Era otra tarde normal de octubre, el reloj marcaba las 7pm el clima marcaba una noche perfecta para hacer el amor, decrepente un pito desconcentro mis pensamientos era mi novio que como de costumbre me recogería en la universidad, iríamos a comer y contarnos que tal estuvo nuestros días y era viernes hoy me quedaba a dormir con el, todo el día marcaba ser rutinario, de repente desviamos el camino al parecer fuera de la ciudad, al llegar al restaurante me encontré algo muy fuera de lo común, era oscuro con luces pálidas la decoración un poco sombría para mis gustos del techo colgaba un gran y hermoso candelabro de cristal enseguida el mesero nos indico nuestra mesa al parecer era en otra area de este lugar atravesamos un pasillo y detrás de una puerta me tope con una sala cubierta de cortinas rojas, música suave y una mesa en medio del salón con champange y dos candelas, aquello me pareció tan intimo y excitante mis ojos se iluminaron completamente la expresión de mi novio fue satisfactorio enseguida tome asiento entro una camarera con dos platos de una especie de almejas, comimos y bebimos champange creo que me pase unas cuantas copas, entraron dos camareras imagine que a recoger los platos para mi extraño parecer venian vestidas muy provocativamente enseguida una acerco sus pechos a mi cara y me beso la oreja, atonita no sabia lo que estaba pasando enseguid veo a mi novio con unos ojos exsaltados de la emocion, mi cuerpo comenzo a obedecer no me negué a nada enseguida estaba calorienta y un tanto humeda esto era algo completamente desconocido para mi.

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