Catarsis en escritura

Hay quienes miran el dolor desde lejos, creen que es una emoción que nunca podrían llegar a experimentar. Se sumergen en un sentimiento de omnipotencia, del que no pueden escapar. Te decepcionan una y otra vez, cuando se ríen de tu tristeza. Y se regocijan de un narcisismo que espanta y da asco.

Hay quienes te dan la palmada en la espalda y esconden el hacha. Esos que finalmente te dejan sin alma. Te hieren hasta dejarte sin aliento, perdiendo las esperanzas.

Te olvidas de quienes son, y lo que hiciste por ellos. Ya no te interesa conocer más sus universos. Si no están cuando estuviste inmersa en el dolor, no estarán más para nada. No sirve una sonrisa fingida, para después utilizar la falsedad para el engaño.

No sirve de nada una palabra de aliento, cuando quisieron dejarte al borde del abismo, sin importar nada más que sus espejos.

Ojalá la vida no los encuentre sólos y vulnerables frente a la muerte. Porque de ella si nadie podrá escapar. No habrán excepciones. Pero que mejor que poder retirarse con la cabeza levantada y la conciencia tranquila. Y un alma llena de Bondad, perdurando como estela en la inmensidad.

Romina Sasselli.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS