Arcilla de mujer

No sé si es carencia

Y poco importa

Nunca fui capaz de amar

Por favor, entiéndanme,

Desear sí, pero no amar

Un cuerpo por un cuerpo

Siempre lo vestí

Lo mejor que supe

De mis sentimientos

Para poder después

Desnudarlo poco a poco

Importa nada saber

Qué cuerpo fue sincero

Porque cada uno fue bello

Y cada uno me hizo bello

Y cada uno me hizo niño

Con la inocencia del niño

Que no conoce las heridas

Y el encuentro mercenario,

El adiós de buhardilla

Y cigarrillo compartido,

El hasta pronto que fue nunca,

El para siempre, siempre incierto

Son parte de la arcilla de mujer

Que, inefable, me acompaña

Y a cuya sombra me acuesto

Cuando la noche me acorrala

Con el que siempre me arropo

Si la mañana me destempla

Y son ojos y son pieles

¡Y son susurros al oído!

Y son caminos a medias

Por favor, siempre a medias,

Recorridos.