Efímero

     1

Nunca sé es del todo libre

          Esa mano 

que se ensaña, que te agobia, que te mata 

es la mano del peor carcelero del alma 

pues no es la vida

ni es de quienes te aman 

eres tú misma, es tu mano. 

La tristeza que llevas por dentro 

La amargura de ser y no ser nada.

 

No dejes que se empañe el espejo 

lucha por tí, por tus silencios 

por descubrir que eres alguien 

por el sabor de las lágrimas 

por comprender que vivir 

        no es sólo reír y 

una libertad efímera. 

Mira a tu alrededor 

hay quienes se matan 

por ser esclavos de su independencia

quizás por vivir demasiado 

       en poco tiempo. 

Eres tú, tu propia cárcel 

es a tí a quien corresponde 

sacar la daga de tu pecho

debilitar la roca irrompible 

superar tus miedos, tus temores 

comprender que ya estás viviendo.

Recuerda: 

Nunca sé es del todo libre.

2

               Burla 

Burla.

   Sí, burla fatal

   la de Romeo y Julieta.

Burla.

   Sí, burla fatal

   la de Marco Antonio y Cleopatra.

Burla.

   Sí, burla fatal

   la del destino que se ensaña.

   Burla la de Adán y Eva,

   burla, la del amor que engaña,

   la del amor eterno.

Burla

   Sí, burla fatal

   el veneno que se lleva el alma,

   el sexo entre espíritus,

   la enajenación de los cuerpos,

   el cruel final.

Burla

   Sí, burla fatal

   la mordedura tenaz de la serpiente.

   Burla fatal

   la del amor que se pierde,

   por la falta de comprensión

   o por la intromisión.

   La del amor que se va

   todavía se perdona 

   pero la muerte por amor, o el amor que se mata, 

   ese siempre cubrirá de gloria,

   la burla fatal que el destino hace,

   del amor en la historia.

3

       Quietud y soledad

   Un grito en la noche,

no te asustes, es normal,

raro sería

quietud y soledad. 

   Escuchar disparos,

la desenfrenada huída,

ver correr al policía

y al delincuente denegar.

   Tener un arma en el costado

es ahora una necesidad,

magníficos negocios las estafas

y la droga el tesoro mundial.

   Mentir por deporte,

matar por excitación,

alcoholizarse para olvidar,

huir para no pensar.

   Cobarde mundo el nuestro,

pleno de aberraciones,

inmundicias humanas

despojos de lo bello.

   Ciudades plagadas de gente,

soledad en muchos ojos

y en otros tantos muerte

y la desconfianza en la frente.

   Tribus de diferentes razas,

señalada por los ídolos de moda 

el último grito al vestir,

las bandas que no se ignoran.

   Un grito en la noche,

no te asustes, es normal,

raro sería,

quietud y soledad.

4

SUICIDARME, YO?

 Suicidarme, yo?

 estás equivocado 

es cierto que te amo

y a tí, me he acostumbrado,

al marcharte de mi lado 

de dolor me he desmayado;

me acribillan los nervios,

quito el tapón

y me echo un buen trago

mas no me ahogo

en un vaso con licor,

ni a medir culpas me detengo,

lo que pasó, pasó;

avanzaran los años

y este amor ya se perdió

Suicidarme?, Yo?

5

ESTOY DE NUEVO AQUÍ

Ese cisne en el lago

la paloma volando

mi gatito jugando

con la hierba y el barro

la risa de los niños

el correr jubiloso

y la calma del cansancio.

La niña llorando,

el niño sonriendo.

Miro hacía el cielo

y poco a poco comprendo

la fugacidad de lo tierno.

Ese árbol tan viejo

me trae tantos recuerdos.

Me extiende el bebé la mano

yo le acaricio

lo arrullo, lo amo 

le ofrezco el presente

hecho pasado.

6

«NO»

Piénsalo bien;

no es fácil decir, no;

pero en ocasiones es la solución

Un no, fuerte y decisivo 

es difícil de decirlo,

hay que tener carácter; 

darle sentido 

y no basarse 

en sentimientos de egoísmo. 

Lo mejor no es el sí, continuo 

es saber decir no, 

cuando hay que decirlo. 

No todo es posible,

ni todo es genuino 

un no, verdadero, 

lastima sin sentirlo; 

es decir a tiempo 

ese no, que no es castigo.

7

Hombre y carácter

El poder envilece;

sobre el espejo

la burda imagen 

del hombre obstinado

consumido por la política

y sometido a la religión.  

Se desvanece su figura 

se calcina su amor. 

Tan solo los más fuertes 

someten su arrogancia 

bajo el yugo retador 

del dominio y la posesión. 

Sé es Amo y Señor  

y a la vez esclavo 

del poder, del amor 

de la política, de la religión. 

8

ESTÍO

El estío de los años ,

estación olvidada 

del equinoccio de otoño 

y el solsticio de verano, 

pródigo en sus rayos 

y en sus noches de frío 

coronado; para siempre jamás 

con rama de olivo 

Cortejando los  prados 

con el hoy florecido

y el ayer árido 

de secos racimos. 

Uniendo noche y día 

por igual divididos, 

estación perdida 

entre hielos y espigas, 

sigue despertando 

entre cardones dormidos. 

9

Pensamiento

Entusiastas palabras

concisa redacción

absurdo contenido

para tan magistral orador

10

Caminante

Caminante, hay camino

sí sabes cómo llegar.

El camino se hace

sí sabes a dónde vas.

Sal, al andar

si quieres mira hacia atrás

verás pisadas,

hacia adelante la senda

que habrás de encaminar.

Caminante, no habrá huellas

las huellas se hacen al pisar

y los caminos se cierran

cuando no se vuelven a utilizar.

El destino es de quienes

buscan caminos al andar,

los que jamás volverán

sus huellas a pisar.

11

Seguridad

Tentación es tu boca

al hablarme de amor

pero como no estoy loca

ni enferma de pasión

antes de la prisa

el anillo al dedo

no quiero luego llorar

por la ligereza de la acción

incurrir en la impotencia

después de cometer el error

tal cosa, no sucederá

La adversidad del matrimonio

será la prueba,

si en la ocasión,

no rompes la promesa

hecha por amor.

12

Soy Romántica

Soy romántica

pero sólo por dentro.

Me gustan las flores

y los olvidados detalles

que me cedan el puesto

o me dejen cruzar la calle.

La sonrisa suave,

el piropo agradable,

que me habrán las puertas

y amablemente me traten.

Soy romántica

pero sólo por dentro,

en mí exterior

existe la eficiencia

el trabajo constante

y la dureza de la competencia,

alejando el romance.

13

Último Encuentro

 Qué me pasa amor,

 qué me está sucediendo

Que me ahogo amor,

en mi propio lamento.

Por qué ahora amor ?

tú te vas de mis sueños.

Todo es distinto amor,

tú te vas, yo no vuelvo.

Tan sólo quedan recuerdos amor 

de tú pasado, del nuestro.

No hay retorno amor,

tu camino es sin regreso.

Qué me pasa amor,

qué me está sucediendo?

Estoy llorando amor

por el último encuentro.

14

Castillo de Cemento

No hay canción para escuchar,

ni música para tararear

tan sólo silencio.

Una pared hecha a los cuatro vientos,

soledad en los muros de arcilla;

una ventana abierta

los murmullos de la brisa,

el rayo de sol que se avienta.

Cuatro esquinas en la tierra:

Norte de frío y tinieblas,

Este y Oeste de enmiendas,

Sur de calor y promesas.

Y es que me la pasó en paseos,

viajando con el pensamiento.

Soy libre a los cuatro vientos,

en un castillo de cemento.

15

Agonía

Cuando pienso en tí,

todo es tan distinto;

siento el calor de tu amor

y de tu presencia, el vacío.

Las horas se alargan,

te añoro mí vida,

eres estela de cometa

que sigue quemando

con su ausencia.

Al torrente de la unión

encaminó, nuestra felicidad,

los restos de su fuego,

horas que se alargan,

estrella en mí firmamento,

que poco a poco se apaga.

Te extraño, vida mía

en estás horas de ausencia,

te busco para matar la tristeza,

la agonía, de mi inexorable existencia

16

 Actuación

Amante eres

en las noches solitarias

en los momentos enloquecidos

por la soledad

y por la desesperanza.

Rincón oscuro

adormecido por el tiempo

telarañas y polvo

el sonoro eco del lamento.

Te escuché, más me temo,

que no logras conmoverme,

las huellas de tus lágrimas

no me causan pena.

Es tu llanto hueco

y no causa lastima,

andas llorando sola,

el auditorio no se conmueve.

Pisa las huellas de tu llanto

y

pon tu frente serena

no tiene caso,

mayores escenas.

17

  Invernal

Y en una mañana incrustada de anémonas,

en un cielo cuajado de lágrimas

mustia la luz del sol se filtra

entre murallas de grises y plata

buscando apañar el carmín de las rosas

besando los verdes, pisando la tierra;

vistiendo en colores al coser con espuma 

el transparente atuendo de la lluvia.

En esa esencia de triste alegría

cuando en migajas la luz se divide

y en bochornosa fuga los colores reviven

en la gresca de los cielos con las nubes.

Se levanta el aroma de la sed satisfecha

y su perfume es hojaldre para mí hambre abierta,

su humedad, frescura para mí piel reseca

En el viento la brisa, pétalos de malva, eleva;

Impía la tempestad acecha, implícita en la calma:

en la infusión de la primavera coqueta,

en el borrar del kaki opaco y sufrido de la selva;

en el meollo de los ríos, de las aguas revueltas

y en la trágica travesía del huracán

tras la imagen del arcoíris escondida.

Oculta en la tumba de los truenos y las estrellas

en la caída del rayo mortal

vida en riña con la vida

sigue existiendo el esplendor inmortal

de mis primeras mañanas de invierno

cuando aún aletean la claridad y las sombras

despuntando el alba, trémula, inquieta.

18 

ESCUCHAR

Una palabra en la obscuridad

un pensamiento y la eternidad

aquello que hoy no existe

y quién sabe si existirá

una promesa y un adiós

la despedida del amor

el reflejo en un manantial

el encuentro entre dos

un corazón pleno en razón

el sollozo y el inconfundible, no;

la separación cruel

la desolación, el jamás volveré

Dos manos temblorosas

 se encuentran en el aire

y la brisa suave, pero fría

no las puede congelar; 

se complican las palabras,

ella explica temblorosa 

y él habla sin cesar; 

ninguno de los dos escucha 

las razones del otro;

y así, las horas pasan

y el camino se acorta,

llega, sin remedio, el final.

Una palabra en la obscuridad

un pensamiento…

Ella se aleja triste,

sin saber porqué,

ni cómo sucedió.

El va por su camino

todavía sin comprender: 

por qué, si la amaba, la dejó;

y así dos corazones

marchan con la misma desgracia

y quizás, con la misma razón; 

por caminos distintos,

todo por un sólo error: 

no saber escuchar lo que el otro confesó.

Una palabra en la…

Dos almas encuentran el amor; 

perdidas las dos en el abismo

de la caída leve,

pero de la cual no hay regreso,

cuando hay mucha confusión,

se estrenan vestimentas

de egoísmo y de incomprensión.

pues no mostraron compasión,

por sus sueños juntos

por su primera ilusión.

19 

LA MUERTE

Van por los caminos:

unos van cantando al viento,

otros van contentos, riendo.

Van por los caminos:

mientras yo estoy llorando,

mientras yo, estoy sufriendo.

Van por los caminos:

unos van acompañados; 

otros van a solas, con sus sueños.

Van por los caminos: 

mientras yo voy muy lejos; 

mientras yo estoy muriendo.

Van por los caminos: 

unos van echando cuentos, 

otros van sólo oyendo. 

Van por los caminos: 

mientras yo, sorda voy; 

mientras yo, la ilusión he exterminado. 

Van por los caminos: 

unos van cantando contentos, 

otros van riendo al viento. 

Van por los caminos: 

mientras yo me deslizo, 

mientras yo me pierdo. 

Van por los caminos: 

y yo, que iba con ellos,

ahora sólo miro desde lejos; 

sus imágenes, que se van; 

sus destinos y el tiempo. 

Ahora sólo suspiro 

por los sueños que no fueron; 

por no poder, reír con ellos. 

Van por los caminos: 

fijando los linderos,

fijando, en cada piedra, su canto; 

mientras yo, dormito en un lecho, 

truncado el más verde tallo. 

Para qué quiere la esperanza un muerto. 

Van por los caminos: 

y yo me quedo

como sombra de un pasado,

un futuro marchitado. 

Van por los caminos 

y con su canto ahuyentan  mi llanto.

20 

       Pensamiento

Voluntad

No hay mayor esperanza, 

que la que jamás se ha perdido; 

la que se encuentra en el coraje, 

en la mirada, 

                          de quien ha sobrevivido

21 

Naturaleza

Y llueven las rosas

sobre el amplio mar 

y la luna murmura 

a la piedra caliza

lo dolorosa que es su soledad

y la roca escuchá 

el lamento lacónico

consolando al río,

en su largo peregrinar; 

las olas bañan las playas 

y el agua dulce besa a la salada

la espuma se envuelve en caricias

y la tierra se recoge en sus entrañas. 

Se conmueven, viento y montaña 

que se vuelven eco 

de quietud y amenazas, 

es la vida que palpita 

por el tiempo y la distancia.

22 

         En Mayo 

Cálida tarde de Mayo, 

en uno de tantos años, 

el aroma de las flores vas regando, 

el verde se va asomando. 

Vuelan por el azul, 

aviones y pájaros 

y mientras, tú te alejas con ellos; 

quiero gritar y no puedo, 

menos, te alcanzan mis manos 

y te borras en mis pensamientos; 

de mí, ya estás muy lejos 

tanto, tanto he olvidado. 

Cálida tarde de Mayo 

en uno de tantos años, 

traeme los recuerdos con tus flores,

ocultando mis temores, 

en la benevolencia del engaño.

23

Desapercibido 

Eres tan despistado,

te veo pasar por mi lado,

con tu mirada vaga

y me pregunto:

En qué estarás pensando?!

Tu casual saludo,

es huracán agotando mí conciencia, 

me embriaga tú nobleza,

tu dulzura me encanta.

Te veo pasar por mi lado

y no te das cuenta; 

busco rozar tu piel,

para llevarme un poco de ella.

Cómo decirte, que existo?

si inadvertidamente 

me cruzo en tu camino 

y no logro, ni un suspiro.

Soy sentimiento desapercibido

recogiendo tus pasos 

y desalojando los míos.

24

El tiempo pasó, sin que te dieras cuenta

Charca de barro,

cruce de nuestras veredas; 

calzadas muy viejas; 

se ha deshojado las guirnaldas, 

titilan las chozas  medio dormidas; 

se desnudan las aves

y el pantano se seca.

Me dices que el tiempo no pasa;

destellan las hojas secas,

se enturbia el agua

y de vergüenza muere la yerba.

Yo, en cambio sonrío;

toscas tus manos,

vencida tu humanidad; 

te abrazo con fuerza.

El tiempo ha pasado

y valió la pena

que no te hayas dado cuenta.

25

Cómo las Ondas en el estanque

Cae la hoja seca

sobre el agua clara,

se desvanecen las ondas

como mis lágrimas sobre la cara;

el pájaro que canta, calla,

ahora sólo se escucha

el sollozo que proviene de mi garganta.

Sentada con mi dolor

bajo la frescura de aquel árbol,

una brisa suave

se me antoja melancólica.

Mis recuerdos, mi presente

unidos de repente

al lado de aquella fuente.

Acariciado mi cabello por el viento

y de vez en cuando alborotado, 

se me antoja mágico aquel lugar: 

donde vi las ondas tergiversar mi reflejo. 

Y no puedo evitar pensar en el tiempo,

quizás más adelante: 

como las ondas en el estanque, 

como las lágrimas sobre mí rostro; 

no quedarán huellas superficiales

del paso de este sentimiento,

que ahora me atormenta

y como la hoja seca

caída ya del árbol,

solo quede un pequeño recuerdo, 

renaciendo, como retoños 

nuevos sentimientos,

con la esperanza

que la sonrisa, fingida, hoy en mis labios,

será risa resplandeciente mañana.

Como las ondas en el estanque:

toda amargura se desvanecerá,

toda esperanza renacerá

aunque el lamento y el tiempo 

siempre estarán alborotando mis cabellos

y desvaneciendo mis pensamientos.