Cigarrillos y cerveza

CIGARILLOS Y CERVEZA

Pre-escénico: Chato llega al lugar caminando de forma errante con una botella de cerveza en la mano se sienta en el suelo y comienza a tomar.

El  escenario solo cuenta con un banco de madera típico de una plaza, Chato se encuentra sentado en el suelo al lado de banco. Tararea un viejo tango que no recuerda muy bien.

(Canta) Vieja viola, garufera y vibradora. De mis años de parranda y copetín de las tantas serenatas a la lora laralaila larala. Es que la gola se va y la fama es puro cuento de andado mal y sin vento. Todo, todo se acabó. Hoy solo el recuerdo de pasadas alegrías. Solo estas vos viola mía, hasta que me vaya yo.

Al fin Revisa uno de sus bolsillos para ver si descubre algo de dinero hasta que ve pasar a Estefano.

Estafano intenta encender ansiosamente su cigarrillo, pero no le funciona el encendedor luego descubre que está parado delante de Chato.

I

ESTEFANO: (reconoce a Chato y le dice) ¿Qué haces ahí?

CHATO: eh ¿Cómo?

ESTEFANO: Te pregunto ¿qué mierda haces ahí tirado en el suelo?

CHATO: No tirado no, estoy trabajando en mi oficina ¿no ves? Más respeto que soy un laburante

Estefano ignora esto último dicho por Chato y nuevamente intenta encender su cigarrillo.

CHATO: ¿qué te pasa? Pasa, vení sentate vamos a tomar unos tragos (como si lo estuviera invitando a entrar a su casa)

ESTEFANO: no… no puedo, tengo una entrevista de trabajo dentro de un rato.

CHATO: bueno… mientras haya laburo.

ESTEFANO: es que ese es el problema, yo no tengo laburo.

CHATO: bueno… yo tampoco tengo.

ESTEFANO: y sin embargo ni te calentas por conseguir uno (al fin se da cuenta). ¿Qué haces tomando a esta hora?

CHATO: siempre es buena hora para tomar una cerveza. Vos sabes que hace un rato lo vi pasar al tilinaso de Víctor. Paso apurado ni me saludo cuando le hable. Se ve que no me habrá visto.

ESTEFANO: ¿Víctor? (sorprendido)

CHATO: si si… Víctor

ESTEFANO: qué raro

CHATO: ¿Por qué raro?

ESTEFANO: me dijo que hoy tenía que viajar por un tema de laburo

CHATO: mira si va a viajar por eso el atorrante ese y encima por laburo, además vos sabes que iba vestido igual que vos

ESTEFANO: ¿Cómo? No me digas que el hijo de puta de Víctor…

CHATO: Claro así como vos. Con la corbatita bien puesta y trajecito bien planchado

ESTEFANO: Pero ¡Que hijo de puta! ¿Para donde se fue?

CHATO: doblo allá en la esquina… como yendo para el juzgado.

ESTEFANO: NO ¡Qué boludo que soy! Para que le conté lo del laburo. Seguramente se fue a presentar el también. Ahora capaz que ya lo habrán tomado a él. (Se sienta en el banco al lado de Chato)

CHATO: ¿Así que fuiste tan boludo de contarle?

ESTEFANO: Si

CHATO: y bueno cagate ¿para qué le contás si sabes cómo es Víctor?… Además ¿Que sabes si lo habrán tomado? A lo mejor si te presentas ahora… me imagino que todavía estas a tiempo.

ESTEFANO: no… estoy como veinte minutos atrasado (se toma la cabeza) no es que me haya dormido ni nada por el estilo. Es que estaba tan ansioso de ir a la entrevista que me puse a dar vueltas, hasta que me termine por decidir y para entonces ya era demasiado tarde. Ahora ya no me animo a entrar. (Intenta inútilmente encender el cigarrillo nuevamente)

CHATO: (mira a Estefano pensativamente y al fin le responde) che vos sabes que yo acá tengo un encendedor. (Saca el encendedor del bolsillo y se lo ofrece)

ESTEFANO: recién ahora me venís a ofrecer fuego boludo. ¿No viste que no me andaba el encendedor?

CHATO: y si no me pedís, ¿Cómo voy a saber? Convídame un cigarro dale.

II

ESTEFANO: (fuma ansiosamente su cigarrillo) vos sabes que cuando le conté al garca de Víctor que había un laburo en el juzgado. El muy hijo de puta me dijo “ojala te tomen, vas a tener suerte vas a ver”. Que cara dura.

CHATO: Víctor siempre fue así, te saluda con una mano y te clava un cuchillo con la otra. Ventajero como todo hijo de puta. ¿Te acordás aquella vez que le robo la novia a Nico?

ESTEFANO: si como no me voy a acordar. Si yo también me garche a la novia de Nico.

CHATO: ¡Que flor de puta que era esa mina!

ESTEFANO: y el otro se comía el cuentito del amor. ¡Qué boludo!

CHATO: bueno en eso vos también te pareces al Víctor. Le cagaste la novia a un amigo.

ESTEFANO: si ya se. Pero yo pague por eso.

CHATO: la diferencia es que Víctor es uno de esos tipos que siempre se salen con la suya, son más vivos digamos. Y saben aparentar bien… sin embargo hay que ser muy boludo para confiar en un tipo así, más aun conociendo como es.

ESTEFANO: ni me hagas acordar.

CHATO: vos sí que sos boludo.

ESTEFANO: déjame en paz, convídame un trago ahora sí, que se vaya todo a la mierda.

CHATO: (Chato le alcanza la botella de cerveza) y ahora ¿qué le vas a decir a tu viejo cuando vuelvas a tu casa? Se habrá esperanzado que el nene por fin haya conseguido trabajo.

ESTEFANO: no, mi viejo ni me habla. A parte ni le conté lo del laburo.

CHATO: No le contaste ni a tu viejo lo del laburo, pero a Víctor sí. ¡Qué bárbaro che! Confías más en un hijo de puta que en tu propia familia.

ESTEFANO: ¡No me rompas más las pelotas! (se para, da un par de pasos pensativo finalmente le dice a Chato) ¿Sabes de lo que estoy cansado? De la misma rutina de siempre. Todas las noches son lo mismo, el mismo pucho, el escabio, irme a dormir, las mismas sabanas, la misma noche repetida mil veces e irme a dormir de nuevo esperando que mañana pase algo diferente, pero siempre vuelve a ser lo mismo. La ansiedad, el esperar algo de otros que nunca viene, la falta de afecto…

CHATO: y si… ser un fracasado no es tarea fácil, no es para cualquiera dirían algunos.

ESTEFANO: No, no me refiero a eso Chato, sino más bien a la rutina de lo que es vivir. Uno se pasa todo el tiempo esperando. Por ejemplo, esperando el bondi para viajar, esperando en la fila del súper mercado para comprar alguna boludez. Esperando que llegue el fin de semana para poder salir a divertirse. Pero llega el domingo y esos días son muy deprimentes. Uno se pone triste, melancólico. Y preferís no vivir ese día para que llegue el lunes, pero resulta que todos odian los lunes. ¿Te das cuenta? Uno se pasa la vida esperando. Esperando. Me entiendes lo que quiero decir, no?

CHATO: si como no te voy a entender, estar todo el día al pedo también puede ser deprimente, aunque algunos giles laburantes envidian a los que no hacen nada, para otros como vos les resulta una tortura. Después están también los que dicen que el trabajo dignifica y trae felicidad al alma. Yo por ejemplo ni me preocupo, mientras tenga un cigarrillo y una cerveza soy feliz, esa es la mejor combinación. Cigarrillos y cerveza

ESTEFANO: (toma un trago de cerveza y fuma una pitada de su cigarrillo) para que lo vamos a negar si es lo mejor que hay

CHATO: te acordas aquella vez que nos sentamos atrás de la iglesia y nos pusimos a escabiar y fumar cigarros toda la noche

ESTEFANO: sí, que vino el cura nos corrió a la mierda

CHATO: es que vos te pusiste a rezarle a la virgen y a hablar como un enfermo parecías uno de esos evangélicos que están todo el día a los gritos y se la pasan llorando. Yo ya me estaba por ir a la mierda cuando te escuche que le decías a la virgen, TE PIEDAD SEÑOR TEN PIEDAD, SOY PECADOR TEN PIEDAD ¡ja ja!

ESTEFANO: ni me acuerdo de eso, habré estado tan en pedo que no lo recuerdo

CHATO: (sigue cargando a Estefano entonando desafinadamente) CRISTO TEN PIEDAD

ESTEFANO: ¡Basta!

CHATO: CRISTO TEN PIEDAD

ESTEFANO: para que tomas si te vas a poner (avergonzado por encontrarse en la vía pública)

CHATO: SEEEÑOOOR TEN PIEDAD

ESTEFANO: que ganas de romper los huevos que tenes

CHATO: hay que alabar al señor, Jesús murió por nuestros pecados

ESTEFANO: como si vos creyeras en Dios

CHATO: sabes que estaba pensando que tendríamos que armar una banda en alabanza a Dios

ESTEFANO: si no sabemos tocar ni la pandereta nosotros

CHATO: Dios nos aportara el talento para su alabanza. ¡Es más! (como descubriendo algo) Nos llamaríamos los Chuper fantásticos alabadores de Cristo señor de los milagros de la misericordia y la compasión, pero para sintetizarlo usaremos las siglas CFACSMM y C, ¿qué te parece? Lo pensé mucho no te creas

ESTEFANO: si ya veo

CHATO: pero bueno mientras tengamos a Dios de nuestro lado, siempre proveerá de cigarrillos y cervezas

ESTEFANO: nos quedamos sin cerveza (agitando la botella vacía)

CHATO: (se arrodilla y toma sus manos en plegaria) ¡Por favor Dios escucha nuestras suplicas!

ESTEFANO: tan temprano y ya estás en pedo vos…

CHATO: ¿sabes de lo que me acabo de dar cuenta?

ESTEFANO: ¿De qué?

CHATO: de que siempre buscamos a Dios en el lugar equivocado. Si tan solo hubiéramos escuchado más a nuestros viejos. Si tan solo hubiéramos prestado más atención en la escuela. Si hubiéramos ido más a la iglesia a escuchar a ese cura pedófilo que siempre nos rompía las bolas con que teníamos que portarnos bien en catequesis y escuchar a la catequista. Tal vez nuestra vida hubiera sido otra. Pero sin embargo estamos acá, sin empleo con más de treinta años, suplicándole a Dios de que nos provea de más cerveza.

ESTEFANO: que gran revelación que tuviste, de repente te encontraste con el espíritu santo porque nos quedamos sin cerveza

CHATO: de repente me doy cuenta de que vos y yo somos dos tipos condenados, como dos perros de la lluvia

ESTEFANO: es como si no pudiéramos salir de caer siempre en lo mismo, como si todo el tiempo nos faltara voluntad para progresar

CHATO: exacto…

ESTEFANO: siempre pasar desapercibidos como si fuéramos insignificantes para el resto, después de todo ¿A quien le puede interesar un par de fracasados sin título ni empleo? El éxito se mide de acuerdo a la inserción social que uno tenga. Dos borrachines que se juntan a tomar en una plaza solo son objeto de burla e indiferencia.

CHATO: me hago cargo igual, estamos en el lugar que nos toca por nuestros actos

ESTEFANO: no es así… más allá de lo que hayamos hecho o no en el pasado, también estamos condenados por otras razones. Mi vieja falleció cuando era chico, los tuyos se separaron. Siempre me lleve mal con mi viejo, vos viviste en la calle algún tiempo. Todos mis hermanos tienen problemas relacionados al alcohol y las drogas, vos nunca te llévate bien con ninguno de tus hermanos. Ósea nuestro contexto nos condiciono para terminar donde estamos

CHATO: siempre fui la oveja negra de la familia y despreciado por eso, no me hablo con ningún familiar. Es más el tiempo que estuve viviendo en la calle los únicos que me bancaron fueron mis amigos. Ni Dios, ni mi familia me escucho, nadie trato de ayudarme.

ESTEFANO: ves a lo que me refiero…

CHATO: pero aun así seguimos acá

ESTEFANO: bancando los trapos

CHATO: aunque a muchos les joda

ESTEFANO: si, pero aun así queremos ser como el resto… pero no conocemos el camino para salir de donde estamos

CHATO: tampoco que sea tan malo estar donde estamos. Sin preocupaciones, sin estrés ni obligaciones.

ESTEFANO: pero aun así no podemos seguir igual… el tiempo pasa y te vas dando cuenta de que no hicimos nada con nuestra vida.

III

CHATO: a lo mejor tu problema pasa porque te comparas mucho con el resto. Querés ser como los demás y nosotros no podemos ser igual, es como dijiste estamos condicionados por la vida de mierda que nos toco

ESTEFANO: si también puede ser eso… pero uno no puede evitar sentirse mal con el paso del tiempo y darse cuenta de que no hizo nada con su vida

CHATO: bueno es que es la consecuencia de perder tanto el tiempo, como estar por ejemplo ahora sentados aquí tomando y fumando cigarrillos, cuando vos podrías estar en una entrevista de trabajo en este momento.

ESTEFANO: puede ser, pero si no fuera por mis inseguridades, mis problemas emocionales y mi falta de autoestima, tal vez las cosas serían diferentes.

CHATO: si, pero uno siempre puede cambiar… si vos pusieras un poquito de tu parte, podrías con el tiempo dejar de ser así.

ESTEFANO: ¿a vos te parece?

CHATO: claro si, de a poco uno puede ir mejorando su situación. El problema es la falta de voluntad que tenemos para querer mejorar.

ESTEFANO: la falta de voluntad… y ¿a vos te parece que a esta altura de la vida podamos cambiar eso?

CHATO: claro si, uno siempre puede cambiar

ESTEFANO: y lo dice un borrachito que se la pasa todo el día en la calle

CHATO: bueno si… pero yo no me quejo tanto como vos

ESTEFANO: lo que pasa es que estoy cansado de seguir viviendo con mis viejos, de tener siempre el mismo laburo de mierda que nunca me permite salir adelante, pero más que nada estoy cansado de no tener la compañía de una mina. Siempre que salgo a la calle o voy a una plaza como esta y veo esas parejitas, como aquella de allá por ejemplo, (señalando hacia el horizonte a una pareja en la plaza) me hace sentir tan miserable por la vida que llevo

CHATO: ¿Me queres hacer llorar loco?

ESTEFANO: no, te digo no más lo que me angustia

CHATO: te preocupas por boludeces

ESTEFANO: es verdad…

CHATO: de todas formas si buscas una pareja no es porque estás buscando el amor de una mina, sino que debe ser porque no soportas la soledad

ESTEFANO: ¡ja ja! Yo lo que busco es ponerla no mas

CHATO: ¿y para que lloriqueas entonces?

ESTEFANO: qué se yo… cuando uno es un pobre tipo se pasa perdiendo el tiempo preocupándose por boludeces

CHATO: uno nace siendo pobre tipo y muere siendo un pobre tipo. Brindemos por eso (levantando la botella de cerveza)

ESTEFANO: ya te dije que no queda cerveza

CHATO: que desgracia más desgraciada

ESTEFANO: y que vergüenza más vergüenzuda

CHATO: (rascándose la cabeza) ¿vamos a robarle una birra a los chinos?

ESTEFANO: ¿como cuando éramos pendejos y les afanábamos petacas de whisky? No seas boludo que te pensas que tenemos doce años

CHATO: no… bueno… digo no más. Ves, por eso aprecio tener un amigo como vos. Tener un amigo así es todo un lujo. Yo siempre fui de tener muy pocos, pero buenos amigos. Hay gente que siempre dice yo tengo cantidad de amigos. Si bueno… pero ¿cuántos de esos amigos te escuchan cuando te queres pegar el corchazo? Hay mucha gente que por más de que tenga pareja y amigos igual se siente sola. Yo en cambio con vos nunca me siento solo.

ESTEFANO: pasa que la gente es muy boluda también. Siempre andan buscando la aprobación de los demás

CHATO: a eso es a lo que me refiero, siempre están como queriendo aparentar que son felices, queriendo todo el tiempo sonreír para las cámaras, como si el dolor, la angustia y el sufrimiento no formara parte de sus vidas

ESTEFANO: sabes que tenes razón Chato, la verdad que nosotros tampoco la pasamos tan mal

CHATO: no para nada, si yo vivo como un Rey. Vos en cambio si te dejaras de quejar tanto y lamentarte por todo o dejaras de pensar en el futuro como si quisieras ver que es lo que está por venir a lo mejor quien te dice… por lo menos no me romperías tanto las pelotas como una señorita lloriqueando por todo ¡ja ja!

ESTEFANO: anda a cagar

CHATO: es que es así cabezón, toda la vida te la pasaste lloriqueando y echándole a los demás, nunca te quisiste hacer cargo de tus cagadas porque no queres aceptar tu realidad por eso te la pasas todo el día pensando en cómo sería tu vida si hubieras hecho las cosas de otra manera, y así se te pasa la vida.

ESTEFANO: sobre que sos un borrachín que se la pasa todo el día al pedo me queres venir a dar clases de moral

CHATO: más respeto que soy filosofo ¡ja ja!

CHATO comienza a cantar: Vieja viola, garufera y vibradora. De mis años de parranda y copetín de las tantas serenatas a la lora laralaila larala.

ESTEFANO mira de reojo y con desagrado a CHATO

CHATO canta más fuerte y con más entusiasmo

CHATO: Es que la gola se va…

ESTEFANO permanece en silencio

CHATO: y la fama es puro cuento (exagerando la entonación y haciendo ademanes cómicos como si estuviera imitando a un cantante de tango)

ESTEFANO sigue en silencio y comienza prestar con atención a CHATO 

CHATO: de andado mal y sin vento. Todo, todo se acabó.

ESTEFANO se suma a CHATO cantan a dúo: Hoy solo el recuerdo de pasadas alegrías. Solo estas vos viola mía, hasta que me vaya yo.

FIN