Si pudiera yo, escribirle algo que a su alma llegue, si pudiera cantarle sin versos, si pudiera él si quiera escuchar mi voz, mi aliento, mi respiración. Si pudiera al menos hablarle y no sonrojar y no temblar. Si pudiera tan solo con mis palabras calmarle, alcanzarle en su libertad. Estaría condenada a la oscuridad, a pasar desapercibida, a ser olvidada. Si pudiera yo, besarle sin ninguna intensión mas que de tomar sus labios y rendirme ante ellos, entregar mi deseo y ser esclava de su boca, de sus ojos color noche, de sus cejas ajardinadas, expresivas e incitadoras; estaría feliz de escapar de mí y ser de él, para él, de cuerpo y corazón…

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