Teniéndote, teniéndome.

Teniéndote, teniéndome.

Kristel

02/10/2019

Teniéndote entre mi pecho, mis brazos yacen en tus hombros mientras respiramos aceleradamente. Ámame. Me entrego a ti tan confiadamente como las hojas se liberan de la rama para caer al suelo. Deséame como yo a ti.

Solo miro tu presencia, nada en específico, y ya te deseo, siento el fulgor de un nuevo sentir, un nuevo expresar, un distinto mirar.

Teniéndote entre mi pecho tus labios contra los míos parecen intentar acabarse, tan desnudos que estamos, el aire fluye y el corazón se detiene. Dirigimos nuestros actos a un solo movimiento… Ven, bésame, no te muevas, te tengo entre mi pecho.

Se cierran los ojos lanzándose a tu cuerpo, mis piernas sobre las tuyas, tus manos sobre mis curvas. Se abren los labios para estar sometida ante tus besos, cuánta energía, cuánto amorío, cuánto socavamiento.

Teniéndome tú entre tus brazos, tan inmóvil que me quedo, tan quedita ante tu cuerpo, en medio de placeres y deseos. No deseo huir, no anhelo correrte, necesito tu cuerpo junto al mío, teniéndome tú entre tus brazos, teniéndote yo entre mi pecho, nos rodeamos de placeres y destellos.

-Kristel.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS