El miedo quizá no sea por ti. Quizá el miedo es a la memoria.

El miedo quizá no sea por ti. Quizá el miedo es a la memoria.

Nadie observa lo alto de las cosas, todos caminan hacia abajo, en sus pies.Arriba es un mundo, y es mío. Siento que nadie se toma un tiempo.

Un tiempo para contemplar una familia de palomas al filo del borde de una cornisa, o los detalles de una vieja arquitectura perfectamente acabada

Lose y te lo cuento en este poema, en esta canción para tu sangre, en esta tela de agua para tu cuerpo, en este perfume de silencio para tus ojos, en este recibo celestial para tu risa

Voltearemos sobre el hombro, y veremos un sendero regado de nuestros pedazos.Y no sabremos como reaccionar al vacío interminable de estar lejos.No entenderemos al viento cuando levante las famélicas hojas ,no sentiremos el aroma de la tierra antes del diluvio y no entenderemos al corazón, tratando de disimular lo que extraña.

Y te veo, en lo llano del Amor, un día sentado cubierto por la sombra del árbol blanco, con la piel hecha risa, las manos atadas a la raíz del cosmos y los pies hechos agua, con tu mirada en el otro, con tu abrazo de hoja, en otro plano, y tus cadenas ya a lo lejos llorando por no poder cubrirte de miedo y dolor, porque ese día habrá calor en tu corazón, y ya no podrás más contigo mismo.

A vos que te escondes en cualquier ciudad, en cualquier mágico lugar que he creado para los dos, y jugamos a encontrarnos en la esquina de la iglesia, en cada escalera, y en cada esquina que teme ser nombrada.

Mundos abismalmente distintos nos separan , eso sí que lo sabemos bien, vos buscas equilibrio en tu vida, no te gusta arriesgar .Mas no lograrás obtenerlo, no sin probar este prohibido manjar .

Memoria de marimbas ,hay que tener una cita , veo bosques encantados, historias de obreros, indígenas desterrados de tu suelo enamorado y no me siento cansada .

Me acomodare el brazo , para que abrigue tu cara, durante la noche extraña.

Creo escuchar las campanas,

.El catre chirrea,mientras mi mente , ordena tu cuerpo, que poca cordura ,tus ojos estan secos,frente el calor inquieto, de tus inservibles miedos.

Tomare la miel con mis dedos,endulzare lo amargo de tu alma, comprimire mis pies mientras me saboreo.

Nos encontraremos después de los sonidos fuertes del regreso,

Siempre estaré en tu círculo de nubes, y los ardientes besos de mis sueños.Te percibo en el viento de los jueves y en los ladridos nocturnos de los perros.Siempre supe de tus miedos y los percibo tímida, yo y mis cosas olvidadas ,solo contemplo los recuerdos gratos de tus besos.