-En esto se a convertido tu vida, en un ir y venir del carajo, en el dulce suplicio de medio día, en el carente afecto de media noche, en un pasar de horas interminables que como trenes que dejan el humo del rencor, de las falsas posibilidades, del ensueño roto en un mar de desespero. En esto van y vienen sin cesar, dejando consigo el ruido disperso de los amores lejanos, de los pañuelos llenos de la suciedad del amor, de las promesas caídas a la mitad, de las calles que de apoco se despiden de tu nombre y de la triste soledad, que acompañada, irónicamente por las letras de tu nombre que se diluyen en mi cara, como el humo azul de este cigarrillo, que recorre cada recuerdo que alguna vez tuvimos, que deja seco los labios y la garganta como un puñado de arena, y que en los pulmones no queda más oxígeno que el aliento muerto de tus besos.

Rolan Gelvez

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