¿ Y TÚ QUE ME CUENTAS?

¿ Y TÚ QUE ME CUENTAS?

Luz Aidé Legarda

29/08/2017

Fue realidad o un sueño

Ya han pasado varios días y lo recuerdo como si fuera hoy, se aproximaba la noche y mi corazón latía más de lo normal; había un presentimiento, me sentía impotente, nerviosa y un poco loca.

Pasaban las horas y todo seguía igual, decidí arreglar mi cama, leer un poco, pero fue difícil, mi cerebro huía desesperadamente y se concentraba en el caos, un caos que no existía, un miedo innecesario; decido guardar mi libro bajo la almohada; envolverme horriblemente en las cobijas y cerrar los ojos en busca de tranquilidad.

Pasadas unas horas empiezo a sentir presencias en mi cuarto, cautelosamente me destapo y veo que tengo la compañía de algunas personas, confieso que no las conozco sin embargo me generaban tranquilidad, una falsa seguridad ya que pasados unos momentos sus ojos me miraban fijamente, me intimidaban. Baje la mirada y quería llorar; la primera lagrima salía de mis pupilas, no sabía qué hacer de pronto escucho unos pasos exageradamente fuertes y unos murmullos que me dejaron inmóvil, pedía ayuda pero era en vano por más que movía mi cuerpo realmente no lo hacía, por más que hablaba nadie me escuchaba y fue ahí donde esa presencia siniestra se ubico frente a mí, no me hizo daño físico pero si un enorme psicológico, era alto de túnica negra con blanco y toque gris, delgado y cara pálida me extendió la mano; honestamente no hice nada ni siquiera correr no podía hacerlo; mi yo estaba débil.

Pude contemplar cómo se apodero de la gente que me acompañaba, las envolvió como si fuese un tornado y con esa misma agilidad y rapidez desapareció, fue en ese instante donde volví a recobrar fuerzas, me cuestionaba ¿ A dónde se las llevo? ¿Por qué?, de repente escucho a mis espaldas otra voz que me dice no lo querrás saber, me quería morir, y eso era lo que esas presencias también querían, ya estaba en mis últimos alientos y afortunadamente una sacudida me despertó. Si, realmente estaba oscuro, estaba en la misma habitación donde todo sucedió, no había alguien más excepto yo y es ahí donde me que queda la duda si fue realidad o un sueño.

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