EL EMPEÑO

Jose era un trompetista…Que digo un trompetista, era el trompetista…Pero un día comenzó a beber…

–Emi, necesito tocar en tu club.

..¿ Pero no te acordás de la última vez que tocaste aqui ?

..Hace ya siete meses que no bebo, Emi

..Si, como no…

–Emi…dejame demostrartelo

Jose tomó su instrumento, lo llevó a la boca y comenzó, habrá tocado dos minutos , hasta que inspirado, dió un giro con su cuerpo, pero también lo hizo la trompeta, con la que tiró una botella de wisqui de malta MACALLAN del año 1983.

Sin que Emi le dijera nada, se dió media vuelta y se fue.

Caminando por la vereda, vio como un camión casi atropella a una señora. Inmediatamente, y sin pensarlo se arrojó a la calle y el camión lo atropelló.

–Fue un rasguño ¿Verdad?…Dijo el camionero, y agregó.

–Mirá, no tuve un accidente en años, soy chofer de una compañia…Ya no soy joven, y esto puede ser un escusa para echarme.

–Tomä–Y le puso unos billetes en la mano.

Luego del episodio del Club, o sea la charla humillante que tuvo con Emi, jose habia empeñado su trompeta por 8000 pesos. Había decidido nunca más tocar…Era simple se la bebería.

Y asi lo hizo, por eso, a la salida del bar cuando ve que el camión casi atropella a la señora, sin pensarlo, como dije, se tiró él mismo a la calle.

Luego de este incidente tomó un cigarrillo, y descubrió que no tenía fuego. Comenzó a pedirlo, pero nadie notaba su presencia…–Estoy muerto–Se dijo

Cuando creía que ya nada se podía hacer, un hombre le acercó un fósforo.

–¿Ud también está muerto ?

–No.

–¿Es un fantasma ?

–Claro que no.

–Bien, pero yo si lo soy, la gente pasa a mi lado sin verme.

–Esa gente hace mucho que está muerta, los muertos son ellos, y es por eso que no te ven. Están muertos, pero se les permite seguir viviendo…Están muertos en esa vida que llevan. Vos estas en un limbo, solo tenes que elegir si caminaras hacia la luz o hacia la botella.

Luego volvió en si, la gente lo levantó el camionero le dio un dinero a cambio de su silencio, y con ese dinero desempeñó la trompeta.

Volvió a hablar con Emi, esta, ya cansada, se dejó convencer, estaba segura que se caería al levantarse de la silla para ejecutar el «solo». Lo echaría, y él, avergonzado, ya no volvería.

Esa noche el Club estaba que reventaba de gente. La orquesta comenzó a tocar con el telón cerrado, y cuando se abrió, Jose estaba parado…Y los cuarenta minutos que estuvo la orquesta tocando nunca se sentó.

Al terminar la última pieza, se cerró el telón, y mientras los músicos guardaban sus instrumentos, Jose permanecía de pie.

Todos sus compañeros lo consideraban un borracho medio loco, asi que simplemente se fueron.

Emi vio salir a todos menos a Jose. La session había estado super, y la gente no paraba de aplaudir.

Emi subió al escenario, y lo encontró a Jose parado en la misma posición que cuando tocaba. Extrañada, fue a saludarlo, y a felicitarlo. Jose seguía en la misma posición, charlando y agradeciendo, pero inmovil. Fue entonces que Emi, emocionada, le rodeo con el brazo, Sintió algo duro, algo asi como un fierro cilíndrico que se extendía desde el cuello a los hombros.

— Sacame el saco por favor– Pidió Jose.

Al hacerlo, quedó al descubierto un arnes que lo sostenía, y es por eso que nunca se había sentado.

Jose se seguía emborrachando, solo que con ese arnés, no se caía en el escenario, y podía seguir tocando borracho,como a él le gustaba.