorando, Adolfo y su madre estaban asombrados al escucharla.

Adolfo bajaba iba ver su padre, -“¡papá!, la mujer está embarazada, no podemos tenerla atada así”- dijo Adolfo serio, -“qué bueno entonces pagaran más”- dijo Alfonzo sonriente, -“si el tipo ese quiere volver a ver su esposa y a su futuro hijo pagara muy bien”- dijo Rodolfo riéndose mientras jugaba a las cartas, -“iré a darle una visita mientras no se le nota el embarazo”- dijo Alfonzo sonriente se puso de pie, -“¡tú no vas a tocarla!” dijo Adolfo empujándolo, -“no me pongas la mano encima, ya me di cuenta ¿te gusta verdad?”- dijo Alfonzo yéndose a golpearlo, ambos hermanos empezaron a darse de golpes, Celia aparecía y veía sus hijos pelearse, -“¡Adolfo, Alfonzo! hijos no se golpeen, Rodolfo sepáralos”- dijo su madre asustada, -“¡cállate la boca mujer!”- grito Rodolfo, luego se metió y empujo a Alfonzo y Adolfo a cada esquina, -“ustedes son hombres pude pelearse pero no por una vieja entendido, Alfonzo deja a esa mujer tranquila, ya te conseguiremos a otra que no esté embarazada, a esta podríamos matarla y no es bueno hacerlo antes que nos paguen el rescate, y tu Adolfo, no vuelvas a meterte en ese cuarto, la única que se mete será tu madre y yo entendido”- dijo Rodolfo enojado, -“pero papa´”- dijo Adolfo, Rodolfo le dio una bofetada tumbándolo al suelo, el labio le sangraba, -“¡ningún pero!, aquí se hace lo que yo mando”- dijo Rodolfo enojado, -“está bien Rodolfo pero no le pegues a tu hijo”- dijo Celia abrazando a Adolfo, -“vayan a descansar que mañana temprano llamaremos a la familia a pedir el rescate”- dijo Rodolfo enojado, Alfonzo se fue a su cuarto molesto, Adolfo se fue con sus madre a curarle la herida.

Estaban en la cocina, su madre le curaba el labio partido, -“¿porque mamá?, porque tuviste que casarte con un hombre tan violento como es mi papá”- dijo Adolfo, -“en la vida una comete errores y no sabe cómo resolverlos o poder páralos hijos, perdóname”- dijo Celia triste, -“mira en lo que nos hemos convertido por su avaricia de conseguir dinero, nos hemos vuelto unos delincuentes, asesinos, ¿eso te orgullece dime?, ¿eso querías para nosotros?”- dijo Adolfo enojado, -“una madre solo quiere a su familia unida verla feliz”- dijo su madre llorando, -“¿y crees que así somos felices?, Alfonzo le gusta hacer sufrir, aprovecharse de las mujeres jóvenes y bonitas, temo que le haga daño a esta joven, y mi padre violento que lo único que le interesa es llenarse dinero los bolsillo, ¿mamá tu eres feliz con esta familia?, ¿tú crees que soy feliz llevando una vida así?”- dijo Adolfo triste, -“tú al principio estabas de acuerdo, formaste parte de muchos secuestros hijo”- dijo Celia ocultándole la mirada, -“si, tienes razón, pero al ver como mataron la última persona por no haber pagado el dinero, ver ese pobre hombre pidiendo piedad por su vida, primera vez que vi alguien morir en mi delante, pero para ellos fue como matar a un cerdo”- dijo Adolfo soltando lágrimas, –“lo lamento hijo pero soy tan débil, lamento por no ser fuerte y no haber puesto un alto a todo esto, perdóname”- dijo su madre llorando, -“la culpa no es solo tuya sino también la mía porque la avaricia también la tuve yo, iré a descansar madre, permiso”- dijo Adolfo yéndose a su cuarto, Cecilia se quedó llorando.

Al día siguiente Rodolfo estaba en la calle hablando por teléfono con los familiares de la joven secuestrada, -“van a pagar un millón si no la preciosa se muere y también el bebe que está esperando entendido”- dijo Rodolfo, -“por favor le pagaremos pero no le haga daño a ella ni a mi hijo”- decía el esposo de la señorita, estaba muy asustado, -“ la tendrán sana y salva solo hagan lo que yo les digo, recuerden, no llamen a la policía, tienen doce horas, esperen mi llamada que diré donde dejaran el dinero, doce horas entendiendo”- dijo Rodolfo colgando la llamada, se fumó un cigarro y sonreía.

Alfonzo subía y veía a la mujer atada, -“yo creo que eso del embarazo es mentira para que te puedan tener lastima y así no te hagamos daño, pero sabes que, no te puedes ir sin que la pasemos bien, como las otras anteriores”- dijo Alfonzo, la joven atada gritaba ayuda mientras Alfonzo la besaba a la fuerza, en eso entro Adolfo, -“¡déjala infeliz!”- dijo Adolfo sujetándolo y golpeándolo, ambos se empezaron a pelearse nuevamente, en ese momento Adolfo saco su arma y le apunto a su hermano, -“ya es momento de acabar con esto hermano”- dijo Adolfo enojado, Alfonzo lo miraba, -“¿que harás?, me vas a matar?”- dijo Alfonzo serio invitándolo a que dispare, -“debí hacer esto hace mucho tiempo, me llevare a esta señorita, me llevare el dinero y me iré con mi madre lejos de ustedes”- dijo Adolfo enojado, -“piensas robarnos, robaras a papá, a nosotros que somos tu familia”- dijo Alfonzo enojado, -“¡si!, este dinero yo también lo trabaje así que nos pertenece a mamá y a mí, papa´ y tú se quedaran sin nada, ¡aléjate de la muchacha!”- dijo Adolfo enojado lo apuntaba, Alfonzo se alejaba cuando Adolfo ayudaba a ponerse de pie a la señorita, Alonzo fue contra su hermano, los hermanos forcejaban por la pistola, la muchacha gritaba asustada por ayuda. Celia escucho un disparo.

Al llegar a la habitación donde tenían a la joven secuestrada, vio a Alfonzo en el suelo ensangrentado, -“¡Alfonzo hijo!, ¡que hiciste, que has hecho Adolfo!2- dijo su madre llorando miro a Adolfo y abrazaba a su hijo muerto, -“fue en defensa propia, vámonos mamá antes que llegue papá”- dijo Adolfo asustado, -“mataste a tu hermano, mi hijo está muerto”- dijo Celia abrazando a Alfonzo, -“pudiste haberme detenido todo esto desde hace mucho alejándome de ese delincuente de padre que nos diste, pero salvare mi vida, yo me largo”- dijo Adolfo desatando a la señorita, ella se quitó al venda y vio a la familia, asustada miraba la escena, -“vámonos, tú vas tener que decir que fue por ayudarte”- dijo Adolfo asustado, -“claro que si”- dijo la señorita asustada salía.

Adolfo se iba con la señorita, entro a su cuarto saco un maletín, -“tengo que irme muy lejos de aquí”- dijo Adolfo asustado, al salir vio a su padre llegar, -“¿que significa esto?, ¡le quitaste la venda de los ojos, ya nos reconoció!”- dijo Rodolfo furioso, Adolfo saco su pistola apuntándole, Rodolfo también sacó su pistola y lo apunto, -“¿vas a traicionar a tu padre?, serias capaz?”- dijo Rodolfo enojado, -“si te metes en mi camino, no me hagas matarte también a ti”- dijo Adolfo nervioso, -“¿también a mí?,¿ a quien has matado, donde está tu hermano, tu madre, acaso los has matado?”- dijo Rodolfo apuntándolo, -“papá ya no quiero esta vida, yo me voy de aquí, me alejo de ti para siempre”- dijo Adolfo asustado, -“antes te mato, que me abandones y me delates, porque esta mujer nos meterá en la cárcel”- dijo Rodolfo, apuntándolo, en eso apareció Celia y se puso en medio, -“¡no!”- dijo Celia, pero Rodolfo había disparado, -“¡mamá!”- dijo Adolfo viéndola caer tras ser baleada, Adolfo disparo a Rodolfo dos veces, la jovencita asustada gritaba, veía a Rodolfo caer muerto, luego abrazo a su madre, -“mamá perdóname, mamá no debí dejarte, debí traerte conmigo, perdóname mamá”- dijo Adolfo abrazado a su madre, -“no hijo perdóname a mí por no rescatarte de esta vida por no hacer de ti un hijo de bien, por no ser valiente y arrastrarte a que llevas esta vida”- dijo su madre cerrando los ojos, -“¡mamá, no me dejes mamá!”- dijo Adolfo llorando, la señorita asustada los veía, en eso entro la policía, -“manos arriba”- dijo el policía, -“salven a mi madre por favor” -dijo Adolfo llorando.

(Juan Gabriel- amor eterno, canción de fondo)-“Tu eres la tristeza de mis ojos, que lloran en silencio por tu amor, me miro en el espejo y veo mi rostro el tiempo que he sufrido por tu adiós, obligo a que te olvide el pensamiento, pues siempre estoy pensando en el ayer, prefiero estar dormido que despierto de tanto que me duele que no estés, yo he sufrido tanto por tu ausencia, desde ese día hasta hoy no soy feliz y aunque tengo tranquila mi conciencia, sé que pude haber yo echo más por ti, oscura soledad estoy viviendo la misma soledad de tu sepulcro, tu eres el amor del cual yo tengo el más triste recuerdo de…. Como quisiera, que tú vivieras, que tus ojitos, jamás se hubiera…. cerrado nunca… y estar mirándolos, amor eterno… e inolvidable, tarde o temprano estaré contigo para seguir amándonos…..)- decía Adolfo mientras estaba en la cárcel en plena noche con un pedazo de tela vieja en un rincón del reclusorio, temblaba de frio, veía a su madre acercándose que lo abrigaba y se alejaba sonriente, -“perdóname y cuídate mamá”- dijo Adolfo abriendo los ojos, -“tengo47 años, ahora estoy viejo llevo 25 años encerrado”- dijo Adolfo con lágrimas pro sus mejillas, todos impactados escuchaban la historia de Adolfo.

-“Desde ese día no eh podido dormir tranquilo, siempre veo a mi madre aparecerse, que me acurruca en mi cama y me dice que sea un buen hijo”- dijo Adolfo, -“hijo todos tenemos derecho a una segunda oportunidad y todos aquí presentes la vamos a tener, porque la libertad se aprecia cuando uno rompe las cadenas de la desgracia, de los errores cometidos de todo aquello que nos ata y nos mantiene prisioneros en el alma, ahora salgamos a dar lo nuevo, lo bueno, lo maravilloso que hay en la vida, la libertad de estar con nuestros seres queridos” -dijo el padre Zaid.

(Annette Moreno – guardín de mi corazón, música de fondo), cada uno se puso de pie y salía del centro de rehabilitación:

Imanol salía y abrazaba su hija que ya era una señorita lo esperaba con un ramo de flores, él lloraba de felicidad al poder abrazarla.

Salvador estaba con sus padres, ellos le daban un beso, él se veía contento, cuando le atraen el cuadro de su enamorada que había fallecido.

Gerald estaba saliendo, veía a su hermano y madre que lo abrazaron, el soltaba lágrimas de felicidad al ver que su familia se disculpaba con él.

Eleonor salía, veía a su tía que la abrazaba, ambas contentas estaban de la mano secándose las lágrimas unas a las otras.

Lurdes salía y veía a Julián, ella se acero triste, él le dio un peluche con un corazón, Lurdes lo abrazo y lloraba.

Pierre salía y veía sus padres que estaban esperándolos, él sonreía los abrazo, ya ancianos estaban.

Adolfo salía y veía su madre sonriente que se marchaba vestida de blanco, el padre Zaid se acercó abrazarlo.

“LA FELICIDAD DE TENER LIBERTAD ES DE PODER DISFRUTARLA CON NUESTROS SERES QUERIDOS DISFRUTANDO DE MOMENTOS QUE SON AGRADABLES EN LA VIDA”.