LA BELLA Y EL LOCO
Introducción:
Muchas personas creen que la historia de la bella y la bestia, se trata solo de una historia de cuentos de hadas en la que una horrenda bestia se gana el amor de una dulce y hermosa chica de aldea la cual con su amor logra liberar la bestia de un hechizo de una bruja que le convirtió de un hermoso y apuesto príncipe a un horrible hombre bestia quien habitaba en su castillo por muchos años con sus fieles sirvientes los cuales habían sido convertidos muebles y objetos del castillos.
Pero nuestra historia es aunque algo parecida también es muy diferente de esta, pero existe una cosa de la que estoy seguro y es que nuestra historia cambiara la forma de muchas personas ver el amor.
Están quienes ven el amor como un imposible otros en particular lo ven como algo que nunca llegará y algunos otros, bueno algunos otros lo ven como algo que llego en el momento equivocado y cambio el rumbo de sus vidas para siempre.
En lo personal les pido por favor lean esta historia sin prejuicios, sin paradigmas mentales o religiosos y sobre todo abiertos al pensamiento que el amor es una posibilidad en cualquier momento.
Capítulo I
EL INICIO
a. El Inicio
Esta historia comenzó un día cuando Francesco salió a buscar trabajo, él jamás imagino lo que podía llegar a pasar con su vida.
Claro primeramente debo explicarles quien es Francesco, es un joven de unos 30 años de edad quien tiene una profesión muy hermosa, él es un cocinero profesional y lamentablemente está desempleado como la gran parte de las personas en la Italia de hoy.
Son tiempos difíciles para los italianos la guerra mundial y la dictadura han dejado marcas en esta nación, Francesco como muchos sicilianos tiene que emigrar al norte de Italia en busca de nuevas oportunidades de vida, pues la industrialización y autonomía que ha llegado a Sicilia no han podido equilibrar la tasa de desempleo tan grande en la nación, no hay lugar para cocineros y mucho menos como este joven.
Esta es la parte donde seguro usted se preguntará: ¿Por qué cocineros como Francesco? Y la respuesta mi querido o querida lector o lectora es que este cocinero aún está comenzando su carrera él inicio años antes de la guerra, pero la falta de experiencias obviamente por la guerra lo ha dejado ahora en muy mala posición en consideración con el resto de los cocineros de su ciudad…
Claro nuestro amigo tiene una sorpresa bajo su manga, y es que sus salsas pomodoro son las mejores de su barrio y la otra arma es que todo lo que él prepara queda exquisito, sin mencionar que es un verdadero experto en pasteles… si sorprendentemente Francesco ha resultado ser todo un especialista en pastelería.
Lamentablemente; como nada es perfecto en esta vida, Francesco cuenta con una familia que no cree en él. Una esposa que aun que él la ama ella no cree en él y lo cree un loco fracasado, recuerdo en una ocasión estando en randazzo Sicilia ella lo corrió de la casa echándolo a escobazos de la casa y lo mando a buscar trabajo según ella “trabajo de verdad” él en ese momento estaba preparando unas salsas de pomodoro sicilianas que le había enseñado la nona y se las habían encargado y Bianca su esposa derramo la olla grande que estaba en el fogón con los tomates llevando fuego, eso fue humillante, pero lo más triste de todo no fue eso, sino que sus hijos, Alberto, Salvatore y Luigi también disfrutaban viendo como Bianca maltrataba y trataba de loco a su papá y cada día por la mañana los bambinos se burlaban de él diciéndole <<papá está loco, papá está loco>>.
Por esta razón todos en randazzo llamaban a Francesco “Francesco el loco siciliano”…
Lo que Bianca nunca pudo imaginar es que esa actitud tan desfavorable y humillante hacia su marido le traería consecuencias graves al llegar al norte de Italia en Génova una pequeña ciudad costeña del norte italiano que bien aunque fue bombardeada durante la guerra mundial está experimentando un crecimiento industrial y económico fuerte y se requiere de fuerzas trabajadoras, el hecho de estar en la costa significa entrada y salida constante de personas; es decir marineros, turistas, comerciantes y buscadores de una nueva vida… este es precisamente el lugar donde un cocinero podría desempeñar sus funciones alimentando tanta gente… ahora Francesco sale a las calles a buscar un empleo y llego a un callejón de la pequeña Génova donde vio un anuncio que cambiaría su vida, estaban solicitando personal de cocina en el hospital de la ciudad… inmediatamente Francesco salió corriendo para el centro médico a solicitar el empleo y demostrar que él era el cocinero que ellos necesitaban.
b. Bella
Antes de continuar con Francesco debo hablarles de Bella, esta es una joven de Milán que creció en la “vía Cenisio” a unos 1170 metro aproximadamente del “cimitero monumentale” de esta bella ciudad, tiene unos 20 años de edad y muy por el contrario de Francesco es una profesional con muy amplia experiencia a pesar de su corta edad, por su puesto la guerra fue un lugar para adquirir experiencia. Aaah perdón lo olvidaba Bella es Enfermera profesional graduada en la universidad de Milán, claro ahora Bella vive y trabaja aquí en Génova a unos 119 kilómetros aproximadamente de Milán su tierra natal, pero ella está feliz aquí pues en esta pequeña ciudad puede ejercer su profesión con nuevas y grandes expectativas, ella es hermosa, muy buena en su profesión y muy respetada como profesional y al contrario de Francesco su familia cree mucho en ella y la apoya.
Ella está paseando por el malecón de Genova y anda buscando trabajo, consiguió un empleo en la clínica privada de Genova y le está hiendo muy bien, cada noche envía un telegrama a sus padres en Milán después de salir del trabajo.
Bella tiene un novio, pero aun que él la ama; ella no, ella ha sentido que tantos años de noviazgo y rutina han acabado con la pasión, el fuego y la creatividad del noviazgo, este chico ya ni siquiera se toma la molestia de cortejar a su novia, pues él piensa que después de tantos años y de estar tan cercano a la familia que ya eso para él no es necesario. Pero no se ha dado cuenta que en su novia ya no hay amor ni pasión por él, que su relación es solo una fachada frágil que en cualquier momento se derrumbara, él trabaja en el cuartel del ejército italiano, no como soldado, sino como telegrafista del ejército.
Su nombre, es un nombre que marcara la vida de nuestro amigo Francesco para siempre, su nombre es: Donnatelo Venturi.
O como Bella le llama: “Donna” este chico aún no ha sabido lo que es el amor y está a punto de aprenderlo con la lección más dolorosa de su vida.
En una ocasión, donna y bella caminaban juntos por la catedral de genova cuando bella se detuvo a contemplarla y al afinar bien su vista pudo visualizar una pareja que felizmente caminaba desde el altar hasta la salida del recinto sacro, ella observo el vestido blanco hermoso de la novia y la cara de felicidad que esta tenia, como el brillo en sus ojos parecía hacer resplandecer todo su rostro, definitivamente, esa novia estaba viviendo el momento más feliz e importante de toda novida.
Bella apretó fuertemente la mano de su por tantos años novio mientras él observaba las palomas volar alrededor de la catedral sin tan siquiera notar que su novia miraba con deseos una boda, de pronto al percatarse de lo que ella está observando le dice: << lindo, lindo, pero no es algo para nosotros>> << y ¿Por qué no?>> replico ella de una vez en forma sorprendida a lo que él rápidamente argumento << porque eso es solo para quienes no tienen seguridad de su amor, ella no va de la mano de su amor, ella lleva por la mano a su hombre>> << Tu y yo somos diferentes, no necesitamos nada de esas cursilerías, pues tenemos una relación muy solida y ese dinero nos lo podríamos guardar para otros planes>>
Ella en ese momento soltó muy suavemente la mano de donna y bajo la mirada y con un semblante muy triste continuo caminando a su residencia.
Bella era una chica que contaba con una profesión, padres que le amaban, pero un novio que aun no sabía amarla aun que le amaba y no se había dado cuenta de que la estaba alejando cada vez más de su vida con esa actitud.
c. La Llegada al hospital
Llego el dia en que Francesco se presento a llevar sus papeles al hospital y ofrecer sus servicios como cocinero; ah, por poco lo olvido; también se llevo un poco de salsa de pomodoro para obsequiársela a quien le fuera a recibir los papeles y recordó como fue su salida de casa esa mañana:
Cuando iba saliendo de la casa Bianca grito desde la cocina, mientras daba el desayuno a sus tres hijos; ¿Dónde vas pedazo de loco? Mientras en el fondo se escuchaba las rizas burlonas de sus hijos y los gritos de ellos decir <<Papá es un loco, papá es un loco>> y de pronto ¡zaaas pac! Sonó la pared, francesco se agacha al escuchar el ruido y se asusta, cuando voltea se da cuenta que era un zapatazo de tacón tipo zueco que le lanzo ella. Él se apresuro a salir y la esposa desbocada se lanzo sobre él, quería quitarle el frasco con salsa mientras gritaba corriendo detrás de él, << dame esa porquería de frasco vago sin oficio, anda a buscar un trabajo de verdad, ya lo decía mi madre, que tenias manos de chica y que no eras un hombre hecho y derecho>> <<!eres un pedazo de loco¡ y eso es lo que siempre serás un Loco>>
Bueno como pudo el loco se escapo salvando el frasco con el contenido de pomodoro.
Francesco al terminar de recordar esa escena matutina tomo el frasco con sus dos manos y lo puso frente a su cara y mirándolo fijamente dijo como para sí mismo << Frasquito tu me vas abrir las puertas en este hospital>>.
De repente se escucharon unos pasos en el pasillo y una voz dulce de mujer que decía: <<señor Francesco puede usted pasar a la oficina de recursos humanos>>, era el momento esperado por este hombre, él tendría ahora la oportunidad de demostrar que no era ningún loco y que su salsa le abriría muchas puertas a infinidad de oportunidades.
Al final del pasillo había una puerta era de madera con una media ventana de vidrio de ese que no es trasparente y tenía un cartel que decía “recursos humanos” él toco muy delicadamente la puerta y alguien grito <<pase adelante, está abierto>> con una voz muy amigable y tranquilizadora.
Esto le sirvió mucho al joven cocinero ya que las tenciones y emociones de esta mañana le habían descontrolado un poco y sentía temor de que lo fueran a tratar mal en la entrevista.
<<Muy buenos días señor Francesco>> dijo la directora de recursos humanos, << buenos días respondió él>> <<¿viene usted a entregar sus papeles de chef de cocina?>> << sí, bueno; en realidad tengo muy poca experiencia, pero me esfuerzo cada día por dar lo mejor de mí en profesión>> <<déjeme que yo determine eso señor francesco, y ¿Qué es lo que usted mejor prepara?>> <<las salsas de pomodoro a la siciliana, y mire… aquí… le traje una muestra, está fresca>> << ¡Ay, pero que rico se ve¡ solo que muchos de nuestros pacientes no podrán comer esto, porque es muy asido para sus estómagos, pero no se preocupe que siempre habrá espacio en una buena cocina italiana para las salsas de su nona y la de nuestro hospital no será la excepción señor francesco… hagamos algo, vamos a comer y dejemos que esta salsa hable por usted>> << no le gustaría que yo mismo le prepare la pasta>> pregunto francesco con un tono un poco inseguro, pero con deseos de demostrar de lo que era capaz.<< no, de ninguna manera, ya la pasta está lista, continuemos nosotros con la entrevista mientras mando esta delicia a la cocina para que nos la sirvan>>
respondió la directora en una forma muy agradable, mientras llamaba a su secretaria, cuando esta entro miro a francesco con mucha emoción y tomo el frasco de salsa para llevarlo a la cocina. Francesco estaba un poco sorprendido, pensaba dentro de sí mismo: “¿Qué será esto? De seguro esto es respeto, si, así debe sentirse ser respetado”
Bueno, unos minutos más tarde, se oyó unos toques a la puerta, era la secretaria anunciando que ya podían pasar al comedor a degustar la pasta.
Mientras caminaban al comedor, francesco iba un poco emocionado y nervioso, esta sería la primera vez que alguien con nivel de exigencia probaría su salsa y esta podría representar una decisión trascendental para su vida y la de su familia aunque ellos no creen en él.
Al llegar a la mesa, la directora observo la pasta el color de la salsa y sintió la fragancia que esta tenia y suspirando dijo <<pero que rico huele esta salsa, muero por probarla ya>> se apresuro a sentarse y tomando los cubiertos tomo un gran bocado y quedo en silencio total de degustación mientras movía su cara de un lado a otro acompañada de todo su cuerpo manifestando lo rica y exquisita que era la pasta con la salsa.
Francesco respiro de alivio y pensó en todas esas veces que su esposa Bianca le había derramado la salsa diciéndole que eso no los llevaría a nada, ahora era la tan despreciada salsa la que estaba a punto de abrirles las puertas a una vida totalmente nueva y mejor.
Y efectivamente fue así, cuando la directora hubo terminado de comer la pasta; miro fijamente a francesco con una sonrisa en los labios y una mirada fija y le dijo << ¿Sabe usted lo que estoy mirando ahora?>> y el joven cocinero todo confundido respondió que no, no tenía idea de lo que ella estaba mirando <<al nuevo ayudante principal de la cocina del hospital central de Génova, usted señor Francesco acaba de obtener el empleo, le felicito y lo espero mañana bien temprano>>.
Francesco salió del comedor directo a su casa, él sabía que por primera vez llevaría una noticia que debería hacer feliz a su familia y sobre todo que cambiara la forma de su esposa verlo a él y que sería una buena oportunidad para que sus hijos aprendieran a respetarlo, por ahora la razón por la cual ellos le llamaban loco era la causa de su nueva buena fortuna.
Francesco iba caminando a un paso que parecía que andaba volando, y al pasar por la plaza que está en la catedral de Genova había ahí una joven pareja, al cocinero le llamo mucho la atención la joven vestida de enfermera que se veía muy triste mientras un joven vestido de telegrafista del ejercito le hablaba al parecer algunos argumentos profundos y convincentes por las expresiones de su rostro, pero tristes para ella, pareciera que esos argumentos le decepcionaban, pudo francesco también observar al fondo una joven pareja salir de la catedral, se estaban cansando, él caminaba demasiado rápido, pero pudo ver la felicidad que se reflejaba en el rostro del joven novio al salir de brazos con su amada esposa y pensaba “porque una pareja tan joven discute frente a la catedral con una boda tan hermosa en pleno proceso, como desearía yo que Bianca ahora que seré el ayudante principal del chef aceptara casarse conmigo en la iglesia, me gustaría verla vestida así de blanco y que pudiéramos salir por la puerta de la catedral”. Y continuó su camino a casa.
Cuando Francesco regreso esa tarde a casa, estaba muy contento; llevaba un ramo de rosas color salmón y era un paquete grande que había comprando para Bianca, unas hogazas de pan y como era una ocasión especial; un pastel de tiramizu para los bambinos. Si, Francesco estaba muy feliz. Entro a la casa cantando y bailando, cuando Bianca lo vio fue a detenerlo preguntándole que era lo que le estaba pasando, pero él dándole las flores le dijo << Bianca mi amor, estoy feliz, el trabajo es mío, es nuestro mi amor, me dieron el puesto de ayudante principal del chef del hospital central de Génova>> los bambinos bailaban y gritaban al fondo << papá lo consiguió, papá lo consiguió>> pero Bianca se lleno de ira y tomando las flores las batió contra el piso y las pisoteo hasta destruirlas y comenzó a gritar << Tú, tu celebras como si el dinero ya fuera nuestro, apenas comienzas mañana a trabajar y ya estás gastando dinero en cosas innecesarias como estas porquerías de flores, además aun está por verse cuanto tiempo duras en ese trabajo>> lo chiquillos cambiaron inmediatamente las tonadas de su canción u ahora gritaban <<papá es un loco, papá es un loco>>Francesco entristecido, pero también muy confundido le dijo <<pero tengo lo más importante, el empleo y todo va salir bien mi vida ya verás>> << es más cuando venia para acá vi una boda en la catedral de Génova, es hermosa, es más me gustaría que con el tiempo cuando ahorre alguito podamos casarnos, Bianca amor mío quisiera verte vestida de novia junto a mi frente al altar de la catedral>> <<¡Qué, Estás Loco!>> grito ella escandalizada, y de un solo grito mando a los bambinos que se fueran al pateo de la casa y se fue con ellos dejando a Francesco con sus panes, pastel y… y las flores en el piso.
Frnacesco quedo ahí sentado junto a la mesa con una mirada triste mirando fijamente a la plataforma de la mesa con sus manos unidas sobre ella pensando en lo mucho que él amaba a su familia y no lo graba entender porque ellos no lo valoraban a él, ni al amor que les tenia, ni mucho menos a lo que él hacía por ellos. Al fin y al cabo todo lo que él estaba haciendo era para garantizarles un mejor futuro a sus hijos y esposa.
Quedo ahí por horas esa noche pensando y decidió que por esa noche no podría dormir con Bianca, ella seguro que no le permitiría entrar al cuarto y para que no hubiera más escándalos por el día era mejor quedarse en el sofá como ya había pasado en muchas otras ocasiones. Este sofá había sido el compañero de lloro de Francesco muchas veces cada ocasión en que Bianca lo corrió del cuarto por esto o por aquellos siempre venia él a dormir aquí y ahí soñaba con que todo algún día cambiaria y que su familia llegaría a ser un hogar de paz y amor.
a. El Inicio de una nueva vida trae un primer encuentro
A la mañana siguiente el gran día había llegado, Francesco se levanto muy temprano, aun cuando todavía no salía el sol… claro cabe destacar que estaban en primavera. Se baño, entro cuidadosamente al cuarto para no despertar a Bianca, tomo allí su ropa y empaco una filipina (chaqueta de cocinero), un gorro de cocina y un viejo delantal que le había regalado la nona cuando cumplió quince años, este delantal significaba mucho para él, pues con este había aprendido a cocinar la salsa napolitana de la nona. Y él había prometido que cuando estuviera cocinando entre profesionales lo usaría en su primer día hasta que otra persona especial para él le regalara uno nuevo.
Se vistió, preparo el desayuno para sus hijos y su esposa, les dejo una nota:
“AMADA FAMILIA; LES AMO MUCHO, PERDONENME SI AYER FUI MUY IMPULSIVO Y LOS MOLESTE… HOY COMIENZO A TRABAJAR, DARE LO MEJOR DE MI POR AMOR A CADA UNO DE USTEDES, YA VERAN QUE INICIA UNA NUEVA VIDA PARA NOSOTROS, PUES YA NO TENDREMOS MÁS NECESIDAD DE NADA… LES DEJO DESAYUNO HECHO CON MUCHO AMOR…
LES AMA FRANCESCO”
Luego de dejar todo organizado en su casa salió disparado para el trabajo, iba tan contento soñando despierto mientras caminaba que parecía no ver nada de lo que estaba pasando a su alrededor, el joven cocinero iba imaginando y preguntándose como seria la cocina, los cocineros, el chef y cada uno de los miembros del personal del hospital, pero de pronto… ¡Blum! Se sintió un golpe fuerte, francesco salió rebotando hacia atrás y casi se cae y para cuando pudo mirar al frente estaba parado frente a la policlínica de Genova y pudo percatarse de que había una joven enfermera en el piso, Francesco no necesitaba ser adivino para saber que él había atropeyado con su cuerpo a la joven enfermera mientras caminaba soñando en su trabajo, asi que se apresuro a ayudarla a levantarse y acercándose a ella le dijo <<disculpe señorita pero no la vi, es que venía distraído>> << si, me di cuenta de eso>> respondió la joven al apresurado cocinero <<es que hoy inicio en mi trabajo y ando de afán, disculpe>> replico el afanado hombre y siguió de largo, la joven lo siguió con la mirada mientras lo veía desaparecer apresuradamente y en forma quejumbrosa decía <<ese hombre como que es loco, me tumbo y lo único que hizo fue decirme eso y se desapareció>>.
De pronto se escucho una voz que gritaba al fondo, dentro de la clínica <<licenciada, licenciada, ¿se encuentra bien?>> era un guardia de seguridad de la clínica que vio el espectacular choque entre Francesco y la joven enfermera. <<Sí, estoy bien gracias, solo que ese hombre andaba como dormido por la calle, jejeje>> respondió ella sonriéndose… y entro a la clínica, al entrar una enfermera le quiso atender y revisarla a ver si no se había raspado o lastimado los brazos <<Bella déjame revisarte>> <<no, yo estoy bien>> respondió ella y siguió a la sala de enfermería.
Por el otro lado el ansioso cocinero ya estaba a punto de llegar, cuando se percato de que muchas calles atrás había derribado a una joven y prácticamente ni le había puesto cuidado “ahh, se me olvido disculparme correctamente con la enfermera y revisar que no se haya lastimado, bueno; al terminar el día de trabajo pasare por la clínica esa a ver si la veo y me disculpo con ella”.
Luego de caminar un poco más, al fin llego, ya estaba él en su nuevo trabajo, un lugar donde la gente si creería en él y valorarían su comida.
Al entrar a la cocina del hospital, una mujer lo recibió sentada en un escritorio cercano a la puerta y le pregunto quién era, él le respondió su nombre y ella inmediatamente le dio la bienvenida y le entrego un uniforme del hospital y él entro en un cuarto de cocineros para cambiarse de ropa y después de ponerse el uniforme se coloco el delantal de la nona encima y salió a la cocina…
Este era un mundo muy diferente a cualquier cosa que él haya podido haber visto antes, y de repente escucho una voz que le decía <<buenos días, usted debe ser Francesco>> era el Chef de la cocina quien le estaba dando la bienvenida, el joven impactado le extendió la mano y entre nervioso y emocionado respondió tartamudeando su nombre.
El chef media aproximadamente unos dos metros de altura, y eso que Francesco mide un metro setenta y cinco; él estaba impactado con el tamaño de este chef y toda la experiencia que este representaba.
<<¿Tú eres chef?>> pregunto él <<bueno a decir verdad, yo estudie, pero tengo mucho tiempo sin ejercer por eso no me atrevo a llamarme chef en este momento>> <<pero cocinas muy bien, yo probé la salsa que trajiste ayer que por cierto estaba muy sabrosa y el hecho de que a la jefa le haya gustado ya es algo muy bueno>> dijo el chef en un tono de muy buena voluntad.
Cuando llego la tarde ese día, para Francesco el tiempo había pasado muy rápido, él no quería que llegara el final de la jornada laboral, se sentía tan bien y confortado en ese trabajo que aunque era su primer día para él era una conexión como si hubiera trabajado muchos años ahí.
Al finalizar la jornada por la tarde Francesco salió caminando aceleradamente lleno de alegría, camino un rato por el malecón de Génova y contemplaba el mar y los barcos que se veían al horizonte. Francesco pensaba en lo emocionante que había sido su primer día de trabajo, él estaba feliz y con su mirada fija en el horizonte agradeció a Dios por su nuevo empleo, pero sobre todo por la oportunidad de ejercer su profesión, su pasión y de recuperar su moral.
Esa tarde él salió del malecón y camino por el casco metropolitano de Génova, paso por la catedral y se detuvo un momento para contemplar un poco esa majestuosa iglesia e imaginar cómo sería el momento en que Bianca decidiera aceptar casarse con él y organizar su hogar, como se vera ella de hermosa con el vestido blanco. Si, él pensaba en esto y en todo lo que quería ahorrar para sorprenderla a ella con una boda por todo lo alto, porque al fin y al cabo ella lo merece según él, por haberle dado tres hijos y estar a su lado. Compro unas hogazas de pan para llevar a la casa para la cena. Al llegar a casa Bianca estaba sentada con cara de molesta, la boca estirada con el pico muy parecido a un embudo y el ceño fruncido con un cigarrillo en la mano. Al entrar Francesco le contó con gran emoción lo bien que le había ido en el trabajo y como todos le respetaban. Ella solo se limitaba a mirarlo y escuchar en silencio sin decir nada, no emitía una sola palabra, pero tampoco le regalaba al entusiasmado marido una sonrisa de apoyo y celebración. De pronto abrió la boca en una forma muy seria y molesta y dijo: <<Bueno, espero que te vaya bien ahí, a ver si al fin podemos comer algo decente en esta casa… y a ver cuánto te dura el cuentico del cocinerito que quería ser chef>> y luego de eso se levanto y se fue al cuarto recordándole a Francesco que él debía dormir afuera en el sofá de la sala.
CAPITULO II
UN SUEÑO DESTRUIDO
a. La Envidia Ataca
Cada día Francesco se levantaba temprano se bañaba, se ponía una buena ropa y preparaba un exquisito desayuno para dejárselo a su esposa e hijos antes de irse de modo que cuando ellos se despertaran pudieran disfrutar de una suculenta comida, pero Bianca después que este joven cocinero se iba, corría a la cocina y desechaba toda la comida en la basura mientras lo observaba marcharse a través de la ventana y susurraba en vos media << ojala te vaya bien mal pedazo de loco>>.
Francesco vestía una peculiar filipina negra muy hermosa con la bandera de su patria en los dos lados del cuello y en el pecho el escudo de Génova al lado derecho y al izquierdo el logo símbolo del hospital central de la ciudad, este cocinero camina cada día por todo el centro, la plaza de la catedral el malecón y todo el camino al trabajo y le encanta usarla, siempre que pasa por la policlínica recuerda el incidente de la enfermera que tumbo, pero no recuerda su rostro y se imagina si él algún día fuera contratado para cocinar en esa clínica, ¿Qué tal seria su paga?
En el trabajo por otro lado le va muy bien, ha llegado a ser muy respetado y aun admirado por muchos de sus compañeros, los pacientes y el personal le fascina mucho la salsa de pomodoro de Francesco y el chef lo ha nombrado souse cheff de la cocina, él se siente muy bien y se da cuenta que está siendo honrado en su trabajo. Este es un lugar donde decir que alguien se atreva a derramar la salsa pomodoro de Francesco sería una locura, no solo eso, sino que este joven cocinero ahora chef reconocido ha aprendido a preparar algo que en su tierra natal nunca habría aprendido y que también marca la distinguida comida italiana: “El Pesto Genovense”… si, ahora Francesco también prepara Pesto.
Ya han pasado aproximadamente unos seis meses desde que nuestro amigo entro a trabajar en esta cocina y desde el primer día hasta hoy él se levanta a cocinar para su familia desayuno y Bianca se levanta a botarlo, llega sentándose a contarle a su esposa e hijos lo bien que le va en el trabajo y cada noche ella solo lo escucha con cara de amargura y sin dejar notar un solo gesto de alegría por él. Y luego se levanta de la mesa dejándolo hablar solo y le dice palabras crueles y duras como: tu siempre has sido y serás un fracasado y esto no es más que una racha de buena suerte, pero en algún momento caerás y fracasaras de nuevo como siempre loco fracasado, <<pero Bianca Ti amo mi amor y todo esto lo hago por ti y nuestros hijos>> <<si, hijos que tienen la desgracia de llevar tus genes cobardes y fracasados>> replica ella antes de salir batiéndose al cuarto y tirar la puerta con gran fuerza.
Un buen día se sentó Francesco en la plaza, miro hacia la catedral y estaba abierto, pensó en entrare y orare un poco. Ahí estaba todo lo que representa la vida espiritual para un italiano y comenzó más que orar a meditar en lo que era su vida, recordó un proverbio que un día un sabio viejo italiano repitió en su barrio en randazzo que decía que cada día trae la oportunidad de sonreír y ser feliz… solo que Francesco no entiende porque Bianca no logra ver en este trabajo la oportunidad de ser feliz. Ella nunca ha creído en mi pensó él como meditando en sus adentros, mis hijos prácticamente no me quieren como su papá, no sé porque mi familia no me ama, como quisiera que me amaran como yo los amo, como quisiera que Bianca se diera cuenta que la amo y que no quiero que ella salga ni por un instante de mi vida, sino que podamos casarnos aquí mismo en esta catedral. De pronto un llanto fuerte, pero disimulado se dejo escuchar en la catedral y perturbo la meditación de Francesco, él busco con la mirada el origen de este llanto desconsolado y vio una chica joven baja de cabello negro rizado hasta las caderas, de piel blanca, nariz perfilada y sus ojos no lograban verse por las lagrimas en sus ojos, ella lloraba parada en la puerta de la catedral, parecía como si un amor hubiera maltratado su corazón; él la observo llorar sabiendo que ese llanto provenía del fondo de un corazón herido, pensó en que ella era muy valiente, porque él había entrado a la catedral a meditar en sus penas del corazón, pero ella había entrado a llorar por la misma razón y pensó; tal vez ella halle más alivio que yo, pues deseo llorar pero no me atrevo y se marcho de la catedral rumbo a su trabajo.
Cuando salía de la catedral un hombre vestido de cívico militar tropezó con él y Francesco se volteo para disculparse y este hombre le dijo <<¿Qué te pasa estúpido eres loco?>> Francesco solo lo miro y continuo su camino. El hombre apresurado entro a la catedral y ahí consiguió a la desconsolada joven y al verla le dijo; <<¿Qué haces aquí? Te dije que nos veríamos en tu residencia>> << no Donna, tú no quieres tomar con seriedad nuestra relación, piensas que ser novios de hace seis años ya te da el derecho a quererme tratar como si fuera tu esposa, y yo aun soy muy joven y quiero vivir y alcanzar sueños… mi sueño más grande es tener junto a mí a un hombre que me ame, me comprenda y que quiera tener una familia hermosa conmigo, tú no quieres eso>> respondió ella entre llantos y lagrimas <<ven, vamos, te llevare a tu casa, perdóname por ser tan duro Bella, es que yo quiero que tu veas la vida como yo la veo>> <<no, yo no quiero eso, solo quiero que seas romántico, que me muestres la ternura y el amor que yo necesito, que desees casarte conmigo en esta catedral y vivir en una casa hermosa y que tengamos hijos que vayan al colegio y vuelvan a llenar nuestra casa de alegría>> <<sabes que yo no tengo tiempo para esas cosas y ya nosotros estamos más que seguros con tantos años de noviazgo, es más ya es como para que nosotros hubiéramos estado viviendo juntos>> y tomándola de la mano la llevo y la monto en un jeep del ejército italiano y la llevo a su casa donde la dejo que entrara y descansara y se marcho para su trabajo.
¡Epa!, hay algo aquí que a mí no me cuadra del todo… ¿Por qué si Bella es una profesional tan exitosa anda con este bravucón que no la valora ni respeta?
La cosa es que Bella es una profesional joven y exitosa para su época, pero lamentablemente en sus tiempos de adolescencia en Milán se ilusiono con donnatelo y para aquel entonces él no era tan siquiera la sombra del arrogante y frustrado que hoy día es; era un joven con sueños y deseos de superarse el cual intento muchas veces entrar a la facultad de medicina de Milán y no lo logro, luego intento estudiar enfermería por un tiempo y en dos semestres quedo reprobado y expulsado de la universidad por falta de aplicación a la carrera, podríamos decir que para él ver a Bella vestida de enfermera es como un dolor o una herida abierta hablándolo decentemente, yo en lo personal le llamo envidia. Luego de su fracaso como estudiante de enfermería donnatelo viajo a Milán donde un amigo le ayudo a entrar a estudiar para telegrafista y luego a entrar a trabajar en el ejército italiano en Génova en el departamento de comunicaciones.
Ya para ese entonces Bella era su novia y vio todo el sufrimiento de este joven y su frustración, por esta razón aun que ella ya no le amaba sentía cariño y aprecio por él y mantenía ese amor tratando de ayudarlo a superar esos problemas y frustraciones, pero ella desearía poder casarse con él, porque ella nunca tuvo otro novio y piensa que tal vez con él podría cumplir su sueño de casarse en la iglesia y tal vez él cambie con el matrimonio.
Francesco llego esa mañana después de haber meditado en la iglesia y pasado un mal rato con ese hombre arrogante en la entrada de la misma, cuando salió del cuarto de empleados al área de la cocina reviso en la cartelera de empelados y observo una información que decía que muy pronto vendrían nuevas enfermeras para el hospital. Aun no sé porque, pero este anuncio llamo mucho la atención de Francesco quien colocándose su gorro de souse cheff entro a la cocina y un mundo totalmente diferente le esperaba, él podía ver las cocineras y los cocineros caminando apresuradamente de un lado al otro por la cocina, moviéndose de las cocinas a los generadores de frio y de calor, a los almacenes y entre las estaciones de la cocina. Si, este era un mundo especial, donde Francesco era el segundo jefe, solo el chef ejecutivo o principal tenía más autoridad que él en todo lo que era el área de la cocina y en esta área Francesco era muy respetado y apreciado.
Cada día debían preparar una hoya de veinte litros de salsa de pomodoro Napolitana al estilo siciliana la cual todos en el hospital bautizaron como “SALSA A LA FRANCESCO”.
Y todos los empleados hacían cola para comer de esta rica salsa, si, Francesco y su salsa eran muy famosos en el hospital.
b. Bianca y sus Hijos Avergüenzan a francesco.
Un día mientras Francesco trabajaba llego a su trabajo alguien, la persona que lamentablemente llegaría para hacer mucho daño a la carrera de este joven chef; si, era Bianca y vino con la mala intención de crearle problemas a Francesco en su trabajo. Cuando él la vio llegar se alegro mucho y hasta los ojos le brillaban mientras caminaba hacia ella y le decia a todos sus compañeros que ella era su esposa.
Cuando él hubo llegado a ella la fue a abrazar con alegría y emoción y de repente ella lo desprecio haciéndole con la mano derecha sus brazos aun lado y comenzó a gritarle:
<<Tú, pedazo de loco, ladrón de recetas, mal padre, mal esposo, ¿cómo es posible que yo tengo que venir hasta acá a suplicarte frente a todos en tu trabajo que me des algo de dinero para la comida de tus hijos? ¡Cuando vivimos contigo en casa!>>
<<Pero Bianca ¿Qué es lo que te pasa? ¿Porque me hablas así?>> respondió Francesco, pero ella no se detenía; <<Ya hable con la directora del hospital y te van a quitar la mitad del sueldo para entregármelo para tus hijos, porque tu eres un irresponsable>> <<¡¿Qué?!>> Exclamo él en tono confundido; <<Tu sabes mejor que nadie que todas las semanas compro la comida para la casa para que no les falte nada ni a ti ni a nuestros hijos, ¿Porque me estas haciendo esto?>> ella llena de ira le grita; <<¿y?, ¿Qué hiciste? ¿ya le mentiste a esta gente diciéndoles que tus salsas son tuyas? Ellos deben saber la verdad, y es que tu no eres más que un pobre diablo de Randazzo, que tuve que recoger de estarse muriendo de hambre, tu eres un fraude y esas salsas no son tuyas, son de Salvatore el pastelero del vecindario en randazzo, siempre lo haces, ¡siempre te robas sus recetas!>>
francesco se quedo sin palabras y bajo la mirada, lloró silenciosamente mientras ella con cara de felicidad y burla le dijo muy suavemente como si le fuera a besar la mejilla <<Nos vemos en casa mi fracasado>>.
Él solo se quedo ahí parado, pensando en como podría Bianca ser la mujer de la que él se enamoro hace años atrás, estaba irreconocible, miro a su alrededor antes de volver a su lugar de trabajo y observo como muchos de sus compañeros de trabajo que hacia unos minutos atrás habían demostrado admiración y respeto por su comida ahora se burlaban entre ellos silenciosamente de él.
Esa tarde cuando Francesco salió del trabajo; decidió que era mejor dar una vuelta por el malecón y la catedral antes de volver a casa, él estaba muy confundido en ese momento todo el amor que sentía por Bianca se transformo en dolor, humillación y decepción, pero pensaba mucho en las posibilidades de dejarla y comenzar una vida nueva, de todas formas ya ella le estaba quitando la mitad del salario, ya no tenia nada más que quitarle.
Al llegar a la catedral se sentó en las escaleras de la misma y comenzó a llorar, recordó una y otra ves ese momento en que su propia esposa tiraba su carrera al piso y la forma en que sus compañeros se burlaban de él.
Pero mientras lloraba, pensaba en todas las cosas que desearía poder decirle a Bianca, pero que no lo hacia porque amaba a sus hijos y deseaba que ellos tuvieran una familia feliz, muy a pesar de que ellos tampoco lo amaran.
De repente Francesco nota que no está solo en esas largas y amplias escaleras de la catedral, unas jóvenes estaban sentadas a unos cuantos metros de él, las observo y continuó pensando en que iba hacer con su esposa Bianca.
Al llegar a casa Bianca le esperaba victoriosa celebrando su gran triunfo sobre Francesco y le dejo claro que ahora más que nunca su habitación seria el mueble de la sala y aunque ella perciba ahora el 50% del total del salario de Francesco; es obligación de él seguir comprando la comida y llevando los gastos de la casa. Él esa noche no durmió pensando en lo mucho que todo esto le afectaba, esa noche Francesco quiso culpar al mundo entero de lo que le pasaba mientras pensaba, ¿como es posible que un hombre se esfuerza tanto trabajando para su familia y son ellos quienes buscan el fracaso de quien los quiere sacar adelante?, de repente un pensamiento llego a su mente; <<Siempre el dolor de la traición viene de manos de nuestros seres más amados para prepararnos para el éxito>>, así que Francesco pensó, si mi esposa e hijos me maltratan tanto y menos precian de esa manera sera porque vienen cosas buenas en el futuro.
A la mañana siguiente Francesco no paso por la catedral, ni por el malecón, ni tampoco se detuvo a observar la policlínica de Génova. Este día todo se veía simple y vacío para él. Al llegar al hospital unos enfermeros lo saludaron al pasar y después cuando ya él llevaba unos pasos más adelante pudo sentir como ellos se burlaban de él.
Al entrar en la cocina sintió un poco extraño, el ambiente; los cocineros se mofaban de él y ya no querían hacerle caso, le llamo la atención a un cocinero y este le respondió: <<¡Que vas hablar tu pobre loco! Que se roba las recetas de otros>> al oír esto Francesco se entristeció mucho y desde ese día no volvió a ser igual de apasionado en la cocina y ya prácticamente ni se sentía su presencia en la cocina.
Una tarde fue y se sentó en el banco de la catedral y comenzó a llorar de desesperación, lloró como un niño pequeño lloraría, la flema comenzó a escurrir de su nariz, se le trancaba la respiración y se privaba en su llanto y pensaba:
<<no puedo entender porque la gente que anda en malas intenciones siempre le va bien, si tal ves yo pensara hoy en dejar mis buenos deseos y ser un hombre mal intencionado tal ves la gente me respetaría y no me trataran como un loco fracasado, tal ves mi esposa valoraría mis cosas buenas ya que casi nunca se las dejaría ver. Entonces el Francesco que ella hoy conoce no seria este sino otro muy distinto, si como chef he dado todo lo mejor de mi, ¿Cómo puede alguien venir a creer las mentiras de Bianca y tratarme ahora de loco? Por eso desde ahora no quiero tratar con nadie, no quiero tratar con el mundo ni con las personas, me dedicare en mi trabajo tan solo a ser un hombre callado y limitado a hacer sus funciones>>.
Luego se levanto y limpiándose las lagrimas y de su rostro y la flema de su nariz se retira a su casa.
Al llegar a casa; Bianca y los bambinos no estaban, Francesco se preparo una cena y se fue a dormir al cuarto, si, el mismo cuarto de donde Bianca le corría todas las noches. Cuando su esposa y los bambinos llegaron en la noche se consiguieron con una nota sobre la mesa:
“Bianca, no entiendo porque te has empeñado en arruinar mi vida y mi carrera, pero quiero que sepas que desde hoy todo será diferente. Y por cierto, en el cuarto duermo yo y de otra manera deberás dormir conmigo”.
Cuando ella leyo la nota fue y se acosto en el mueble donde tantas veces habia dormido Franceco, al otro dia cuando todos en casa despertaron ya no estaba el joven cocinero, pero ahora tambien se veia algo diferente a todos los dias… miraron a su alrededor y al observar la mesa; no habia desayuno preparado ni tampoco nota de buenos dias para su familia, solo una casa silenciosa y una mesa vacía.
Esta mañana Francesco no caminaba a pasos acelerados, tampoco se apresuba por llegar rapido a su trabajo, más bien caminaba como alguien que se siente defraudado por la vida y por aquellos que amaba y que ahora no consigue sentido a su vida. Llego al hospital
y paso directo al cuarto de empleados a cambiarse, es extraño, porque ahora cuando Francesco abrió la puerta de la cocina no sintio esa magia que siempre sentia y persibia, ahora le parecia un lugar atemorizante donde todos parecian animales salvajes esperando un error suyo para comenzar a chismiar y hablar a sus espaldas de él.
Francesco pensó en no ser más ese chico decente y apasionado que trabajaba en la cocina y mejor volverse un hombre, silencioso, amargado y brusco para hablar. Cuando entro a la cocina todos lo miraban y él solo simulaba no ver a nadie y estar solo en toda la cocina. Así que todos al ver su actitud se burlaron más de él y murmuraban entre si: “Este hombre es loco, es muy capaz que quiera golpear al alguien como golpea a sus hijos”.
Así que le comenzaron a llamar “El Loco Francesco”.
Capitulo III
El Encuentro.
a. Una Llegada
una mañana de lluvia genovense, las calles de la ciudad estaban desbordadas de tanta agua y Francesco llegaba empapado al hospital, al pasar por el frente pudo notar que la entrada estaba ful de gente cubriendose de la lluvia bajo el pequeño techo de la entrada, es decir; entrar sera una misión imposible practicamente, nadie queria caer victima de esa fuerte lluvia otoñal ese dia, solo Francesco caminaba con calma bajo la misma. Dio la vuelta y entro por la parte de atrás por la puerta que lleva a los empleados directo a la cocina del comedor, pero como ya era tarde imagino que era el ultimo del equipo de cocineros en llegar asi que se tomo la libertad de cerra la puerta con seguro por dentro.
Y justo cuando ya estaba a unos pasos de la puerta que da al cuarto de cocineros para secarse la empapada ropa por el tan amado uniforme de suschef del hospital central de genova. “Rimmmm” era el timbre, francesco va y se asoma y habia un autobus parado ahi frente a la puerta, él se apresura a abrir y oye unos golpes fuertes a la puerta mientras él va anunciando a voz en cuello que ya va llegando a abrir. De un tiro hala la puerta hacia él y de pronto… ahi, justo ahi estaba ella, baja, delgada, pero rellenita a la ves, blanca, pero no catira, cabello largo, risado, pero oscuro, ojos oscuros, pero a la ves claro; como si el mismo Dios le dijera: “mira, lo hermoso que he hecho sus ojos café claros”… una nariz perfilada, pero un poquito pronunciada; claro no mucho, solo lo necesario para hacerla hermosa, cejas grandes, pero bien definidas y sin exageraciones, y lo más hermoso… si, lo más hermoso, tenia un rostro de ángel… si, era la mujer más bella que él jamas hubiera visto. Buenos dias dijo ella, yo soy, bueno, nosotras digo; somos el nuevo grupo del equipo de enfermeria que viene hoy a instalarse en el hospital. Y él queriendo darles la bienvenida solo podia tartamudear y balbusear las palabras buenos dias; “bububububuenos dias, papapapasen aaaadelante” ellas se rieron y pasaron de largo ignorandolo por total, bella lo miro una ves más por encima de su hombro izquierdo hacia atrás donde él se encontraba detras dejado en la puerta hasta que de pronto escucho la vos de su asistente que le llamaba; licenciada, licenciada; ¿viene con nosotras? Usted es la que está a cargo de nuestro departamento de enfermeras y necesitamos que hable con la directora. “si… si, ya voy” respondio ella y se marcho. Cuando iban caminando a recursos humanos Bella le comenta a su asistente:
Bella: María; <<¿Viste el ragazzo que nos abrió la puerta?>>
María: <<si, Licenciada, si lo vi, si todas lo comentan, parecia un pollito remojado con esa ropa empapada, debe ser algun portero o bedel del hospital, usted sabe que aquí hay muchos obreros trabajando y como no sabe hablar, tal ves fue un empleo que le dieron aquí por caridad>>
Bella: << ¿Tú crees?, si se veía hasta un poco comico, pero no creo que sea una persona con problemas especiales, ni tampoco creo que sea un portero o algo por el estilo, creo que se puso nervioso, pero no te niego que me parecio muy comico cuando tartamudeo… ummm, pero ¿sabes qué? Se me parecio al loco que me empujo y derribo en la entrada de la policlinica la otra ves>>
María: <<Tu crees licenciada, no creo, imaginate, ese hombre era un loco, este, bueno, no se ni que pensar, jajaja… ya lo veremos>>.
Llego la hora en que Bella se entrevistaria con la directora, ustedes ya recuerdan obviamente a la simpatica señora que le dio el empleo a Francesco y degusto con mucho placer la salsa que él trajo, bueno es la misma que va a entrevistar hoy a Bella.
Buenos dias Señorita Bella, pase a delante y pongase comoda por favor, sea bienvenida a nuestra humilde institución. Dijo la directora a Bella desde su escritorio donde estaba sentada, se medio levanto y estiro la mano derecha para saludar a esta joven enfermera en señal de bienvenida.
Bella: <<Hola buenos dias, disculpe usted el pequeño retrazo, es que no podiamos entrar; por la lluvia la puerta principal está colapsada de personas>>.
Directora: <<no, no te preocupes por eso, espero que ya hayas visto las instalaciones… bueno hiendo al grano, me gusta mucho su curriculo, usted es una enfermera ejemplar a pesar de su muy corta edad, se que se hará cargo del departamento de enfermeras tranquilamente y que no tendré novedades graves>>.
Bella:<< de eso usted ni se preocupe señora directora, le puedo garantizar un trabajo cien por ciento optimo de parte de nuestro departamento desde ahora en adelante>>.
Directora: <<¡Bueno!, me parece muy bien… y dime algo; ¿ya conociste todo el hospital? Vamos te llevo personalmente a recorrerlo>>.
Asi que fueron caminando por toda la institución hasta que finalmente llegaron al comedor, la directora le insistió a Bella en mostrarle la cocina y presentarle al chef y su equipo de trabajo.
<<Bella, mira este es el Chef de la cocina y este es su equipo de trabajo>> y de esta menera le fue presentando todas y cada una de las personas que laboraban en esa cocina, pero al fondo estaba un chico concentrado en su trabajo, tan concentrado que ni siquiera se habia molestado en levantar la mirada a ver quien habia llegado a la cocina. Hasta que llegarón a la estación de este chico callado…
<<¡hoola buuenos dias!>> dijo la directora al acercarse a la estación del joven que cortaba sileciosamente los vegtales, él lavanto su cabeza y antes de que pudiera hablar; realmente antes de que pudiera hablar, fue enmudecido por la belleza de esta joven, él sintio como si escuchara las campanas de la catedral de genova y pudo ver palomas blancas volar a su alrededor, y cuando la miró a los ojos pudo ver los más lindos ojos de toda Italia… esta era una visión hermosa que iba acompañada de la música que se podía oír en el fondo en toda la cocina por los parlantes de ambiente musical, si, hermosa esa canción,
“la più bella sei tu”,de Natalino Otto. Esta canción la había escuchado Francesco millones de veces, pero ahora tendría un nuevo sentido en su vida, si, vaya que lo tendrá desde ahora en adelante… y de pronto su hermosa revelación se vio cortada por la directora que le hablaba: <<Francesco, Francesco, ¿Te sientes bien?>> << sí, sí, sí, todo bien directora… ¿me decía algo?>> y Bella lo miraba con un sonrisa en su rostro y una expresión de que le parecía gracioso todo lo que estaba sucediendo, de pronto la directora se dirige a ella y le dice; <<Licenciada, este es el sus chef; Francesco, señor Francesco, ella será a partir de hoy la nueva jefa del departamento de enfermeras del hospital>> <<ahh, que bien, bienvenida entonces señorita, Francesco para servirle>> dijo él mientras extendía rápidamente su mano hacia la hermosa señorita. <<Bella, dígame Bella; mucho gusto señor Francesco, pero creo que ya lo conozco, ¿usted no cree?>> dijo ella mientras estrechaba su mano. <<No, no creo, en verdad, nunca podría olvidar una persona tan especial como usted y menos con ese nombre>> respondió él <<si, si, ¡ya sé!, usted es el que me tumbo frente a la policlínica de genova>>… dijo ella sonriendo <<¡¿Si?! ¡Qué pena!, yo ese día venia apurado porque era mi primer día de trabajo aquí y no quería llegar tarde… perdóneme por favor, no fue mi intención lastimarla ese día>> dijo él todo apenado. <<jajaja, no te preocupes, hasta luego bambino>> dijo ella sonriendo y se marchó con la directora a su oficina. Cuando ya iba saliendo de la cocina, el chef se le atravesó en la puerta; <<me gustaría invitarla a almorzar hoy algo especial, como ocasión de bienvenida a usted y la señora directora, mandaré a preparar algo especial para ustedes, digo ¿si la directora está de acuerdo?>> claro que si, respondió la directora; pero solo si cocina Francesco… <<cuente con eso>> dijo el chef.
Inmediatamente que salieron ellas, el chef se dirige a Francesco y le dio la noticia de que tendría que cocinar un almuerzo especial para la nueva jefa del departamento de enfermería por órdenes de la directora, él se emocionó y pensó en preparar algo súper especial, algo que llegara hasta ella y pensó en un pollo; una cotoletta a la parmigani. Paso toda la mañana preparando este almuerzo.
Bella por otro lado continuaba hablando con María sobre su experiencia de conocer al loco que la tumbo frente a la policlínica y justo en ese momento mientras ellas conversan en el cafetín se les acerca una joven ayudante de cocina y les dice: <<Disculpen que me entrometa, pero las escuche hablando de Francesco>> <<si, dice María; aquí diciéndole a la licenciada que ese señor tiene cara de poco confiar>> la joven se acerca un poco más a la mesa y inclinándose unos cuantos centímetros les dice en voz media baja <<si, pero la verdad es que a él le dicen “El loco de Randazzo” y nosotros aquí hemos llegado al punto de llamarle: “El Loco Francesco”, porque figúrense ustedes que una vez hasta intento envenenar a su esposa e hijos con su “Dizque súper salsa”… y no le miento en todo esto que les digo, tengo a toda la cocina de testigo, pues fue aquí mismo en la cocina donde su esposa vino a denunciarlo públicamente>> <<¡Santo Padre de la Gloria!>> exclamo María << Bella, usted hoy hablo cerca, cara a cara con un loco psicópata>> <<¿Ustedes creen, será mejor no comer nada esta tarde entonces?>> pregunto Bella con un tono de voz nervioso.
b. Un Desaire, un menos precio.
Al llegar la hora del almuerzo Bella llevo consigo a su asistente María y cuando llegaron al comedor ya estaban ahí esperando el chef y la directora…
<<Buenas tardes Bella>> dijo el chef mientras estrechaba delicadamente su mano << Buenas tardes, esta es mi asistente María>> respondió Bella. La directora se apresura a entrar en la conversación y dice: <<bueno, sentémonos, ¿Qué estamos esperando? Tengo mucha hambre>>.
Un mesonero hace señas a Francesco de que puede sacar el Antipasto; Y Francesco manda unas Focaccia finas al parecer son Sicilianas con macedonia de Ensalada Capressa encima. Esto era realmente irresistible al paladar, pero aunque “todos” comieron incluyendo a María, Bella no quiso comer la entrada, es más ni tan siquiera probarla… <<Esta Focaccia está muy rica, es lo mejor que he probado antes>> dijo la directora; como siempre muy fanática de la comida de Francesco. Por otro lado el chef parecía no darle mucha importancia y solo se limitó a decir <<Está bien, no está mal, pero las he visto mejores>> María mira a Bella y le dice: <<Anda Licenciada prueba un poco, está muy buena>>. Pero ella solo se limitó a cambiar de temas de conversación durante toda la degustación del plato de entrada. De secundo plato envió este joven una cotoletta a la parmigini acompañada de vegetales y polenta. Realmente era toda una experiencia sentir el jugoso y refrescante sabor de la salsa parmesana ligada a los trozos de polenta seguidos de un bocado de cotoletta, calabacín y berenjena.
Pero nuevamente aunque a todos pareció fascinarle la comida a Bella parecía no importarle y en una repetitiva acción se negó a comer de este plato tan espectacular. Los mesoneros retiraron los platos y Francesco noto nuevamente un plato sin probar y pregunto quién no se lo había comido y los mesoneros contestaron al mismo tiempo: <<La Licenciada, ella no quiere probar nada preparado por ti>>
él tomo el postre que era una rica leche frita, un dulce español que un día aprendió a preparar compartiendo con unos amigos españoles, pero nuevamente parecía que ella no probaría su comida, de modo que Francesco mando una nota con el postre que decía: “Una Exquisitez para una bella rosa”… la directora se sonrió y miro a Bella fijamente con una sonrisa en el rostro y le dijo: <<¿Porque al menos no lo pruebas?, hazlo aunque sea por decencia; no entiendo qué problema tienes, porque todo el día ha demostrado ser una joven muy dulce y tierna>> <<Es que ese señor me parece extraño y no me parece confiable>> respondió ella con un poco de pena ante las interrogantes y confrontaciones de la directora. << A mí, por el contrario, si me preguntan; me pareció muy buena su comida, es más no entiendo que pueda hacer aquí un chef como él, debería de estar en un restaurante de alta cocina internacional>> dijo María interrumpiendo como siempre. <<Si, bueno, la verdad es que tengo muy buenos planes para él a futuro, con unos contactos en la cadena de hoteles Hilton, ellos siempre me piden chef jóvenes para que los recomiende, pero todo a su tiempo>> acoto el chef, quien en realidad tenia también un poco de confianza en que a pesar de todo lo sucedido Francesco tenía el potencial para llegar lejos en su carrera profesional.
En eso entra a la cocina un mesonero y le dice a Francesco que se aliste que lo llama el chef y la directora en el comedor, él se puso nervioso, porque pensó inmediatamente que criticarían muy duro su comida, pues si a la invitada especial no le plació comer de mi comida ¿Para qué otra cosa podrían llamarme? Pensó él para dentro de sí mismo.
Se quitó el delantal y acomodo bien su filipina (Chaqueta de cocina) y salió caminando lenta y nerviosamente hacia la mesa de sus invitados. Al llegar ahí, podía ver todo el comedor, mesas largas una junto a otra como si juntas hicieran una gran mesa de metros de larga y esta misma secuencia se repetía como 10 o 15 veces a lo largo de todo el comedor… él lo vio y pensó en voz alta: “¡Dios mío! ¿Nosotros le damos comida a toda esta gente más los pacientes?” y continuo caminando, de repente pudo visualizar a un lado del salón una pequeña mesa redonda donde estaban cuatro personas sentadas, esa era la mano derecha del chef, la que se movía en alto de derecha a izquierda y viceversa mientras él daba voces diciendo “Francesco aquí estamos” “Como si no lo supiera” suspiro Francesco mientras se acercaba más a ellos.
<< ¡Señor Francesco, usted siempre sorprendiéndome con su comida!>> exclamo la directora inmediatamente en lo que él se aproximó a la mesa… <<Gracias señora directora>> respondió él un poco apenado, <<pero que lastima que no todos pudieron disfrutar de este almuerzo>>, <<bueno señor Francesco, en realidad me hubiera encantado comer sus platillos se veían ricos, pero la verdad es que estoy muy llena comí mucho en el desayuno y aun no hago digestión>>.
<<Pero en realidad ha sido un almuerzo emocionante y delicioso chef, ¡oh, perdón!, señor Francesco, muchas gracias, muy rico todo>> dijo la directora.
<< no, no se preocupe señora directora, Francesco en realidad es el segundo chef de nuestra cocina, aunque ustedes por no ser cocineras no estén familiarizadas con nuestra cultura interna, en realidad Francesco es el chef Francesco para el resto del equipo de la cocina.
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