Blancas rosas sobre la roja pradera.

Roja de vergüenza,
roja de ira,
roja como la sangre que da la vida,
sangre que la cubre y la abriga,
que de esas blancas rosas mana como fuente funesta,
que fue esperanza,
que fue alegría,
Y ahora yace aquí perdida,
tras una guerra que nadie quería.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS