Nunca supe qué querías de mí, no pude leer lo que tu forma de actuar quiso comunicarme.

Hoy ya no me importa tanto, tengo otras prioridades pero por cómo se dieron las cosas, entiendo que una parte tuya quiso sacar provecho de una parte mía y se podría decir que lo logró, pero no. No porque esa parte mía era consciente. Y no te puedes aprovechar de algo consiente. Vos crees que conquistaste esa parte mía, pero no. Me pertenece todavía; nunca se fue.

Asi que no te enaltezcas porque no ganaste nada, de hecho, perdiste mis dos partes.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS