A MI PEQUE
Al conocerte, divisé una hermosa flor, me enamoró tu perfume, tu cuello desprendía un maravilloso olor
No te creí a mi alcance, mas el tiempo me quitó la razón
En pocas semanas tu entraste en el mío, y yo en tu corazón
Fuiste un regalo del cielo, una estrella brillante que iluminaba la oscuridad
Fuiste mi haz de luz radiante, la Princesita que llenó mi soledad
Nos separaban 10 años y nuestros carácteres tan diferentes
Tú introvertida y yo me enrollaba con todas las gentes
No me importó seguirte al fin del mundo, donde estuvieras tú, quería estar yo presente
Intenté hacerte feliz, pero mi forma de ser, marchitaba tu subconsciente
Sin poder soportar ver como mi linda flor se marchitaba, decidí apartarla suavemente de mi lado, mi estrella es lo que necesitaba
Llegó el día que su brillo de mí se alejó.
Para mí volvió la noche, y en ella mi vida se transformó
Volví a ser el de siempre, el dicharachero extrovertido, pero sin su linda flor
Volví a recorrer las noches, buscando el amparo de cualquier calor
Pasados pocos años, comencé a soñar con ella, a vivir en mis sueños casi reales, a abrazar a mi hermosa estrella
Sufrí muchos despertares, sintiendo aún su tacto y aroma
Fueron muchas las veces que vacié mis lagrimales, que me corroía la carcoma
Siempre he soñado con volver a verte.
Siempre he preguntado por ti a quienes podian conocerte
He querido pensar que otro te ha hecho feliz
He pedido que así sea, pues lo tienes merecido, mi dulcecito regaliz
El pasado ya no vuelve, no regresan los instantes
Si eso fuera posible, daría mi vida por volver a conquistarte
Después de tantos años, sigo pensando en ti, lo único que yo pido y quiero, es que por lo menos, tu hayas sido y sigas siendo feliz
Angel Márquez Díaz
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