Creo que he caído en la demencia de tu amor,
queriendo ser absorbida por cada uno de tus besos,
envolverme lentamente en tus caricias
sin pensar en si el mundo acabara mañana.

He creído en ti desde los tiempos remotos,
he pensado en tu existencia desde que tengo conciencia,
soñando con que un día estuvieras frente a mi
y tuviera que tomar la decisión correcta,
perder el miedo, dejar de lado mis inseguridades,
y sostenerme fuertemente a mi intuición,
a la intuición de cada mujer que tiene frente al amor.

Y en cada sueño te me aparecías
pero nunca te vi con tanta claridad
hasta el día en que me abrazaste y detuviste el mundo,
me hiciste soltar en aquel momento
mis ultimas ganas de querer acabar con mi vida,
me disté la esperanza perdida,
fuiste la luz en mi callejón oscuro,
iluminando cada uno de los rincones de mi corazón
difuminando las nubes grises de mi mente.

Mi corazón me exige a gritos la necesidad de amarte,
hasta el final de mis tiempos si la vida lo permite,
necesito que lo permita, para verte sonreír,
porque no hay lugar mas bello en este mundo
que la curvatura de tus labios al sonreír.

He conocido la paz a tu lado,
encontrándola en tus besos en mi frente,
tus caricias en mis mejillas,
en tu mano apretando fuertemente mi mano.

He sentido el corazón latir tan rápido,
pero nunca tan rápido como el día en que te conocí,
que estupidez la mía al decirte que no te necesitaba,
cuando en realidad, amor mío, te esperé toda la vida.

busqué un millón de veces toparme con tu mirada,
y mil veces la encontré,
aunque el destino este sobrevalorado,
gracias a él tuve que el coraje de decir,
que te quiero amar hasta que la vida lo permita.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS