El cielo que pintamos de gris

El cielo que pintamos de gris

A Alaanna Frey

15/09/2017

La esperanza se agota, el tiempo es tan cruel que no se detiene a escuchar la débil voz que emerge desde lo más profundo de mis lamentos, ¿será que ya no puedo hacer algo? La duda y remordimiento me invade.

¿Si él no me quería porque seguía fingiendo?, quizá solo esperaba a que yo sea quien acabe con esto, muchas incógnitas e hipótesis me invaden.

Recuerdo con nostalgia todos esos momentos y muestras de amor, pero ahora solo queda en el recuerdo. El fin de todo lo bello ocurrió hace tanto, parece ser que la costumbre dolió más.

Aun no entiendo como fui capaz de buscar refugio en alguien que no sea él, siempre le juré serle sincera, no fui lo suficientemente fuerte para decirle lo que pasaba por mi mente: cuando él no me ponía atención, cuando prefería ir de fiesta con sus amigos sin importarle nuestro aniversario, en muchas ocasiones siempre era lo mismo.

Me pregunto: ¿Por qué lo hice, si hasta ese entonces yo creía que lo amaba?. Ha pasado tanto tiempo y sigo pensando en él, de cómo hubiera sido si aún estuviéramos juntos, quizá la monotonía lo hubiera conducido a lo mismo que a mí.

Repaso una y otra vez el momento en que él me descubrió, ver sus lágrimas caer por sus mejillas, una tras de otra y repetirme que me ama, dolió demasiado.

Decidimos separarnos y seguir cada uno por su lado, pero sé que en nuestro corazón aún guardamos algo para el otro y son más que emociones causadas por los recuerdos, así de misterioso se pinta el amor…

El sol que brillaba para los dos y ese cielo azul que guardaba miles de sueños ya no existe.

¿Los dos somos víctimas o culpables?, sea cual sea la respuesta, los dos ya estamos heridos y cuando eso sane quedarán cicatrices…

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS