Debajo del paragua azul

«Debajo del paragua azul»

¿Cuántas lágrimas sueltas

Han caído en el banco.

Cuántas de ellas convergen:

en un mismo noviembre,

la mirada perdida,

una arruga en la frente,

en la mente un poema,

y el timón estropeado

en sus pálidas manos?

Lluvia azul dibujó el paragua solitario.

Cielo redondo que acunó su mente.

Lágrimas claras, mecidas, cantadas.

A unos falsos labios,

unidas, cobijadas.

Y en el fondo el abrazo,

en la encrucijada,

escondida se oculta

su triste mirada.

Gotear que no cesa,

su entereza desarma.

Cae al papel de la boca,

una lenta cascada.

Desde el crispado rostro,

ráfagas de respiración entrecortada

esconden un nombre.

Lo dicen,

lo muerden sus dientes.

Y el papel blanco, azul … salpicado

cerca de su cara,Se mantiene absorto,

roba la mirada.

No quiere las letras.

No quiere palabras.

Bocanadas de tristezas, humeantes,

Impactado… traga.