A quien yo sé.
Qué bello es verte de frente,
con el sol detrás tuyo, muriendo
como todo lo que a tus espaldas
muere.
Qué hermoso es dar
a la luna la espalda
para verla en tus pupilas reflejada.
Cual posesa, andas
de un lado a otro, girando
en puntas, saltando
y bailando bajo el cielo estrellado.
Cual niña, no quedas quieta
y así sonríes, como niña; mi niña.
Mi niña, cuando sonríes
muere el sol y cae a tierra,
la luna se extingue en el
amplio firmamento y las estrellas,
tan altas y lejanas
como tu mirada, que busco
como buscan los clérigos
a dios, se apagan.
Qué bello es verte de frente,
verme en tus ojos mirarte,
y ver tu sonrisa al mirarme;
qué bello es verte a los ojos
y sin hablar decirte
lo que te digo siempre sin hablar:
te amo.
Qué rápido es el tiempo
cuando me exento de él
en tus ojos,
qué rápido ha pasado
la luna sobre nosotros.
A lo lejos, en
tus ojos, se refleja un sol
naciente.
Qué hermoso es ver en tus ojos
que amanece.
OPINIONES Y COMENTARIOS