Historias de un reino perdido

¡Lo siento amor mío, pero para proteger lo que amo debo partir-dijo el rey con lágrimas en sus ojos a punto de salir-! sabes que es necesario ¡

-lo sé-dijo la reina ya sollozando-sé que debes partir pero aun así no quiero dejarte ir
-No me hagas esto más difícil, debo buscar el método de destruir este mal que se avecina a nuestro reino-dijo el rey tratando de esconder su tristeza.
-Entiendo pero júrame algo-dijo la reina mirando en los ojos de rojo profundo del rey
-Si dime-respondió el
-volverás, pues no quería decirlo pero estoy en cinta.
-el rey pone una mano en su vientre sintiendo así el corazón de la pequeña criatura-¿por qué no me lo dijiste?-dijo el asombrado-¿por qué callarlo hasta este momento?
-porque quería decírtelo cuando estuvieras tranquilo pero ahora hay cosas más apremiantes que ameritan tu partida
-no lo olvidare, por ti y nuestro hijo volveré-dijo con certeza aquel rey de férrea voluntad
-ten te tejí esto-ella le entrega una caperuza de color gris-esta cosida con mis cabellos lo cual te dará resistencia al fuego y la tela es de un material que te permite mimetizarte con el bosque aquí está tu espada y esto-ella lo besa en la boca tan fuerte que siente que romperá su nariz
-te juro que en 8 meses volveré en la última luna llena espera mi llegada-él toma la espada y la caperuza se la pone y acto seguido pone la espada en el estuche que está en su espalda
-te amo Astaroth jamás lo olvides-dijo ella sin soltar su mano-no mueras hazlo por nosotros
-te amo Anelís-dijo el acurrucándola en su pecho-volveré por ambos no me olvides-acto seguido saca un nomeolvides de su bolsillo y se lo pone en el cabello a ella-espérame y veras por ahora ocúltate

Él se marchó fundiéndose con la espesura del bosque a media noche mientras ella lloraba su partida por un momento ella quiso gritar y correr a su lado, pero ella sabía que eso solo haría más difícil el hecho de dejarlo partir a buscar la forma de proteger su reino

Mientras el rey Astaroth cruza aquel bosque en el frio penumbroso de esa noche teñida de una amarga despedida mira la luna de forma que busca en ella su guía entones una muy vieja amiga del rey aparece:

-Veo que dejaste a tu amada-dijo aquella sombra – ¿no crees que le puede pasar algo en tu ausencia? ¿Será acaso que la iré a visitar?

-Ya deja de decir sandeces Muerte-replico el rey con voz imponente-más bien deberías de guiarme hacia el lugar donde yo voy

– ¿Hacia dónde te diriges? y más aún ¿tienes cómo pagar el precio?

– ¿Qué quieres esta vez? -pregunto el rey- no tengo mucho tiempo que perder

– Quiero que por favor cuides de esta niña-dijo la muerte mostrando un canasto de mimbre negro-ella es la culminación de uno de mis trabajos no sé por qué, pero siento piedad, pero no quiero saber más de ella si no cuando cumpla los 5 años

– ¿Si accedo me llevaras donde necesito ir?

-Si-dijo la muerte entregando la cesta al rey-ella será tu compañera ahora su nombre será Z…

– ¿Solo Z? pregunto el rey estupefacto-

-Sí, y aquí le entrego mi regalo de «madre»-un collar con un pequeño espejo en el-cuando llegue el momento tomara sentido mi regalo.
Bueno ¿hacia dónde te diriges?

-Voy hacia donde se encuentra la torre del sabio de las tinajas-dijo el rey con fuerza en su voz-debo ir hacia allá

-En donde la luz y la sombra convergen no puedo llevarte, pero puedo dejarte en las puertas de los guardianes de la montaña ¿te sirve?

-Si-dijo el rey- y ¿cómo iremos?

-solo déjamelo a mí-dijo la muerte que en acto seguido se convirtió en un Pegaso de esquelética forma-súbete a mi lomo

Tanto el rey como su nueva «hija» marcharon rumbo hacia aquel lugar donde los ídolos de antiguos dioses yacen en su última morada

Una vez llegado a su destino la muerte procedió a dejar en la entrada de aquel olvidado lugar a nuestro rey y su nueva acompañante el lugar estaba en ruinas entre una montaña se veía como un puente se abría ante ellos estaba resguardado por lo que parecían ser dos estatuas del tamaño de una gran torre cada una mirándose fijamente por toda la eternidad una blandía una espada y la otra llevaba un escudo la imagen era imponente el rey no pudo dejar de pensar que había llevado a tan prospero reino a su caída no quería que pasara lo mismo en su tierra la cual juro proteger ante los dioses a espada y sangre así le costase la vida misma.

-Hasta aquí llego yo-dijo la muerte-este lugar ya no es de mi jurisdicción cuentan las antiguas leyendas que una vez este reino fue el más próspero y fructífero del mundo, pero un mal tan grande se lo trago dejando tras de sí miseria y desolación fueron días difíciles para mi pues, aunque mi misión es recolectar todo aquello que perece no me gusta mi trabajo, pero alguien debe de hacerlo.

-No creí que fueras tan sentimental-dijo el rey mirando a la muerte-no pensé que te doliera tanto hacer tu trabajo

-recuerda que antes de ser encomendada a esta misión era una mujer, pero la misión de los dioses fue encomendarme el recolectar las almas de los caídos más bien hasta aquí te traigo no quiero recordar más de mi pasado eso fue hace y muchas lunas más bien estate atento no sea que deba venir por ti

-Está bien. Dijo el rey tomando el cesto de mimbre negro con un velo blanco- de aquí en adelante iré solo

-Suerte Astaroth-dijo la muerte- no dejes que tu reino caiga me daría pesar y seria mucho trabajo para mi recolectar tantas almas. Acto seguido desapareció como una sombra antes de que el sol saliese.

-Bueno creo que solo somos tu y yo Z-dijo el rey levantando el velo y lo que vio fue una infanta con el cabello negro como la misma noche sus ojos negros con un destello de rojizo asemejando a brasas a punto de extinguirse una tez blanca como nieve de invierno y al ver al rey aquella niña sonrió-bueno será encontrarte algo de fruta o leche para beber.

Y así nuestro rey se dirigió dentro de aquellas puertas que conducían a aquella olvidad ciudad donde los ídolos descansan.

Una vez el rey atendió a su «hija» decidió continuar su cruzada esta vez con la caperuza que su amada le dio improviso un cargador para así dejar atrás aquel cesto de negrura mortuoria

no fue sino hasta ya entrada la noche cuando el rey sentía que ojos se clavaban en su espalda lo que la muerte no le había dicho al rey era que en aquella ciudad caída las criaturas de a oscuridad habitan libremente por las noches y se dedican a cazar y matar todo lo vivo que ven a su paso

-Aquí vienen-pensó el rey tomando a su fiel amiga en sus manos aquella espada la cual encierra el trueno en su interior forjada por una antigua civilización por encargo de los dioses la espada de nombre thundermore estaba lista para hacer frente a lo que sea.

De los arbustos salió una criatura la cual el bestiario llama un autómata, pero este era diferente estaba corrompido por una magia oscura muy poderosa llevaba una espada gigantesca y un escudo el autómata no lo pensó 2 veces y se lanzó al ataque el rey solo lo esquivo hacia un lado Z empezó a llorar y el rey pensó:

-Genial solo eso faltaba-el rey tomo a su espada y se lanzó al ataque el autómata solo se cubrió con el escudo el cual al impacto de thundermore solo vibro.

El rey seguía tratando de atacar a aquella criatura la cual se defendía con voluntad férrea pero el rey noto algo en el autómata y es que siempre cubría su pecho, antes que nada

-¿Sera acaso que esconde algo allí?-se preguntó el rey en efecto allí se encontraba aquel sello que imbuía la magia a este ser tan pesadillesco solo se podía acceder a él de una forma y era desarmando a ese ser-TENGO UNA IDEA-exclamo el rey mientras daban vueltas mirándose fijamente a los ojos tanto aquel autómata como el rey cuan anillo d ella muerte se tratase el rey corrió hacia donde está el autómata que media unos 4 metros mando su lance con la espada a lo cual el rey esquivo agilmente luego el rey de un solo golpe por ataras hizo que aquel autómata se arrodillase a lo cual acto seguido el atravesó por la espalda este ser el cual solo grito pues la espada había travesado la espalda hasta el pecho justo donde el sello se encontraba aquel ser callo dejando un gran charco de sangre y dando fin así a su vida artificial.

-Estuvo cerca mi niña-dijo el rey tomando a Z entre sus brazos a lo cual la niña dejo de llorar inmediatamente vio a su «padre» más tranquilo- más bien busquemos donde acampar creo que esta zona no es segura

El rey seguía en su cruzada acompañado de su pequeña acompañante, con la cual había pasado ya momentos algo más fraternales con ella. Después de recolectar algunas frutas y hacer un poco de papilla y jugo para darle de comer el rey procedió a dar caza a algunos animales silvestres ya llevaba 3 días sin comer, aunque el rey es de naturaleza salvaje aun no puede dejar de pensar en su amada esposa y su hijo el cual viene en camino.

– ¿Porque mi amada me habrá ocultado el hecho de su embarazo hasta último momento? -era la duda que aquejaba a nuestro héroe en su labor.

-bueno con estos peces y estas hortalizas tendré para mi viaje

El rey dispuesto a continuar después de una noche algo atareada por aquella lucha se dirige al norte de aquella ciudad abandonada buscando así la salida de esta.

La tarde cae y los albores de un viento cálido dan paso al frio sepulcral de una noche que bien sabe el estará cargada de peligros.

llegando ya donde los ídolos gigantes se entraban no pudo dejar de ver a una atalaya que estaba cerca de ellos pues se veía que había sido construida hace poco tiempo

– ¿Quién habitara aquella torre? -se preguntó el rey viendo aquella estructura de la cual un aire siniestro emanaba de ella-Sea lo que sea que habite allí no es bueno puedo asegurarlo

Una vez dicho esto Z empezó a llorar como si premonición de algo malo se tratase, el rey atento a esto desenfundo su espada y se dirigió a aquella atalaya.

Cuando procedía a entrar una risa estridente sonó desde lo alto de la atalaya y como un viento ruin bajo desde ella una mujer de tez morena que en su hombro llevaba un cuervo en los huesos la cual tenía un cetro con un cristal de brillo oscuro de ella emanaba la misma magia oscura de aquel autómata y dijo:
-¿Quién osa a entrar a mi sancta sanctórum?

-YO-dijo el rey mirando fijamente a aquella mujer- ¿COMO TE LLAMAS?

-Desde tiempos antiguos me llaman ruymalfas ama y señora de los caídos
y veo que vienes a ofrecerte como tributo ante mi

– ¿YO?,¿TRIBUTO? ! JA ¡ME DAS RISA-dijo el rey exaltado por el auge de esta batalla listo ya para atacar-SOLO SE QUE TU NO ERES DE BUENAS INTENCIONES ASÍ QUE PREPÁRATE PARA TU FINAL

-Jajajajajajaja-rió de forma estridente aquella bruja lanzando un hechizo sobre uno de los Titanes que cuidaba la montaña-VE MI VASALLO-a lo cual aquel titán se desprende de la montaña y tomando el escudo de su compañero se arma de manera para acabar con lo poco y nada que queda de esta ciudad caída la bruja procedió a montarse entonces en el hombro de aquel titán y ordeno que blandiese su espada contra el rey
el rey tuvo el tiempo suficiente para escapar de aquel ataque y al tremor de la tierra al caer tan masiva arma el rey callo

-UGH-dijo el rey levantándose pues sabía que de nuevo atacaría esta criatura de el alto de una montaña

-! MUERE ¡REY DE LOS LOBOS-exclamo aquella bruja de nuevo haciendo que el titán blandiera su espada contra el suelo esta vez el rey no pudo esquivarlo a tiempo y la espada de granito lo lanzo muy lejos si no hubiese sido por que thundermore absorbió el impacto hubiese muerto fueron a dar a la plaza de aquella ciudad y Z se había quedado atrás pues el impacto hizo que ella quedara colgada en un pino que estaba cerca del lugar de la batalla

-ARGH-exclamo el rey escupiendo sangre pues aun así había recibido mucho daño- ¡MALDITA YA VERAS-de nuevo la criatura blandió otro espada, pero esta vez se había quedado atorada en el suelo! ESTA ERA LA OPORTUNIDAD ¡el rey subió rápidamente por la espada hasta su mano el titán logro sacar la espada del suelo y la lucha por llegan hasta donde está la bruja apenas comienza.

El rey empieza subir mientras el titán trata de cogerlo pero no puede el rey mira el pecho de la criatura y ve de nuevo el mismo sello que el autómata de la otra noche y sin pensarlo 2 veces clava su espada en el centro acto seguido el titán se empieza a caer a pedazos.
La bruja transforma su cuervo en un par de alas esqueléticas mientras el rey cae del titán la bruja lo toma y lo eleva hasta el cielo y tratando de impactarlo contra el suelo empieza una pelea en pleno aire el rey se niega a morir de forma tan estúpida en eso la bruja lanza un hechizo sobre la atalaya donde ella habita y de ella salieron unas piezas de piedra y piel que la cubrieron como si de una armadura se tratase y el rey nada puede hacer así que trata de aguantar lo más posible hasta por lo menos ver un gran árbol y caer sin sufrir tanto daño en efecto su plan rinde frutos de nuevo al nivel del suelo el rey dice:

-Hacía ya tanto no me divertía así

-Pues esto te encantara-dijo la bruta lanzando un rayo de energía oscura el cual thundermore absorbió sin más ni más- ¿¡COMO ES POSIBLE!?

-PUES SOLO ESPERA-dice el rey lanzándose al ataque la pelea es muy reñida la bruja trata de clavar una daga de plata en el pecho de nuestro rey
pero él logra esquivarlo el trata de darle con su espada pero ella se convierte en insectos y reaparece atrás del rey ella trata de golpearlo con su báculo pero él logra romperlo con su espada

-MALDITO! COMO PUDISTE ¡-dijo aquella bruja la cual convirtió lo que quedaba de su báculo en una espada de piedra y madera-MUERE.

La lucha parecía no tener fin pero el rey ágilmente saca de su bolsillo trasero un poco de sal bendita él sabe que nunca debe salir sin sus suministros le rocía en la cara y la bruja solo grita:
-MIS OJOS !MIS MALDITOS OJOS¡- el rey aprovecha y la atraviesa con su espada a lo cual la bruja grita y se desvanece en cenizas negras este es el fin para aquella bruja

El rey exhausto por la lucha va donde se escuchan llantos de la bebe y escala con sus pocas fuerzas hasta donde ella estaba la recoge y con 2 costillas rotas y una voluntad inquebrantable la pone a salvo en tierra firme

– ¿Estas bien mi niña? -pregunta el rey examinando a la criaturita para saber si no tiene daños considerables-por lo menos tú lo estas creo que debería de sacar el botiquín de mi bolsa esta noche acamparemos aquí

Y así el rey procede a curarse su herida con las pócimas hechas por su amada y decide dormir con la niña entre sus brazos

Pasados unos 2 días desde la batalla con límalas el rey decide de nuevo emprender camino con su «hija» a la cual ha llegado a tenerle cariño y amor.

Una vez fuera de aquella ciudad abandonada se vislumbraba a lo lejos un bosque de gran espesura y en el horizonte se vislumbraba la torre de aquel sabio a donde el rey debía ir.

-Bueno será emprender marcha ¿no crees Z? -la beba solo sonrió ante la voz de el-bueno que esperamos, en marcha

El rey caminando hacia el bosque recordó su infancia en donde le toco vivir en la intemperie como un ladronzuelo ocasional de víveres y demás recordó también a su amada que lo defendió en una ocasión por que fue descubierto en flagrancia de su delito una sonrisa se dibujó en su rostro cosa que hacía ya una semana no se veía en su rostro

La tarde iba cayendo ya había recorrido un buen trecho del bosque decidió acampar en un claro cerca de un riachuelo en donde se dispuso a encender una fogata para así comer algo pues ya su cuerpo pedía además de medicina alimento pues ya iban 2 días sin comer.

El rey hacía ya unas horas sentía que alguien lo venía persiguiendo cuando de repente una daga salió dese la maleza el rey solo se puso alerta una voz infantil dijo

-Dame lo que llevas encima o si no la próxima ira entre tus ojos

-Inténtalo-dijo el rey tratando de disimular la risa- quiero verlo

-HYYAAAA-se escuchó y una silueta vestida de negro salió de entre la maleza lanzando una daga arrojadiza con puntería algo mal calculada el rey solo la freno con una mano justa antes de que siquiera pudiera alcanzar su objetivo-COMO ES POSIBLE CASI NUNCA FALLO EL TIRO

-Solo porque me recuerdas a mi más joven te dejare ir sin más ni más, pero dime ¿vives aquí en el bosque? -pregunto el rey a aquella silueta que aún se mantenía entre las sombras

-S-si-respondió aquella voz-eso no te incumbe

– ¿Por qué no sales de las sombras y me dejas ver tu cara ya de una vez sabes sé que estas en el árbol que está a mi derecha en la rama central a unos 4 metros del suelo

– ¿Cómo lo supiste? -dijo aquella voz con asombro y saliendo de las sombras con una espada corta entre sus manos una máscara que le tapaba la mitad del rostro un moño sostenía su cabello de color rubio cuan trigal se tratase una figura pequeña era una niña de tez algo bronceada por el sol

– ¿Cómo te llamas? Pregunto el rey algo expectante-dime tu edad también

-Mi nombre es Abigail-dijo aquella niña-solo sé que tengo 12 años

– ¿Tienes padres? -pregunto el rey esperando a ver su respuesta

-NO TENGO NI LOS VOLVERE A VER TODO POR CULPA DE AQUEL BASTARDO QUE ME LOS QUITO LLEVO MAS DE 3 AÑOS TRATANDO DE VIVIR EN ESTE BOSQUE-dijo la niña estallando en ira y llanto-ME HA TOCADO VIVIR SOLA ROBANDO Y CAZANDO HAN ABUSADO DE MI ME ROBARON MI INOCENCIA UN GRUPO DE JINETES QUE ANDABAN EN CABALLOS NEGROS-de ahí en más ella no pudo hablar pues los sollozos eran ininteligibles

-Ya cálmate pequeña-dijo el rey tratando de abrazarla

-! NO ME TOQUES. Grito ella haciendo llorar a Z- ¿viajas con un bebe?

-Si así es-dijo el rey invitándola a sentarse al lado del fuego-por qué no te sientas aquí y bebas algo de te juro no hacerte daño palabra de caballero-a lo que el rey saco de su pecho una medalla con la insignia de su reino

– ¿Eres del reino de Primigenias? -pregunto la niña que al ver la medalla saco uno igual de su bolsillo, pero este estaba adornado son un zafiro en la mitad dando a entender que el antiguo dueño era de alto rango

– ¿Cómo obtuviste esa medalla? -pregunto el rey con asombro-solo mis soldados más leales la obtienen

-Mi padre era parte de la guardia real, el rey había enviado una cruzada estos bosques para ver por qué había una concentración tan grande de energía oscura de repente en esa cruzada venias mis padres y yo solo tenía 9 cuando ese bastardo de alas plateadas apareció se los comió a todos solo dejo sus cuerpos secos como si de momias se tratase lo único que recuerdo es que mi madre me metió en la carroza y me dijo que no saliera estaba esperando a mi hermanito ellos también murieron. Solo quede yo he tejido mis ropas con lo que he robado y a duras penas se consigue alimento en este bosque.

El rey tratando de contener el llanto le dice a Abigail:

-Me presento mi nombre es Astaroth fratherheigth Castil

-SU MAJESTAD-dijo Abigail estupefacta-COMO LO SIENTO NO ERA MI INTENCI-el rey le pide silencio pues Z se ha quedado dormida

-Calla por favor deja tantos formalismos-dice el rey sonriéndole a ella

– ¿Cómo se llama la niña? -susurro Abigail

-Z es su nombre una vieja amiga me dijo que cuidara de ella-dijo el rey-desde hace ya una semana voy caminando con ella

-Un momento ¿USTED FUE EL QUE MATO A LA BRUJA VERDAD?

-Si fui yo-respondió el rey y acto seguido pregunto- ¿quieres acompañarme en mi cruzada? voy hacia la torre del sabio de las tinajas quizás puedas ayudarme veras cuando combato me queda muy difícil cuidar a Z, pero tú puedes ayudarme y te juro que tu recompensa será grande

-Lo único que quiero es una familia-dijo Abigail agachando la cabeza-solo quiero eso

-pues no seré tu padre, pero juro protegerte de todo aquello que intente hacerte daño-dijo el rey con franqueza y seriedad en su voz

A Abigail se le vio chispas en sus ojos de color azul profundo se veía contenta y dijo:

-Solo déjame traer algunas de mis cosas y juro ayudarte -dijo mientras una sonrisa se dibujaba en su cara

-Está bien no te tardes mucho no me gusta andar lento

Ahora Abigail se ha unido a nuestro héroe ¿será que acaso Abigail podrá sanar sus heridas del pasado?
el rey por lo pronto descansa esta noche algo en clama sabiendo de que su «hija» no pasara más peligros»

ya en la mañana, el rey, su «hija» y su nueva acompañante emprenden camino hacia la torre del sabio. La mañana es fresca y la brisa matutina da un aire de esperanzas y nuevas metas a conseguir.

El rey se encuentra ensimismado en sus pensamientos. Abigail lleva a Z en sus brazos mientras le hace mimos y de más. Saliendo ya de aquel bosque sin mayor apuro, el rey y sus acompañantes se cruzan con lo que parece ser una abadía abandonada de la cual un aire siniestro sale. Dando a entender que nada bueno habita en ella.

-S-su majestad esto no me da buena espina-dijo Abigail con miedo en su voz-n-no quiero entrar

-Deja ya de temer-dijo el rey con firmeza en la voz-es un edificio abandonado pero lo extraño es que una presencia oscura sale de el

-Tengo miedo su majestad-dijo Abigail haciéndose atrás del rey-creo que algo malo pasara si entramos

-Esta abadía fue corrompida por algo en este lugar reside una reliquia santa que quizás pueda sernos de mucha ayuda

-Bueno su majestad por usted lo haré

-No me digas más su majestad-dijo el rey agachándose donde estaba Abigail y poniendo una mano en su hombro-solo llámame Astaroth

-bueno-dijo Abigail algo avergonzada por la cercanía- está bien señor Astaroth

La abadía se caía a pedazos antes el rey había mandado a hacerla como un lugar de descanso, pero no se sabe a ciencia cierta que paso.

-Bueno entremos-dijo el rey con una expresión férrea

-El rey sí que no siente miedo-pensó Abigail-lo mejor será hacerle caso

un olor a hierbas y caldero estaba impregnado por todo el lugar se percataron que todo estaba destrozado como si un festín salvaje se hubiese llevado a cabo, Abigail estaba tan asustada que se aferraba con fuerzas al infante en sus brazos y con voz temblorosa solo respondía con monosílabos al rey

Subiendo por la torre que da con el observatorio de la abadía se dieron cuenta que una persona habitaba aquel lugar y había tomado posesión de la abadía una vez estuvieron arriba vieron como aquel santuario de los dioses había sido corrompido por un nigromante el cual hacía gala de sus hechizos atormentando a las almas de los muertos y animando cadáveres de criaturas salvajes.

-! COMO OSAN A ENTRAR A MI CASA ¡-gritó aquel hombre que estaba casi muerto su olor a muerte y putrefacción llenaba toda la habitación Abigail solo vomito lo poco y nada que había comido esa mañana

-! TU MÁS BIEN COMO PUDISTE CONVERTIR ESTE LUGAR DE ADORACIÓN EN TU TEMPLO PROFANO ¡-gritó el rey tomando su espada listo para atacar a aquel nigromante pero que cruel jugarreta del destino que el nigromante actuará más rápido y lanzaste un hechizo sobre el rey nuestro héroe cae víctima de una ilusión tan oscura que lo hace gritar de temor absoluto en su trance ve como su amada muere su reino cae en desgracia y al ver a Abigail ve en ella la personificación de todos los males.

-DEBO MATAR A AQUELLO QUE ES OSCURO-gritó el rey tratando de atacar a Abigail que aún tenía en sus brazos a la pequeña Z de un salto logra esquivar el golpe de la espada del rey la cual no es nada pequeña

-Deténgase por favor señor Astaroth-dijo Abigail retrocediendo hasta llegar a una pared-niño me obliga a atacarlo

El nigromante solo se reía de forma compulsiva y procedió a volar el techo del lugar dejando ver un cielo gris de nuevo el rey trató de atacar a Abigail ella logra saltar esquivando de nuevo un segundo ataque. El rey que estaba con los ojos rojos como brasas a causa de aquel hechizo no podía ver más allá de su propia ira él estaba dispuesto a matar lo que sea.

Abigail se puso atrás de si con el cargador improvisado a Z y dijo:

-No dejaré que nada te pase Z recuperaremos al señor Astaroth ya lo veras-acto seguido saco su espada la cual no era más que unos gladios con un filo muy pobre y maltratado-! EN GUARDIA ¡

El rey enceguecido por culpa de el hechizo se lanzó al ataque Abigail ágilmente saltó encima de él su objetivo nunca fue el rey su objetivo fue el nigromante al cual sus gladios se hundió completamente en su frente poniendo fin así al hechizo del cual era víctima el rey

El rey se desplomado al suelo y queda inconsciente Abigail solo se pone a llorar cuando de repente del cuerpo sin vida del nigromante sale un rayo de luz oscura el cual se mete en el brazo de la pequeña Abigail ella toma su espada desenterrando de la frente de aquel nigromante y la gladios vieja y maltratada se convierte así en la reliquia que el rey había dicho se convierte en la Dualbrand una espada que tiene el poder de la luz y de la oscuridad junta en una sola arma

– ¿Qué es esto? -se preguntó Abigail

-Eso se llama una Suma-dijo el rey levantándose del suelo- esa era la reliquia que había aquí

– ¿y qué función tiene? -preguntó Abigail

-Es un arma legendaria y te escogió a ti significa que eres digna de llevar tal poder, te felicito por tu logro-dijo el rey que en acto seguido abrazo a ambas y le susurró al oído de Abigail-lo siento si quise hacerte daño no era mi intención.

La pequeña Abigail se puso roja como tomate y con modestia se retiró. El rey y sus acompañantes salieron de la abadía maldita no sin antes prender fuego a aquel lugar el cual no sería usado para el mal otra vez nunca jamás.

Esa noche acamparon y todos compartieron tiempo como una «familia» el rey a medida que pasan los días va recuperando aquello que hace ya muchas lunas le fue arrebatado…

La calma…»

ha pasado una semana desde aquel incidente en la abadía y tanto el rey como las dos niñas van con él.
Abigail aun desconfía de nuestro rey teme que él le pueda hacer algo, casi no duerme y vive alerta a cualquier movimiento que él hace por la noche. El rey no duerme de a mucho, él es una criatura de la noche pocos lo saben, pero el rey sufre de una condición congénita la cual estalla cada luna llena, aunque el sobre esa condición tiene control gracias a un hechizo que su amada puso en su medalla la cual lleva siempre con él.

Empieza a caer la noche el rey, Abigail y Z están alistando su campamento
ya han avanzado mucho trecho están cerca de las tierras de hemos más al norte se encuentra el desierto de Gerardo y más allá el templo de la torre de las nubes allí habita el sabio de las tinajas solo los más nobles y conocedores pueden hablar con él.

-Listo-dijo el rey después de azuzar la fogata-ya hay la suficiente leña hay en mi maletín están las provisiones hay un poco de zumo de peras para Z y también hay algún que otro trozo de carne seca creo que con eso podrás pasar la noche ¿verdad?

– ¿A dónde ira usted señor Astaroth? -pregunto Abigail con mucho recelo- ¿no pensara en abandonarnos verdad?

-Esa no es la cuestión-dijo el rey con el gesto algo preocupado la luna saldrá dentro de poco y es luna llena el día de hoy-pase lo que pase, oigas lo que oigas júrame que esta noche no entraras al bosque

– ¿por qué señor Astaroth? -pregunto Abigail- ¿que pasara?

-Solo diré que es algo lo cual no querrás apreciar-dijo el rey con un gesto marcado de ansiedad.

La noche callo la luna saldrá en cualquier momento las niñas están en el campamento en el bosque se oye como si una bestia tratara de salir de algún lugar la luna sale y se oye piel desgarrarse y un aullido penétrala noche.

-Que es ese sonido-dijo Abigail ya con los pelos de punta al sentir unos ojos grandes mirando a través de los arbustos- ¿q-quien a-anda allí?

aun sentía aquellos grandes ojos mirándola fijamente no pudo evitar sentir terror y lanzo un grito tan alto que la pobre Z se despertó de golpe y empezó a llorar Abigail temiendo ya por su vida saco a Dualbrand y tomo posición de guardia lanzo un ataque a los arbustos una sombra gigantesca salió y se movió a tanta velocidad que era difícil verla
se hizo en un árbol de nuevo Abigail lanza un ataque la sombra vuelve a moverse se escuchan unos gruñidos de bestia de nuevo ella ataca a donde cree que esta aquella bestia pero esta vez es tanta la mala fortuna que a causa de los ataques de Abigail el árbol anteriormente mencionado por la magnitud del ataque empieza a caer y en su trayectoria esta la bolsa donde esta Z llorando por tanto alboroto de repente aquella sombra sale de donde estaba !que sorpresa¡ es un licántropo de unos 2 metros de alto y de un zarpazo rompe la parte de ese árbol que amenaza con caer encima de la infante

-! UN HOMBRE LOBO ¡-grito Abigail tomando un palo encendido de la fogata-LARGATE O TE MATO

-CALMATE ABIGAIL-dijo de un rugido aquella bestia-YO SOY ASTAROTH

. – ¿Cómo es posible? -se preguntó Abigail haciendo memoria de lo que le dijo el rey hasta llegar a la iluminación-! AJA ¡de razón estabas tan ansioso por irte

-Ya me retiro-gruño el rey algo exaltado por tratar de esquivar los ataques de Abigail

-No te vayas-dijo Abigail a aquella bestia-no me asustas ahora que sé que eres tu si estabas mirándonos era para protegernos no para cazarnos

-Enserio debo irme-gruño de nuevo-es porque además de esto y todo lo demás deje mis ropas en algún lugar del bosque además así aprovecho para cazar las provisiones que necesitamos para el viaje

-Está bien señor Astaroth-dijo Abigail con la mirada agachada por querer matarle-solo no se valla muy lejos ¿sí?

-Está bien-y acto seguido de un salto desapareció en la espesura del bosque que los rodea.

Así Abigail calmo y durmió al lado de Z sabiendo que estaba vigilada por un ser que a pesar de ser una bestia por fuera seguía siendo la misma persona por dentro.

en esa mañana Abigail aún estaba dormida cuando el rey llego al campamento.
La mañana estaba cálida el sol brillaba sobre las copas de los arboles
el rey procede a atender a Z le da zumo de frutas y para su suerte se encontró una vaquita salvaje así que la ordeño y pudo sacar un poco de leche para Z después de bañarla fue donde Abigail y la despertó suavemente.

-Oye Abigail, despierta- susurro el rey al oído de la niña que dormitaba plácidamente-es hora de marchar

-Q-que no quiero salir papa-dijo Abigail aun en el reino de Morfeo-no quiero perderte papa-agarro con fuerza la mano del rey y una lagrima resbalo por su mejilla apoyada en su caperuza

El rey se quitó el abrigo que siempre llevaba puesto y acobijo a Abigail acto seguido procedió a procesar las liebres que esa noche había cazado

-Ahwwww-bostezo Abigail estirándose- ¿cuando llego señor Astaroth?

-Hace ya una hora más o menos sí que tienes el sueño pesado ¿eh? -dijo el rey que en acto seguido soltó una sonrisa burlona-vamos ve al arroyo alístate estamos cerca de un poblado hay compraremos provisiones y de paso algo de ropa nueva para ti

– ¿Y cómo pretendes comprar cosas si no tenemos dinero? -pregunto Abigail algo altiva

– ¿Acaso se te olvida que soy rey? -replico Astaroth ante la respuesta de Abigail- más bien apúrate que no quiero perder más tiempo-dijo de forma tajante el rey

Unos minutos después Abigail estaba lista se había quitado el tizne de su mano y su cara se veía más limpia, aunque no le daba la mirada al rey se sentía mal por lo de anoche y como le respondió al rey esa mañana

caminaron unas horas cuando llegaron al poblado de Saint Eclair el mercado aún estaba abierto la gente miraba al trio con ojos de estupefacción pues no era común ver a un noble al lado de una «vagabunda» a Abigail le parecía incomodo esto solo seguía con la mirada en el suelo una vez llegaron donde el sastre el rey preguntó si tenían ropa para Abigail

-Si claro pasen-dijo el sastre al trio- a ver señorita pruébate esto

-No me gustan los vestidos-dijo Abigail-me siento débil con esto puesto

-El rey solo esbozo una sonrisa y acto seguido pregunto:

– ¿No tendrás algo más bien para un mercenario?

– ¿Para usted? -pregunto el sastre

-no para ella-respondió el rey-ella es mi hija y quiere ser mercenaria

Abigail solo se sonrojo y agacho aún más su mirada. Al cabo de una media hora el sastre saco de un viejo cofre un atuendo de mujer el cual constaba de cota de malla de acero hombreras y un pantalón de cuero además de una diadema ancha en mitral

-Este atuendo pertenece a mi difunta hija ella era guardia del conde de este poblado, pero unos jinetes en caballos negros la profanaron y luego la mataron

-Lo siento por usted mi señor-dijo el rey haciendo la venia en sentido pésame Abigail solo apretó los dientes de la ira al saber que esos mismos jinetes habían robado su inocencia- ¿cuánto cuesta?

-59 Piezas de oro-dijo el sastre-aunque también aceptamos orbes

-! PERFECTO ¡-exclamo el rey-donde está la convertidor-acto seguido saco de su bolsillo un extraño medallón el cual tenía una piedra roja sangren en medio de si el sastre saco una especie d roca con una piedra del mismo color la única diferencia es q abajo de la piedra había una cavidad la cual tenía el símbolo del oro grabado abajo el rey acerco su medallón a la piedra y un sonido de monedas salía de ella Abigail estaba fascinada mientras cargaba a Z

-Bueno aquí esta su pago-dijo el rey guardado de nuevo su medallón-ve y ponte el traje Abigail-acto seguido la niña se metió al vestidor y salió con su nueva ropa puesta

-Gracias señor Astaroth-dijo Abigail aún más avergonzada que antes

-Te vez bien Abigail-dijo el rey guiñando un ojo a las niñas-ahora compremos algo para Z no creo q esa ropa le dure mucho sabes a crecido desde que mi amiga me la entrego creo que tiene un más mas de vida

Compraron ropa y pañales para Z los cuales les vinieron como una bendición de los Dioses

Una vez compraron comida y uno que otro trasto de metal el rey le dijo a Abigail:

-Acompáñame donde un amigo ¿sí?

-Si claro-respondió Abigail admirando su nueva ropa- ¿dónde está?

– ¿Estás viendo aquel taller retirado del mercado? es allí-dijo el rey señalando una cabaña de apenas visible pues el tizne no la dejaba ver una vez llegaron a esa cabaña el rey tocó la puerta y una voz muy grabe hablo desde el otro lado

– ¿de quién es ese olor a lobo viejo? -dijo en grave tono aquella voz

– ¿Acaso ya no reconoces a tus clientes Hamar? -contestó el rey-vamos abre o es que tus manos ¿ya no pueden hacer nada?

La puerta se abrió y un hombre de unos 50 años salió su cabeza era calva como el pomo de su puerta y relucía al fragor de las brasas de su fragua

-HAJAAA-dijo Hamar-Como estas pequeñas imprudentes ya te extrañaba-decía mientras abrazaba al rey casi hasta el punto de oír tronar sus huesos- ¿cómo has tratado a mi obra maestra-dijo mientras tomaba a thundermore y la apreciaba con sus manos pues sus ojos hacia ya mucho dejaron de funcionar-está un poco destemplada y siento a otra de mis creaciones aquí es Dualbrand ¿verdad?

-S-si-dijo Abigail aun sorprendida porque el aun siendo ciego podía saber que arma llevaba encima- ¿cómo lo supiste?

-Es sencillo jamás olvido a una de mis Somas

-Bueno Hamar-dijo el rey-vengo a que me calibres mi guantelete

– ¿Aún no dominas ese brazo verdad? -dijo Hamar mientras les servía un poco de té a los 2-ademas de que aquí hay una reliquia divina es un espejo

-ya deja de decir sandeces-dijo el rey en tono burlón era raro verlo tan alegre el siempre que estaba en el bosque era otro muy distinto pensó Abigail

-bueno a que esperamos. -dijo Hamar sacando de su delantal de cuero un martillo de metal muy raro y un cincel igual de raro ambos emanaban luz

-Abigail solo espera aquí ¿vale?

-Vale-dijo ella con un tono de voz algo distraído empezó a dar vueltas por la sala de estar de aquella cabaña había una chimenea de donde Hamar había sacado él te el fuego era de color rojo vivo ella empezó a ver algunos cuadros y en ellos vio uno del rey su esposa y el posando y abajo se leía:
«SEMPER LUXAS PER VERITAS Y PERSEVERA PER LUMINER»
Al fondo se oían gritos de dolor del rey como si de una extracción de un diente se tratase Abigail rápidamente atendió a Z que estaba a punto de llorar por el ruido una media hora más tarde sale el rey con su guantelete chorreando sangre desde dentro del mismo

– ¿QUE PASO SEÑOR ASTAROTH? -pregunto Abigail preocupada

-Nada -dijo el rey con signos de cansancio- vamos nos ya aún tenemos camino que recorrer

-Recuerda no usar mucho tu brazo izquierdo Astaroth-dijo Hamar en tono muy serio-no queremos que aquel incidente se repita

-tienes razón Hammer-dijo el rey preocupado- no quiero lastimar algo que amo de nuevo

-buen viaje su majestad a casi se me olvida aquí tienes niña-Hamer le dio a Abigail a su espada que estaba como nueva la Dualbrand relucía y se sentía más ligera- y esto también si él llega a perder el control-Hamer le dio a espaldas del rey una botella con un extraño liquido azul brillante-lánzaselo si ves que su brazo lo domina

Una vez salieron de aquella cabaña emprendieron camino el trío de nuevo a su destino.

ya en el camino principal la tarde iba cayendo el sol se ponía y unas nubes grises amenazaban el paisaje el rey se pone alerta el solo dice:

-Esta es la calma antes de la tormenta-mientras mira el horizonte la torre que se ve a lo lejos es tapada por las nubes de negro color-solo ocúltate ¿vale?

– ¿Por qué lo dice señor Astaroth? -sin siquiera acabar esa oración un viento ruin sopla donde esta nuestro trio una risa malévola rompe el silencio el rey se mantiene firme y pone tras de sí a las niñas la voz dice:

– ¿AHORA ERES UNA NIÑERA? ME DAS ASCO-el viento cesa y deja ver a un hombre de alas grises y metalizadas como si de mercurio se tratase con una armadura de color negro como la noche sus ojos son azules con una parte roja su mirada da a entender que simplemente está loco por poder en su mano derecha una espada la cual emana fuego de color púrpura un repugnante olor a cementerio emana de él-AHORA DEJAME VER SE QUE LLEVAS A LA HIJA DE LA MUERTE UNA DE ESAS DOS NIÑAS ES ASI ME TOQUE MATARLAS A AMBAS LO HARE

-NO TE DEJARE HACERLO SOLO LO HARÁS SOBRE MI FRÍO Y TIESO CADÁVER -dijo el rey con una expresión de odio en sus ojos desenfundo a su espada y la empuñó con ambas manos se lanzó al ataque se movió a la velocidad del trueno pero aun así aquel hombre que Abigail recuerda por que fue el quien mato a sus padres solo paro el ataque del rey con su espada acto seguido le dio un golpe en el vientre el cual subió a nuestro héroe unos 4 metros de altura el rey en pleno aire se repuso y se precipito al ataque en el suelo solo quedo el cráter de su fallido intento por darle

-MALDICIÓN ABIGAIL LARGATE DE AQUI LLEVATE A Z ES UNA MALDITA ORDEN-dijo el rey, Abigail aun en shock ignora esta orden aquel hombre la toma por la cabeza con una sola mano y la levanta y dice:

-CON QUE ABIGAIL ¿EH? -dijo mientras apretaba la cabeza de Abigail casi hasta el punto de hacerla fracturar-LAS MATARE A AMBAS UNA DE ELLAS ES LA HIJA DE LA MUERTE Y ELLA SERÁ UN DOLOR DE CABEZA PARA MI A FUTURO, ASÍ COMO EL QUE ESTAS SINTIENDO AHORA MALDITA BASTARDA-dijo el mientras la apretaba aún mas

-YA SUELTALA ESTIGMAEL NO DEJARE QUE MATES A MIS HIJAS-dijo el rey que en acto seguido se quitó el guantelete y un brazo de un color rojizo pálido el cual emanaba llamas negras se dejó ver ese brazo era una maldición que el lleva desde hace ya un tiempo los ojos del rey se pusieron rojos como brazas un aliento de fuego negro salió de su boca y su voz cambió a un tono más gutural ese brazo encierra al antiguo mal conocido como imperius su espada se envolvió en llamas y procedió a tomarla con su brazo maldito Estigmael solo se quedó quieto como si de un juego se tratase y soltó a las niñas en dirección del rey el rey las tomó y las dejo en el suelo ese fue el último vestigio de conciencia en el tanto Z como Abigail yacen inconscientes en el piso el rey ya no es más él es un antiguo mal el cual se ha desencadenado en este mundo es una bestia sedienta de sangre y carne la batalla empieza el suelo solo retumba al ver tanto poder emanado por parte de estos dos rivales que desde tiempo atrás ya se han enfrentado-AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHH

Solo grita el rey que solo es una cascara vacía sin alma ni corazón Estigmael al ver no puede para la mayor parte de sus ataques de desvanecer en el aire solo dejando tras de sí una de su pluma de mercurio la cual se derrite en la cara del rey el rey aún sigue de forma inconsciente destruyendo todo a su paso gracias al cielo el poblado está lejos.

Abigail se despierta y ve al rey en ese estado tan lleno de odio e ira solo siente terror absoluto al ver que él se queda mirándola él se acerca Z está en el suelo llorando ye rey o a Abigail por el cuello quiere arrancarle la cabeza Abigail recuerda que Hammer le dio una botella con el poco aire que le queda logra sacarla y echarla en el brazo a astaroth inmediatamente el fuego se extingue y el rey cae inconsciente al suelo Abigail trata de recuperar el aliento lo logra toma a dualbrand y se pone encima del rey aun en el suelo con medio rostro lastimado pone el filo de su espada en el cuello del rey esta cegada por la ira pero un par de voces le dicen al unisono

-NO LO HAGAS-las voces salían de la espada-SOMOS LAS AMAS DE LA LUZ Y LAS SOMBRAS Y NO DEJAREMOS QUE LO MATES EL HIZO ESTO POR PROTEGERLAS POR QUE BIEN SABiA EL QUE NO HABIA OYTRA ALTERNATIVA

-PERO QUISO MATARME-dijo Abigail con sollozos-NO QUIERO QUE SE REPITA LA HISTORIA

-El tiene una misión que cumplir así como tu a su lado solo dejalo ser y ya ponle el guantelete antes que el fuego se avive de nuevo

Abigail procede a hacer lo que la espada le dijo el rey pronto se queda dormido y relajado Abigail lo mete en el bosque que esta al lado del sendero y prende una fogata las nubes grises se fueron y esa noche el rey no despierta.

a la mañana siguiente Abigail esta dormida en el pecho del rey el rey despierta como si de una laguna mental se tratase Z esta dormida al lado de Abigail el rey se levanta de golpe y lo primero que hace es abrazar a Abigail

-¿Que sucede señor Astaroth?-dijo Abigail asustada por tanta cercania

-Estas bien gracias a los cielos y Z ¿esta bien?

-Si esta bien-dijo Abigail-con respecto a lo que paso ayer…

luego te explico esto Abigail solo me importa que ustedes esten bien…

Y asi el rey procedió a curarse las heridas y a continuar su viaje aquel enemigo pronto regresara el lo puede sentir en sus huesos pero el sabe que debe hallar el método para curar su mal…»

El rey y las niñas emprenden camino de nuevo. El viaje esta marcado por un silencio sepulcral ni el rey ni Abigail cruzan palabra aunque ambos quieren hacerlo pero temen a lo que el otro dirá.

Una vez caída la tarde el rey procede a detenerse a un lado del sendero para así poder comer algo el rey se encuentra débil pues usar el brazo maldito agota toda su energía.Una vez se encendió la fogata sacan una de las ollas que compraron el el poblado y el rey hace un estofado de liebre a Z solo le dan de beber el caldo, Abigail come tranquilamente.El rey por su parte aunque come lo hace sin ganas

-¿Sucede algo señor Astaroth?-pregunta Abigail casi atorada con una hogaza de pan en su boca

-Si,sucede algo-dijo el rey-es con respecto a lo de ayer,no quería que vieras esa «faceta» mía.Por eso fui donde Hammer pues el guantelete es lo único que logra contener este poder y por eso me toco liberarlo no quería que les pasara nada a las dos

-No se por que no me lo dijiste antes-dijo Abigail con recelo-intentaste matarme ayer y ademas ¿quien es la hija de la muerte?

-Es Z-dijo el rey algo serio-la Muerte y yo hace ya muhco tiempo somos amigos me pidio el favor de que cuidara de su hija pues no sabia que le podría pasar si seguía a su lado por eso me la entrego a mi a cambio de ella hacerme un favor

-Osea que esa era tu «amiga»-dijo Abigail ya algo asustada-tienes que ser mas honesto conmigo señor Astaroth

-Pero me preocupan las dos las he empezado a amar como si fueran mis hijas me preocupas Abigail te quiero como amiga pero creo que te amo como a una hija

-Pero me asusta señor Astaroth-dijo Abigail con una mueca de desagrado en la cara-no quiero que me pase nada

-!PUES ENTONCES VETE¡-dijo el rey enojado-ESTE VIAJE ESTA LLENO DE PELIGROS SI QUIERES IRTE HAZLO AHORA NO SOPORTARE MAS ESA MIRADA DE ASCO HACIA MI PERSONA NO SABES POR LO QUE TUVE QUE PASAR

-Y TU QUE SABES DE SUFRIR-contesto Abigail tambien enojada-DESDE QUE TENGO MEMORIA ESTOY SOLA

-Y TU POR LO MENOS TUVISTE A TUS PADRES YO NACÍ SOLO LLEGUE DONDE ESTOY SOLO GRACIAS A LOS CIELOS HICE AMIGOS QUE ME AYUDARON PERO DESDE QUE NACÍ HE ESTADO SOLO-dijo el rey que de su mejilla resbala una lagrima-POR LO MENOS TIENES A ALGUIEN YO NO TUVE A NADIE HASTA HACE UNOS POCOS AÑOS

Abigail solo agacho la mirada y salio corriendo hacia el bosque.El rey por su parte qe quedo un momento en silencio mientras los amargos recuerdo de su pasado lo atormentan

-No sabe como me siento-decía Abigail en su mente-el rey no es mas que un tarado el no sabe que es sentir dolor de verdad

-Oh si que lo sabe-dijo una voz atrás de Abigail-el perdió a su madre el dia en el que nació.Su padre trato de matarle y ademas ha perdido a muchos de sus amigos a manos de sus enemigos.Tubo que matar a su propio padre para salvar su vida y la vida de su reino

-¿QUIEN ANDA ALLI?-grito Abigail dando la vuelta y quedo estupefacta al ver que quien le hablaba era la mismísima muerte-!ALEJATE DE MI¡

-No me iré hasta que me escuches-dijo la muerte que se acero a Abigail-veras niña el rey ha tenido que sufrir mucho para llegar donde esta hoy en dia es mas el brazo que tiene es una maldición que su propio padre puso sobre el el solo vive para proteger lo que ama y tu lo hiciste sentir mal consigo mismo a el todos antes de ser rey lo miraban con desagrado y desprecio solo pido que antes de decir algo midas tus palabras

-¿POR QUE DEBERIA HACERLO?-replico Abigail-NADIE SE PREOCUOPA POR MI

-Oh el si que lo hace mientras duermes te vigila y hasta llego a desatar el poder prohibido solo por salvarte la vida…

-¿E-enserio?-dijo Abigail apunto de dejar salir unas lagrimas-¿enserio nos quiere tanto?

-Deberías creerlo-dijo la muerte señalando al rey el cual se encontraba viendo la fogata en silencio-el y tu no son tan diferentes en realidad, ambos buscan algo llamado calor de hogar,dejame decirte niña con justa razón y espero que atiendas lo que te dire:En la vida todos desperdician su tiempo no aprecian a las personas cuando están allí.El rey te ama de una u otra forma solo aprecialo y trata de entenderlo el lo ha hecho contigo

-Tratare-dijo Abigail secándose las lagrimas de sus grandes ojos azules-se lo prometo

-se que has sufrido casi te llevo en 2 ocasiones pero recuerda no dejes a nadie atrás.Un ultimo favor te pediré-dijo la muerte sacando de su toga harapienta un extraño collar de cordón negro con un pequeño fenix de estaño algo oxidado y maltratado por el tiempo-entregarle al rey y dile que ella le manda saludos que espera verle pronto

-Eta bien-dijo abigail algo más calmada y le dio una sonrisa a la muerte-se lo daré

-Por favor cuida de mi hija Abigail-dijo la muerte que en acto seguido se desvaneció como niebla negra en la espesura del bosque…

Abigail volvió al campamento corriendo y le dio al rey un gran abrazo por la espalda.Un sollozo salio de ella y apretó fuerte al rey casi hasta el punto de asfixiarlo,acto seguido dijo:

-Me comporte como una estúpida señor Astaroth ¿puede usted perdonarme?

-Claro-dijo el rey sintiéndose mejor y respondiendo al abrazo de abigail apretando fuerte-¿y este cambio tan rápido de estado de ánimo?

-Hable con tu «amiga»-dijo Abigail mirando al rey a los ojos-y te mando esto-Abigail le dio al rey aquel collar y le dijo las palabras que la muerte le había dicho

Al rey solo se le vio un gesto de nostalgia y una lagrima resbalo por su cara. Guardo aquel collar en su bolsillo del abrigo y el trío procedió a dormir juntos dándose calor como si de una familia se tratase.

Esa mañana Abigail se encontraba atendiendo a Z y el rey estaba en un río cercano dándose un baño pues hacia días que no tocaba el agua,las niñas estaban bien así que el rey decidió darse un tiempo de relajación su cuerpo estaba lleno de cicatrices de batallas pasadas.El estaba en las aguas pensando en el mensaje que le dio la muerte y el collar que le había obsequiado a su amada hace ya mucho tiempo el también añora regresar pero el sabe que aun no es el tiempo.

Una vez terminado su baño,el rey se estaba vistiendo cuando un sonido de jinetes se oyó a lo lejos un grito de Abigail se escucho en la lejanía el rey aun sin ponerse su abrigo salio corriendo en dirección hacia el campamento encontró a los 4 jinetes de caballos negros como la noche misma tenían a Z colgada de su piernita izquierda,Z se encontraba llorando a gritos a lo cual uno de ellos dijo:

-¿Con que esta es la hija de la muerte eh?

-!SUELTALA BASTARDO¡-gritó Abigail forcejeando la cual se encontraba aprisionada por uno de los jinetes-!EL LOS MATARA A TODOS¡

-QUIEN ¿EL REY DE LOS LOBOS? CÁLLATE DE UNA VEZ MALNACIDA DEBÍ HABERTE MATADO CUANDO PUDE-dijo aquel jinete que en acto seguido le propino un golpe a Abigail-ASÍ SE DEBEN DE TRATAR A LAS PERRAS COMO TU

-!SUELTENLAS EN ESTE INSTANTE¡-grito el rey que desenfundo a su espada pero aquellos jinetes estaban listos para su arribo y lo encadenaron con cadenas de plata las cuales inutilizaron al rey dejandolo debil en el suelo

!NOOO,SEÑOR ASTAROTH¡-grito Abigail-NO LE HAGAN NADA A EL

-Por su cabeza pagan muy bien muchachos-dijo el líder de los jinetes-con su valor nosotros los 4 renegados podremos ser muy ricos

En ese momento Abigail estaba en shock.Uno de los jinetes procedió a querer apuñalar a Z Abigail en ese momento sintió que algo desde su pecho quería salir su aliento se calentó al punto de exhalar vapor por su boca.Sus ojos de un azul profundo se tornaron rojo sangre y unas extrañas marcas en su piel comenzaron a brotar su aura se hacia visible era de un color rojo sangre también su mirada era como de un animal salvaje.Extasiada en locura se libero de aquel jinete sin mucho problema.

-LOS BASTARDOS COMO USTEDES ME REPUGNAN-dijo Abigail en un tono de voz casi como el de una bestia.Una antigua raza de guerreros habitaron estas tierras antes que nadie eran lo nacidos del espíritu del berserker un alma pura de pelea la cual se especializaba en dejar salir su ira interior a la hora de combatir.Lo padres de Abigail eran de aquella raza y no lo sabían ahora esta niña es una maquina de matar completa-ES HORA DE QUE MUERAN POR TODO EL MAL QUE HAN HECHO.

Abigail no sentía dolor alguno solo gritaba mientras de manotazos y patadas derribaba a los jinetes de sus monturas los caballos al ver aquel espectaculo de pelea saliern despavoridos.Abigail solo seguía tratando de golpearlos a todos,Z callo al suelo y siguió llorando mientras Abigail seguía golpeando a aquellos hombres tan despreciables.

Abigail en su sed de sangre golpeo tanto a uno de ellos en la cabeza que solo quedaron astillas de huesos en el suelo flotando en un charco de sangre donde antes estaba la cabeza de el.A otro le arrancó la garganta de un solo mordisco el estaba ahogándose en su propia sangre y por último al tercer jinete le propino un golpe tan fuerte en el pecho que le quebró el esternón haciendo que una de las astillas se le incrustara en el corazón.

El rey logró liberarse de las cadenas de plata e intento calmar a Abigail pero sus esfuerzos fueron en vano pues ella de un golpe lo mando a volar contra un árbol.El líder de los jinetes malherido tomo las cosas de sus compañeros mientras Abigail y el rey se enfrascaban en un combate y salio huyendo del lugar dejando así a el rey con su nuevo «contrincante».

Abigail seguía atacando al rey ella estaba segada por la sed de sangre que el espíritu del berserker trae consigo,el rey logró noquear a Abigail la cual su aura se calmo y acto seguido sus marcas en la piel desaparecieron.

El rey muy preocupado tomo a Abigail y a Z y las llevo al campamento.Un rato mas tarde Abigail despertó y pregunto:

-¿Q-que paso? lo ultimo que recuerdo es ver a los jinetes queriendo matar a Z

El rey con gesto preocupado le contó a Abigail lo que había pasado

-Debes de aprender a dominar ese estado casi me lastimas gravemente-dijo el rey que ya había recuperado su abrigo-pero por ahora marchemos no sea que intenten hacernos algo de nuevo.

El trío se encuentra en la salida de las tierras de Hexos, camino al desierto de Germarudo.Apresuraban marcha pues sabían bien que aquel lugar tan hostil debe ser cruzado de forma rápida pues las almas que en él se pierden jamás vuelven.
Camino a la entrada al desierto ven un pozo de agua, así que bien saben que la necesitaran.

-Abigail ven por favor-dijo el rey sacando de su maletín una botella de color azul profundo con el símbolo de una gota de agua la botella no era más grande que la palma de la mano de Abigail. Llena esta botella con eso tendremos.

-Perdóneme señor-dijo Abigail algo confundida por el tamaño de la botella-¿no cree que eso es muy poca agua para un adulto una niña y una infante?

-No, es suficiente pues esta botella duplica el agua que adentro hay puedes beber tanta como quieras y jamás se acabara-dijo el rey con brillo en sus ojos-fue un regalo de una de mis amigas de la tribu de los atlantes en la costa de rigmindail

-Ah claro he oído hablar de ellas, pero jamás pensé en ver una-dijo Abigail con asombro

-pues que esperamos si llegamos antes del amanecer te presentare a una vieja amiga mía

-Y ¿eso a que se debe? -pregunto Abigail llenando la botella en aquel pozo- ¿quién es?

-Ya lo veras-dijo el rey-por ahora emprendamos marcha.

El rey y sus dos acompañantes, ya al atardecer dieron marcha al desierto el lugar no estaba tan caliente el lugar el cual, estaba muy caliente aun en plena tarde En la lejanía se veían ruinas de lo que parecían ser templos. A lo lejos se divisan unas carpas con algunos caballos. El lugar es yerto y seco nada florece allí, pero aun así el lugar tiene un aire de que hacía mucho tiempo fue un lugar de mucha vida.

– ¿Que paso aquí señor Astaroth? -pregunto Abigail con mucha curiosidad

-Este lugar hace ya muchas lunas fue un reino próspero y fértil, pero como nada dura para siempre fue consumido por un antiguo mal el cual asecha mi reino también.

– ¿Ósea que es por esto que debes ir a la torre del templo de las nubes?

-Si-contesto el rey algo pensativo-tuve que dejar a mi amada en el castillo mientras hago este viaje ella está en cinta

-Valla-dijo Abigail sorprendida- ¡serás padre pronto, alégrate¡

-si seré padre por eso debo de proteger lo que amo y a las que amo-dijo el rey mirando a Abigail y a Z.

Abigail solo de sonrojo y acto seguido siguieron su camino. Una vez adentrada más la noche Abigail ya cansada de llevar a Z en sus brazos pregunto:

-¿Será que podemos descansar?

-No-contesto el rey-debemos seguir avanzando pronto descansaras créeme, si estás muy cansada ven te cargo solo ponte a Z a tus espaldas

-No, así estoy bien-dijo Abigail que seguía caminando al lado del rey.

Llegada la madrugada el trio llego a una choza en medio del desierto la choza era de color negro azabache y un aroma a flores frescas salía de Él, el trio procedió a entrar y dijo en alegre voz

-Si no hay nadie mejor me marcho

Aquella choza tenía varios instrumentos mágicos se veía una cama pequeña, ropa de mujer tirada por el lugar y muchos frascos de perfume en el suelo. De repente una voz se oyó atrás del trio que se acercaba cuando Abigail dio la vuelta, aquella dama se cayó al suelo y se dio un golpe en la cabeza

-Si serás imprudente Astaroth-dijo aquella dama de unos 25 años de edad su cabello blanco como la luna creciente y su tono de piel canela, de grandes medidas y de una cintura escultural llevaba puestas unas ropas de cuero y una turbante de lino que no dejaba esconder bien unos pequeños cuernos en su cabeza como si de un pequeño cabrito se tratase.
Ella conocía al rey hacía ya mucho tiempo, fue su aprendiz en el arte de la ladronería y juro jamás usar sus poderes demoniacos para el mal por eso escogió vivir en el desierto era el lugar que más se parecía a su antiguo hogar.

-Como osas a entrar a la guarida de la gran ladrona conocida como Luisgard-dijo ella levantándose rápidamente-nadie entra aquí sin mi permiso

El rey solo se quedó mirándola fijamente como en son de regaño, ella solo bajo su cabeza y dijo

-Bueno maestro, pero no se enoje conmigo, es que se me han subido los humos un poquito

-Un poquito-replico el rey en tono sarcástico-pareces humareda de un bosque en llamas-que en acto seguido se dirigió a abrazarla-¿cómo está mi pequeña roba naranjas?

-¡No soy tu pequeña roba naranjas¡-replico ella golpeado al rey suavemente en el brazo-soy una ladrona

-Disculpen-dijo Abigail a punto de desplomarse en el suelo- ¿será que Z y yo nos podemos acostar en su cama señorita? -y sin preguntar Abigail y Z se quedaron dormidas en el lecho de la dama…

En esa noche el rey estaba hablando con su antigua aprendiz de todos los sucesos y el motivo de su viaje. Ella, que le había dado un poco de té al rey se encontraba azuzando el fuego para mantener la choza cálida, estaba expectante a cada cosa que el rey le decía.

-Con que eso es lo que ha pasado-dijo Luisgard bebiendo un poco de té-así que Z es la hija de la muerte, rumores si había oído se sabe que vas hacia la torre del sabio de las tinajas, pero ¿no crees que es un viaje muy peligroso para estas dos niñas?

-Lo sé-dijo el rey que se encontraba bebiendo él té de jengibre y hojas de té negro-pero aun asi no quiero dejar a Z al cuidado de nadie pues sé que pronto la vendrán a buscar y tratarán de matarla. Además, Abigail esta al cuidado de ella y yo de ambas.

-Pero es mucha carga para ti-dijo Luisgard que le hecho aún más leña al fuego, ya era de madrugada el sol estaba a unas pocas horas de despuntar en el desierto. El rey no podía conciliar el sueño pues le preocupaban las niñas que se encontraban durmiendo plácidamente en la cama de Luisgard- ¿quieres que te acompañe? Por lo menos hasta llegar al final del desierto me conozco este lugar como la palma de mi mano además de eso veo que no trajeron provisiones suficientes y necesitan de mi para surcar este lugar sin mayores peligros.

-No quiero incomodarte Luisgard-dijo el rey en un tono de voz muy seria-no quiero ser carga para ti
.
– ¿Cuándo será que dejaras aquel orgullo de viejo guerrero? -dijo Luisgard poniendo su mano en el hombro del rey-déjate ayudar por lo menos esta vez además sabes que te debo una y bien grande-ella aun recuerda como siendo una niña que se escapó del infierno al ser mitad humana mitad demonio, la querían matar y el rey la defendió y le enseño uno de sus artes con la condición de que lo usaría para el bien y no para el mal aun lo veía con esos ojos de admiración aunque ya han pasado unos 18 años desde aquel día ella lo quiere igual que aun padre aunque el, la ve más bien como una de sus soldados y fieles compañeros el rey tiene un sentido muy grande de la camaradería con sus hombres tanto así que no le gusta que lo llamen “su majestad” si no que lo llamen por su nombre.

-Está bien-dijo el rey en tono de voz algo más clamada-aceptare tu ayuda, pero si te resbala la mano juro que te daré un golpe tan fuerte en la cabeza que desearas jamás haber tenido cuernos.

– ¡ESTA BIEN ¡-dijo Luisgard muy entusiasmada-MARCHAREMOS AL ANOCHECER PUES ES MAS FACIL VIAJAR ASI.

Todo dieron marcha cuando se puso el sol ese día, Luisgard estaba entusiasmada pues hacía ya mucho tiempo no viaja junto a su maestro. Dieron marcha hasta llegar a un templo el cual era muy antiguo la entrada tenía un par de estatuas de dos caballeros en guardia el lugar estaba algo erosionado por el tiempo, pero aun así era la manera más rápida para salir del desierto.

-Bueno-dijo Luisgard secándose el sudor de la frente-llegamos al templo de los guerreros divinos, lugar de donde salieron la gran mayoría de los guerreros alados en este lugar los Dioses creaban a sus guerreros para así saber quién era el más fuerte. Muchos de ellos perecieron algunos prefirieron dejar todo atrás y huir, pero otros…

– ¿Pero otros que señorita Luisgard? -pregunto Abigail muy curiosa- ¿Qué paso?

-Otros simplemente decidieron destruir todo aquello que tenga vida-respondió el rey de forma tajante y algo enojado-Estigmael era uno de esos guerreros al igual que muchos de mis antiguos conocidos, el los mato a todos ¡A CADA UNO DE ELLOS, MALDITA SEA JURO QUE LO HARE PAGAR!

-Cálmese señor Astaroth-dijo Abigail tratando de que el rey tomara de nuevo la compostura-el hecho de aferrarse al pasado no deja nada es mejor dejarlo ir, yo también tengo cuentas que ajustar con él, pero aun así debo calmarme eso lo aprendí de usted-dijo Abigail sonriéndole al rey.

-Bueno será mejor buscar la salida-dijo Luisgard, pero acto seguido el suelo de aquel templo se desplomo separando al rey y a las demás chicas, Luisgard cayo con Z, Abigail cayo sola y el rey quedo prendido de unos pocos ladrillos en el borde de aquel agujero en donde antes estaba el suelo de la entrada.

– ¿ESTAN BIEN TODAS? –grito el rey para saber si había respuesta de las demás
-SI, ESTAMOS BIEN-dijeron Abigail y Luisgard al unísono

-ABIGAIL-grito Luisgard-BUSCA LA SALIDA A LA ARENA SUBTERRANEA ESTA SIGUIENDO EL CAMINO MARCADO CON UNA SERPIENTE ALLI NOS VEREMOS TODOS ¿LES PARECE BIEN?

-ESTA BIEN-dijeron todos-EMPRENDAMOS MARCHA.

Lo que Luisgard no sabía era que aquel templo estaba siendo habitado por espíritus resentidos por ser creados, y ellos estaban iracundos por ser perturbados en su lugar de nacimiento y muerte.

Camino hacia la arena subterránea Abigail se encontró con lo que parecía ser un hombre caído, pero cuando acudió a auxiliarlo aquel hombre se convirtió en una versión del rey el cual trataba de atacar a la pequeña Abigail.

-ALEJATE DE MI MALTIDA SOMBRA EL REY JAMAS QUERRIA MATARME-dijo Abigail en firme voz que en acto seguido procedió a desenfundar al dualbrand y lanzarse al ataque, pero es tan mala la suerte de Abigail que aquella sombra tenía la misma fuerza que el rey, así que ambos se enfrascaron en una pelea cuchillazos vuelan en el aire, mientras Abigail trata de vencer a aquella sombra la sombra le lanza dagas, ella las esquiva rápidamente ella trata de golpear a la sombra con las ondas que salen de dualbrand más aun así es inútil.

-Valla, sí que eres un hueso duro de roer-dijo Abigail con algunos cortes menores en su cuerpo y escupiendo un poco de saliva con sangre-igual que el señor Astaroth, pero ¿sabes algo? ¡NO ME RENDIRE TAN FACIL ¡

Ambo seguían enfrascados en su batalla, mientras Luisgard seguía cargando a la pequeña Z y caminando

-Ojalá nada malo nos pase-decía Luisgard algo asustada. De repente, una sombra salió por debajo de ella tomando la forma de su padre el Demonio llamado Leigradir. Ella nada más soltó un grito y saco su daga trato de apuñalar a aquella sombra mas no pudo, Z empezó a reír El espejo ella llevaba en el cuello brillo con tanta luz e intensidad que logro desvanecer a aquella sombra sin más ni mas

-Se nota que eres la hija de la muerte-dijo Luisgard distraída que en acto seguido no vio una piedra que sobresalía y se golpeó la cabeza.

Por su parte el rey se encontraba ya en la arena esperando a sus otras compañeras, pero cuando decidió salir por otra de las puertas que conectaban a la arena con el resto del templo, un hombre salió por debajo de la arena y le dijo al rey:

-Tu que eres el rey de los lobos, será aquí tu última morada-dijo aquel hombre que vestía traje de gala en blanco y negro en su espalda llevaba un reloj de péndulo de color blanco y negro aquel hombre tenía la piel blanca como la nieve sus orejas era muy extrañas casi como si de cuernos se tratasen.

– ¿POR QUE SERA QUE LAS CUCARACHAS SIEMPRE SALEN CUANDO MENOS LAS QUIERES VER? O ¿QUE DICES TU? ZAINT

-Vengo en nombre del Dios Estigmael a reclamar tu cabeza tu tiempo se acabó-dijo Zaint que se lanzó al ataque convirtiendo su reloj en una gran espada con la forma de las agujas del reloj

El rey salto y logro esquivar aquel ataque el rey desenfundo su espada y se lanzó al ataque el rey logra asestarle un golpe, pero Zaint se cubre con su espada, Zaint logra reponerse u de nuevo se abalanza contra el rey esta vez lanzando una estocada, la estocada se clava en el hombro del rey

-JAJAJAJAJA ¡ERES DEBIL ¡-dijo Zaint en tono de voz algo psicópata- ¡MUERE ¡

Saco aquella espada del hombro del rey y quiso apuñalarlo en el pecho, pero, una daga surca en la arena y logra evitar que el rey sea apuñalado

-COMO SE ATREVEN A INTERRUMPIRME ¡MI TIEMPO ES VALIOSO ¡-dijo Zaint mirando hacia donde venía la daga

-LO MATARAS SOBRE MI CADAVER-dijo Luisgard que se quitó su turbante dejando ver así su rostro sus ojos color ámbar se tornaron rojos un par de alas salieron de su espalda como si de alas de dragón se tratasen una cola puntiaguda y sus cuernos crecieron, ella tiene control sobre su estado demoniaco y lo desato solo para proteger a aquel que la salvo cuando era solo una niña. Puso a Z en un lugar seguro y procedió a atacar a Zaint, el rey se reincorporo y quiso apuñalarlo, pero están cruel el destino que la hoja de Zaint estaba bañada en veneno, aquel veneno empezó a hacer efecto muy rápido así que el rey cayo inconsciente al piso…

“la lucha continuaba en aquella arena donde Zaint y Luisgard se enfrentan fieramente. Luisgard ataca con todo lo que tiene mientras el rey aún sigue inconsciente en el suelo por el veneno que la hoja de Zaint tenía, Luisgard logra clavarle su daga a Zaint, pero él logra quitársela del pecho. La especie a la que pertenece Zaint no es de esta dimensión dicen que donde él y su hermana vinieron se dio inicio al tiempo y el espacio mismo hay quienes los veneran como Dioses.

Su especie no sangra y la única forma de lastimarlos esta en destruir sus objetos pues su energía vital habita dentro de sus armas.

-Valla el rey no perdió tiempo entrenándote-dijo Zaint algo cansado, pero con una sonrisa maniaca en su cara-hoy ustedes morirán, mira al rey, YA NISIQUIERA PUEDE LEVANTARSE, AQUEL VENENO DE POLVO DE PLATA SI QUE FUNCIONA. DENTRO DE UNOS MINUTOS EL MORIRA Y TU NADA PODRAS HACER

-Eso crees alimaña-dijo Luisgard que en ocasiones anteriores ya había luchado con Zaint -mira tú tan preciada “arma”
-NO MALDITA SEA NO PUEDE SER-dijo Zaint que contemplaba como su espada era carcomida por un fuego negro que lentamente se devoraba la hoja-LUEGO ME LAS PAGARAS-dijo mientras se desvanecía ante los ojos atónitos de Luisgard acompañado por el sonido de una gran campanada de reloj.

-Maestro ¿está bien? – pregunto Luisgard mirando el corte en el hombro del rey-está muy grabe la plata ha penetrado muy profundo en su sistema.

-Luisgard-susurro el rey-de mi bolso saca la botella más pequeña del pocionero hay una lagrima de fénix eso me ayudaría en demasía

-Maestro no se atreva a morir no sé qué haría sin usted-dijo Luisgard ya queriendo llorar, pero fue tanta su torpeza que al sacar la botella casi la deja caer al suelo la botella que era transparente en su interior guardaban las muy escasas lagrimas del fénix las cuales son capaces de curar cualquier estado alterado sea envenenamiento, así como embrujos y demás.

Una vez que Luisgard le dio al rey la última gota que tenía el frasco, el rey se quedó dormido su piel ya no estaba ennegrecida por aquel polvo de plata sus labios ya no estaban morados y su respiración se normalizo.

Abigail llego hasta la arena herida mas no de gravedad, al ver al rey en el piso corrió hacia su lado y pregunto:

– ¿Que fue lo que paso Luisgard?

-Envenenaron al rey-respondió Luisgard- peor no te preocupes, logre evitar que muriera.

Abigail solo mira al rey y unas cuantas lagrimas escurren de sus mejillas, mira a Luisgard y de ella sale un sollozo profundo, total aun es una niña así que al ver al rey en ese estado es normal que se preocupe;

– ¿se pondrá bien el señor Astaroth? -pregunto Abigail después de haberse calmado un poco