Detrás de la Puerta

Su presencia era aplastante ante mí, pude ver el reflejo del desprecio con solo levantar la mirada y sentir en ese instante que las cosas en realidad eran tal y como las había escuchado, que el fastidio que dijo que sentía era latente a tal punto que se podía ver como giraba todo a su al redor pero él no se movía ni un solo milímetro, solo me observaba de arriba hacia abajo diciendo con la mirada que ese no era mi lugar y no lo iba hacer jamás, que en realidad en su corazón no existía ni iba a existir espacio para mí, que todo lo que paso entre nosotros solo fue mi ilusión y las ganas de estar con alguien de tener una relación normal como la tienen los demás, a eso se redujo mi vida, a levantar la mirada y ver por el retrovisor de mi auto su desprecio y apatía al tener que salir a despedirme aun cuando era consciente que ya sabía lo que había sucedió en su oficina, cuando inocentemente iba a entregar los documentos que se le habían quedo en casa y sin querer escuche como hablaba despectivamente de mi como si fuera un ser inferior que no merecía nada de él solo lastima; en ese instante fue el principio del fin para mí. Ya que en ese momento pude ver como 10 años de mi vida pasaban por el frente de mis ojos, sin tener siquiera la posibilidad de parpadear, con el corazón en la mano pero con la fuerza que me caracteriza no dije nada solo me limite a entregar el sobre y marcharme como era de costumbre, pero esa mirada era algo que jamás iba poder olvidar, sentí como calo en mis huesos como si fuera un taladro con la firma convicción de hacerme daño, como un veneno que se le da en pequeñas dosis para que le cuerpo no lo detecte y solo se deteriore poco a poco, en pocas palabras era como desfallecer sucumbir simplemente morir ante alguien a quien había conocido hace mas ya 20 años y que no solo era mi compañero de casa si no también la persona que había amado con locura, haciendo que mi mundo se transformara de tal forma que las cosas a mi alrededor parecían irreales y poco razonables cuando no se trataba de él, llenando todos y cada uno de mis espacios con detalles que parecían intencionados a demostrar que era todo para él o eso pensé hasta ese día, cuando lo escuche hablando de mí como un objeto, como una toalla de cocina la cual desechas cuando esta sucia, así me sentí, mi cabeza daba vueltas y no podía más con mis pensamientos ni conmigo, tuve que para a un lado de la carretera por miedo hacerle daño alguien mientras conducía y lo peor de la situación fue que no pude llorar, no pude desahogarme aunque sentía que me estaba asfixiando por la cantidad de pensamientos, recuerdos e imagines que se venían a mi mente, algo dentro de mí me lo impedía, tal vez era le poquito orgullo que quedaba o la incredibilidad de lo que estaba pasando, me tomo todo el día reaccionar, me perdí totalmente en mis pensamientos a tal punto que cuando pude volver a mis sentidos me di cuenta que era casi de noche, controle un poco mis sentimientos y tome el teléfono móvil, con sorpresa y algo de rabia vi mensajes y llamadas muchos de ellos eran de él, al principio eran normales simplemente preguntado cómo estaba? o que hacía? a medida que transcurrió el día los mensajes se fueron transformando en textos de enojo y preocupación o bueno eso parecía, ignore todo y me dirigí a casa al subir por el ascensor me lo encontré de frente cuando la puerta se abrió, el con cara de sorpresa pero muy enojado me abraza preguntando si estoy bien y el porque no respondí en todo el día, le dije que estaba bien que solo necesitaba tiempo para mí que me sentía un poco cansada y quería dormir, él me toma de la mano y pregunta que me sucede porque de repente estoy así, solo me limito a decir que no tengo nada, que estoy cansada. Ya en mi habitación después de tomar un largo baño escucho como se abre la puerta e inmediatamente finjo estar dormida, él sigilosamente tomar mi teléfono móvil para revisar si había algo extraño; lo escucho hablar con mi mejor amiga y mis conocidos y al no encontrar respuesta de lo que pasa se da por vencido y se acuesta mi lado abrazándome con fuerza como si no quiera dejarme ir, en ese instante por mi cabeza se repetían todas y cada una de las palabras crueles que él había dicho y la forma como se refería a mí, un escalofrió recorre mi cuerpo y me hace sentir nauseas de la cólera, con cada palabra que mi cerebro repetía una y otra vez no pude soportar las arcadas y me levanto de la cama y empiezo a vomitar aunque solo había desayunado y mi estomago estaba prácticamente vacío, él se sienta a mi lado mientras que estoy tirada en piso del baño, no puedo soportar su presencia y le dijo que se vaya y cierro la puerta con llave, discute conmigo mientras intenta abrirla yo simplemente lo ignoro y me quedo el resto de la noche tirada en el suelo mirando al techo y pensando que iba hacer.

Después de una tomentosa noche, cuando el sol empieza a iluminar el baño tomo la decisión de salir después de una ducha rápida, al abrir la puerta veo que él durmió sentado en el piso cerca al marco de la puerta, al pasar por su lado le pregunto porque había dormido en esa posición y me dice que estaba preocupado por mí, le arrojo una sonrisa sarcástica y le digo: “si, claro!”, él muy enojado me toma del brazo y me dice que le explique que sucede yo lo miro con furia a los ojos y le digo que me deje ir que necesito calmarme porque puedo decir cosas que no van al caso, el ignora lo que digo e insistir tantas veces que hace que mi cabeza no pueda soportar más y termino diciendo la verdad de una forma tosca con el menor tacto posible, prácticamente escupí todo lo que pensaba como si fuera una cascada, recitando cada palabra que había escuchado y haciendo énfasis en cada una de las cosas crueles que había dicho, repitiendo una y otra vez el hecho que había mencionado que él nunca me había visto como mujer y que solo sentía lastima por mi porque no tenia familia, mientras apretaba mis puños y lo miraba fijamente le dije sarcásticamente que ya entendía la frialdad de su mirada, a medida que iba diciendo lo que pasaba por mi cabeza sin ningún filtro pude ver como su rostro iba cambiando y quedaba totalmente pálido bajando la mirada mientras me decía que las cosas no eran como yo pensaba que era un error, un escalofrió recorrió mi cuerpo nuevamente y con más rabia que antes pido una explicación pero solo se queda callado y empieza enojarse conmigo y me dice que yo porque no respecto su privacidad, controlo mis ganas de golpearlo con todas mi fuerzas, levanto la mirada de forma desafiante y con un tono frio y cortante le digo que en ese momento la que debe estar enojada soy yo no él, al pronunciar esa frase sentí un chasquido en mi cerebro el cual me hizo volver a mis sentido, me suelto su mano y lanzando una mirada amenazante al tiempo que pido de nuevo una explicación al no obtener respuesta me doy la vuelta para volver a la habitación cuando sentí que me abrazo por la espalda, de nuevo siento que la sangre hierve en mi interior y me suelto con violencia de el haciendo que mi mano derecha se golpee contra la pared, en ese momento sentí mucho dolor pero no lo demostré, solo corrí a la habitación me cambie y Sali de casa con un pequeño bolso en el cual llevaba dos mudas de ropa.

Sentí que huía pero si no lo hacia iba ha terminar colapsando por la cólera que estaba invadiendo mi cuerpo con cada gesto palabra, movimiento o mirada que él realizaba era como si me quitara el aire cada vez que levantaba la mirada hacia mí, por mi mente pasaba todo lo que habíamos vivido en los últimos 10 años y como era posible que una persona que según yo conocía hace 20 años pudiera cambiar de la noche a la mañana o acaso yo había vivido en una mentira tan cruel y hasta ahora me había dado cuenta, solo quería una explicación pensaba que tal vez había una y que era lógica para lo que estaba pasaba, pero no era así, dos días después de irme de casa cuando ya no tenía más ropa limpia volví, al abrir la puerta lo encontré sentado en la sala sosteniendo una cerveza en la mano y en la otra con su teléfono celular llamando de nuevo a mi mejor amiga la cual no había dejado de llamarme desde que me había ido, pidiéndome que volverá que hablar con él que escuchara lo iba ha decir, ella solo hablo con mi contestadora jamás levante el teléfono, sentía que el momento adecuado para hablar aún no había llegado, pero cuando me senté en la sala y lo vi con los ojos rojos, ojeras y lagrimas me calme y escuche lo que iba a decir, por mi mente pasaban imágenes confusas de situaciones parecidas en las cuales las explicaciones ambiguas y poco razonables eran creíbles porque en realidad jamás me había importado, pero ese día era diferente mi cerebro estaba trabajando al 100% y exigía una respuesta totalmente lógica, al principio solo preguntaba porque me había ido y que pensaba yo, al ver que ahora era yo la de las miradas frías y desinterés por la pregunta empezó a pedir perdón, poco a poco me llene de frustración de nuevo pero en esta ocasión me había prometido mantener la mente fría y buscar respuesta, las cuales fueron apareciendo con cada pregunta que él hacía y no obtenía información de mi parte, sin pronunciar una palabra obtuve las repuesta que estaba buscando, con cada frase partió mi corazón pero entendí muchas cosas que habían pasado, al final del día tenía claro que de nuevo era una mujer de mediana edad soltera, que el amor es realmente efímero y la costumbre puede más que cualquier sentimiento, yo sentí que perdí algo importante para mí pero tenía mi conciencia tranquila al haber dado lo mejor de mí, por su parte las cosas no iban hacer tan fácil, puede que no tenga familia y que el sentimiento que él decía profesarme no era real pero la empresa si lo es, al igual que todos los bienes y fue algo que quedo claro cuando le recordé que yo empecé desde cero cuando tenia 15 años que fue cuando lo conocí, cuando lo volví a ver a mis 20 años ya tenia una pequeña empresa la cual estaba a punto de tener su primera sucursal, mientras mas pasaba el tiempo la estabilidad de mi empresa también lo hacía, a los 30 ya con 10 años de amistad empezamos a salir también empezó a manejar ciertos asuntos en la compañía y 10 años después yo con 40 años el con 47 años todo un empresario o eso decía ya que manejaba la totalidad de mi compañía hasta ese día que fue el fin de mis sentimiento, él termino renunciando y yo tomando de nuevo el control total de mis bienes, lo primero que hice fue renovar la mayoría del personal incluyendo a su mano derecha con quien siempre se burló a mis espaldas, él busca empleo y yo aun con el corazón roto pero con el alma totalmente estable entendí que sentirse sola estando con alguien al lado no es normal que el amor es bidireccional no unidireccional porque se supone que es correspondido, también soy consiente que el tiempo cura las herida o la mayoría de ellas así que por primera vez me dedicare a mi y aprender un nuevo arte cada vez que me que la sensación de soledad vuelve, aun me encuentro con él de vez en cuando, siempre me repite que sí me amo con todas sus fuerzas y que aun me ama, pero ahora me amo mas yo y trato de compartir una buena comida con un amigo e irme a casa temprano para terminar mis actividades o simplemente leer un libro, el ser libre me enseño que independiente de lo que suceda siempre me tendré a mi y debo serme fiel sin importa las circunstancias.