incluso cuando ignoro el miedo 

tratas de abrazarme bajo una dulce luna 

tus hipócritas manos tocan mi rostro

el veneno llena mi alma 

y mis miedos con el. 

un gallo canta en el amanecer

y tu presencia es agotante con mi ser 

las palabras sobran y brotan como 

un camino sin comprender.

el velero llama  la tripulación 

un arma preparada y deseos de venganza 

asoman la plenitud del alma. 

a sido perforada y dominada 

y el hechizo de tus ojos a muerto  con el

como unos pequeños versos de una dulce venganza

 y la melodía sin dejar hablar tu alma.

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