Me olvidé el dinero en casa…

Me olvidé el dinero en casa…

Me olvidé el dinero en casa, como iba a visitar una amiga y no tenía que comprar nada no me preocupé demasiado.

Solo tenía $20.- en el bolsillo de la campera. Pensé que de todos modos no eran muchas cuadras y ese dinero me alcanzaría por si tenía que tomar algún colectivo a la vuelta.

En el camino vi una persona delgada (extremadamente delgada) revolviendo el container de la basura. Al verme pasar me pidió unos centavos para comprarse un “sanguche”. Busqué en mis bolsillos y no encontré una sola moneda, solo tenía los 20 pesos.

Le contesté: “Lo siento, no traje monedas”. El respondió: “Gracias, de todos modos” Que Dios la bendiga”.

Me disponía a seguir mi camino, no muy feliz por cierto, con algo de culpa por no haber llevado monedas, cuando vi que al lado de este hombre había una personita muy pequeña, creo que no tendría más de 2 años. En sus manos sostenía una ensalada de frutas y esperaba.

Me quedé observando: el hombre le acarició la cabecita y le dijo: “Hijito, ahora busco una cucharita para que la puedas comer”

Ahora no solo sentía culpa, me había invadido una tristeza infinita, me sentí mal, muy mal.

Busqué en mi bolsillo el billete y se lo di. El hombre asombrado me dijo “gracias” y yo me quedé pensando que tendría que caminar también al volver, pero mi conciencia me decía bien, procediste bien. Y una ráfaga de paz y tranquilidad me envolvió, como si un ángel me hubiera sonreído.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS