el inocente

Salgo y esta parada, la muy perversa,

Con una camisola corta y la risa puesta,

Hola vecina, como está, tartamudeo,

Cuando la visión de aquello, me deja tieso,

Vengo a buscar solo azúcar, dice coqueta,

Y se introduce, apartándome de la puerta,

Vecina lo siento, es que, yo no la consumo,

Intento explicarle mientras registra frascos,

Pocillos y muebles de uno en uno,

Yo solamente tomo endulzante,

Le digo cuando de pronto, se para a mirarme,

Y acercándose despacio viene a tocarme,

Ay qué pena vecinito, lo hacía más dulce,

Intento retroceder,al parecer ya es tarde ,

se ha pegado fuerte a mi, que dios me ampare,

Vecina yo creo que, ya debería marcharse,

Mi novia esta al llegar, ay que desastre,

Cuando la veo en la puerta, que está parada,

Con las llaves en mano y muy enojada,

¿Quien es esa fulanita, grita de golpe?,

Es la vecina del frente, la del catorce,

¿Y que haces con ella colgando y en calzones?

Yo puedo darte buenas explicaciones,

La vecina se desprende y me mira seria,

Vecino que lástima, que Ud. azúcar no tenga,

Tendré que ir a comprar afuera, ay, que pereza,

Y con un gesto desdeñoso, sale violenta,

Mi mujer se me acerca, ahora inquisidora,

que esta todo en orden y en su sitio,ella valora,

y de un apretón, se asegura, ya sin demora,

Ay mujer, que eso duele, y doy un salto,

Ella se pega a mi cuerpo, y me está besando,

Así que azúcar buscaba, la desgraciada,

Y me muerde la boca, entre las palabras,

que obtenga en otra parte, la muy maldita,

Y deje de andar semidesnuda, haciendo visitas…