Cuando tu única opción es luchar y resistir sacas fuerzas de donde sea y como sea. La vida en si consiste en luchar, hacerte un hueco en el mundo y afrontar las dificultades, tienes dos opciones rendirte y ver como absolutamente todo te supera o bien tener la determinación para avanzar.

Eres tú quien escoge sus armas, traga saliva y camina, retroceder no es una opción y quedarse quieto tampoco, caerás muchas veces, te verás sucumbido y hundido por el mundo que no puedes controlar.

Si he llegado hasta aquí ha sido por mi propia causa, afrontando retos, conociendo oscuridades que no recomiendo a nadie y pensando a veces que me iban a derrotar, pero mientras encuentre una salida pienso abrirme paso a tiros si es necesario. No he venido aquí para dejarme amedrentar por nadie ni nada y el día que no sea capaz de incorporarme nuevamente, entonces podréis darme por muerta, pues mi fuerza se habrá desvanecido por completo; pero mientras quede una única bala en la recamara me volveré a alzar.

Cada cual elige su camino o intenta hacerse el mejor posible con las cartas que dispone, he jugado muchas veces y en casi todas he salido, algunas veces victoriosa y otras me ha costado varios intentos para lograr ponerme en pie y recobrar mi fortaleza.

He conocido el infierno tantas veces que ya no le tengo miedo, somos conocidos y sabe demasiado acerca de mí. Cada pistola representa quién soy y cada tiro gastado son las dificultades pasadas.

Resistencia, fuerza, locura, amargura, llanto… He llegado hasta aquí y voy a dar todo lo que me quede para afrontar un futuro incierto, pero mientras tenga munición absolutamente nada me detendrá.

Mi nombre es Fyre, recuérdalo puede que en un futuro te topes conmigo y será entonces cuando sabrás de lo que estoy hecha.

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