MORIRÉ DE AMOR

Nicolas Delacarta (2023)

CAPÍTULO I
La fuga

Tomó el picaporte de la puerta de salida, estaba frío. Se detuvo un segundo más para pensar si lo que estaba haciendo era lo correcto. La respuesta es un rotundo sí.

Abrió la puerta y salió del Centro de Salud. Camino en forma pausada para no levantar sospechas.

No recordaba haber ido nunca a la ciudad. Pero desde el día en que la vio a ella, a su amor, algo se despertó en su cabeza. Empezó a mostrarle imágenes de una vida llena de hazañas pero poco creíble.

A medida que se alejaba, el aire se sentía más fresco y olía mejor. Desde que tuvo memoria, su vida transcurrió en la playa de estacionamiento o en algún rincón del Centro de Salud. Pero su único objetivo era encontrarla a ella. No sabía cómo se llamaba, solo recordaba su rostro y su pelo rebelde que intentaba tapar sus grandes ojos.

Si tenía suerte, no se darían cuenta de su ausencia por unos días, hasta que llegase el nuevo grupo de novatos a la ciudad.

Luego de caminar cerca de un kilómetro, se detuvo sobre una avenida comercial. La fachada de los diferentes comercios y bares, invitaba a pasar el rato y olvidarse del tiempo. Todas las personas con las que se cruzó, alguna vez las había visto en el Centro de Salud, pues debían pasar por allí antes de empezar sus vidas en la ciudad.

Muy bien, ya estoy aquí ー se dijo ー Ahora ¿Cómo encuentro a la chica que me enamoro?, se preguntó.

CAPÍTULO II
Empiezan los problemas

Él escuchó en el Centro de Salud, conversaciones de los Agentes de Vida con los novatos, de que la ciudad crecía año a año.

Newlife City fue fundada por el Sr. Matheu y luego se sumó su familia, o al menos los que estaban de acuerdo en vivir allí. Llegaron a ser cinco mil habitantes y siguió creciendo. Era inevitable el éxito, ¿Quién se resistiría a una segunda chance de vida?

Al pasar delante de una cafetería, divisó en una mesa a un hombre. Creía recordar haberlo visto en el grupo de personas donde estaba ella.

¿Tal vez sepa algo? se dijo y se aproximó a él acomodándose la camisa y el cabello. Mientras piensa cómo presentarse ante el desconocido, se percató que en el Centro de Salud lo llamaban Mr. Ejemplo y le pareció que no era adecuado. Leyó en la chaqueta de uno de los camareros su nombre y apellido, así que lo adoptó. Se llamará Coffee Mate.

Al desconocido le causó gracia su nombre, pero está bien, todos vienen a Newlife a vivir como se les plazca. Le informo que no recuerda mucho de ella. Luego de ese día no la volvió a ver más y cree recordar que su nombre es Amby, además nombró que le gustaba mucho hacer caminatas en la naturaleza.

Al salir de la cafetería tenía mucha más información que cuando empezó. Su cerebro empezó a trabajar de forma vertiginosa. Si me gustara hacer caminatas 一 penso 一 ¿Que es lo primero que haría? ¿Me uniría a un grupo de caminadores? ¿Dónde iría a caminar?

Continuó por la avenida sumergido en sus pensamientos, pero dos agentes lo detectaron y fueron detrás de él.

CAPÍTULO III
La primera pista

Coffee divisó más adelante una Oficina de Orientación, era imposible no darse cuenta, tenía un cartel luminoso de gran tamaño.

No pudo preguntar directamente por la misteriosa Amby, su amor a primera vista, pues le hubieran requerido su número de identificación y él no tenía ninguno. Prefirió hacerse pasar por un fanatico de la caminata por la naturaleza y escucho lo que le informaron.

Al salir de la oficina, divisó a los dos agentes, estos no hacían ningún esfuerzo por disimular su presencia al otro lado de la calle. De todas maneras los conocía, pues los vio más de una vez en el Centro de Salud.

Coffee inclinó su mirada hacia el piso para que creyeran que no los reconoció, pero su mirada periférica le indica que estaban cruzando la calle a toda prisa hacia él.

Al lado de la Oficina de Orientación había una gran tienda comercial e ingresó en dos saltos. La persecución empezó.

La tienda estaba abarrotada de gente, era día de descuentos y novedades. Coffee se mezcló entre ellos y logró encontrar una segunda salida. ¡Genial! ¡Estoy de suerte! se dijo.

Al alejarse notó que los había perdido, pero no le quedaba mucho tiempo para encontrarla. No importa, 一 pensó 一 esto es mucho mejor que vivir y morir en el Centro de Salud.

Mientras tanto en su cabeza, imágenes y situaciones iban y venían. No entendía si eran recuerdos o su imaginación.

Su nuevo destino es el Sector Deportivo. Según le informaron en la oficina, puede ser que ella esté allí.

CAPÍTULO IV
Las cosas se están complicando

El Sector Deportivo es una área de cuatro kilómetros cuadrados, subdivididos en sectores según el tipo de deporte que se interese practicar. A Coffee solo le interesaba el sector de trekking y alpinismo.

Al llegar, observó que un autobús estaba aparcado en la entrada y al cruzar la puerta, se encontró con un grupo de personas que se disponía a abordarlo. Por sus vestimentas, sombreros y mochilas, dedujo que iban de excursión.

Coffee se estremeció con solo pensar en encontrarla entre los pasajeros, pero no estaba allí. Se apresuró a preguntarles mientras abordaban, pero no conocían a Amby.

Mientras hablaba con unos de ellos para obtener alguna nueva pista, escucho a sus espaldas una voz femenina que se disculpa por llegar tarde. Coffee giró su cabeza de forma instintiva para ver quien era. Allí estaba, solo a tres metros de distancia, por unos segundos tuvo la extraña sensación de poder salir disparado como un cohete de la emoción.

Luego se enteró que en realidad no se llama Amby, sino Denis. El hombre de la cafetería se equivocó de nombre, al menos acertó con su pasatiempo, pensó suspirando.

Coffee se las arregló para sumarse al grupo expedicionario, aludiendo que se había registrado a última hora y por eso no estaba en la lista de pasajeros.

Todos irían a la región desértica, junto a la cadena rocosa que está a veinte kilómetros de la ciudad.

En el autobús, él intenta sentarse junto con ella para luego entablar alguna conversación, pero no es posible. Sus amigos le ganaron de mano. A pesar de ello intercambiaron algunas largas miradas. Creo que tendré mejor suerte cuando llegue, se dijo esperanzado, y una sonrisa brotó en su boca.

Pero la sonrisa le duró poco, ya en la ruta al mirar hacia atrás, observo que dos automóviles los siguen y no son dos agentes sino ocho.

CAPÍTULO V
El secreto queda al descubierto

Los destellos de recuerdos se producían cada vez más pronto y empezaban a hilar una historia que no podía ser posible.

El autobús llegó a destino y todos comenzaron a descender. Se pudo ver en los rostros, entusiasmo y sorpresa por el paisaje.

Coffee dejó de lado su aventura romántica para pensar un plan de escape, pero más que correr no encontró otra opción. Los dos automóviles aparcaron y descendieron sus ocupantes. Su presencia intimida a cualquier desprevenido. Parecen ocho hermanos, con una altura superior a la media y hombros tan anchos que parecen romper sus camisas si mueven los brazos.

Él observó el sol entre las nubes, luego a Denis riéndose de alguna broma y el resto de la gente preparándose para la caminata. Nunca sabrás que estoy enamorado de ti, se dijo para sí, pero valió la pena llegar hasta aquí.

Su corazón empezó a latir más rápido. Su cuerpo se preparaba para una carrera inminente. Miró en forma rápida para no demostrar sus intenciones a la cadena rocosa, la idea era perder en ese lugar a los agentes.

Estuvo a punto de lanzarse a la carrera, cuando le llegaron fragmentos completos de su vida, tal vez fueron los nervios o la adrenalina que inundo su sangre, si se puede llamar sangre a lo que tiene, lo que hizo emerger el pasado.

¿Fui un superhéroe? ¿Cual era mi nombre? ¡Eso no es posible!, pensó mientras seguía a los demás, no escucho sus conversaciones y risas, estaba desesperado revolviendo los recuerdos de su origen.

Dentro de su pecho se produjo por un segundo un vacío, parecía que colapsarían las costillas entre sí, pero una nueva energía que no sentía hace mucho tiempo, poco a poco comenzó a llenarlo. Observó sus manos y brazos, tenían un brillo diferente.

Es ahora o nunca, dijo Coffee, e inició su carrera para atravesar algo menos de ochocientos metros hasta las grandes rocas. Giró su cabeza para mirar hacia atrás, pudo ver que un par de agentes comenzaron a perseguirlo a pie mientras que los otros subieron a los automóviles para adelantarse.

Coffee no podía correr más rápido, su corazón le salía por la boca y el aire ya no era suficiente. Los agentes ya estaban a tan solo un metro detrás de él. Con solo estirar sus brazos podían tomarlo de los hombros. Unos metros más adelante, el automóvil clavó los frenos haciendo chillar las ruedas y levantando gran cantidad de polvo.

Su cerebro solo dio una orden más al cuerpo. ¡Vuela!

Despego los pies del cálido suelo y lo que pareció ser un gran salto olímpico sobre el automóvil, dejó atónitos a sus perseguidores cuando se percataron que su ascensión continuaba.

Maravillados con el espectáculo de un hombre volando, los agentes cayeron arrodillados tapándose los oídos. A una altura de cincuenta metros, Coffee aceleró a una velocidad supersónica. El sonido de un trueno ensordecedor retumbó en toda el área.

En ese momento todo iba a cambiar para nuestro héroe.

CAPÍTULO VI
Alguien cumple sus deseos

Por encima de las nubes detiene su vuelo. Pudo ver la curvatura del planeta y un desierto que se extiende por donde se mire. Permite que el viento fresco guíe su trayectoria, sólo podía oírse sus ropas agitándose.

Una voz que parecía provenir de todas partes y de ninguna, lo saludo 一 Hola Thunderman, perdón por haberme olvidado de ti. Este mundo cambió de ser un juego a una segunda chance de vida y no me porté muy bien contigo. Te pido perdón nuevamente 一 su tono era amable y pausado.

一 ¿Quién eres? ¿No entiendo nada? 一 Pregunta Coffee transformado en Thunderman en un segundo.

一 Soy el Sr. Matheu, el creador de todo esto. Tal vez no recuerdes aun, pero eras un superhéroe que luchabas contra los peores villanos. Luego me di cuenta que podía vender esta creación para que vivieran quienes morían en la vida real. Era mucho más rentable 一 su voz se opacó un poco y continuó 一 No tuve el valor de destruirte, eras mi más mimada creación y el origen de todo. Pero no fue justo haber confinado tu vida al Centro de Salud 一

一 Por supuesto que no fue justo. No se lo recomiendo a nadie 一 respondió Thunderman en forma irónica 一 Pero yo solo quiero vivir como cualquier persona y espero tener una oportunidad con alguien que conocí 一 su voz se llenó de luz al hablar de un futuro posible.

一 Estoy de acuerdo, te lo debo. Prometo que nadie te perseguirá, ni tienes que volver al Centro de Salud. Estás libre para hacer tu vida. Hasta tendrás tu número de identificación 一 se rió un poco el Sr Matheu para ganarse la voluntad de Thunderman 一 Solo te pido que no andes volando por allí, sino todos me van a pedir volar y será un caos ¿Aceptas? 一

Si bien era solo una voz, Thunderman pudo imaginar la sonrisa del fundador apretando los dientes y esperando una respuesta 一 Si acepto 一 respondió 一 pero con una condición 一

El Sr. Matheu no terminó de suspirar por la respuesta afirmativa cuando lo sorprendió el pedido 一 ¿Qué condición? 一

一 Por favor, cambie el método en el Centro de Salud. Que no exista nunca más otro Mr. Ejemplo 一

El Sr. Matheu aliviado, larga una carcajada 一 Muy bien, condición aceptada 一

CAPITULO VII
Una semana atrás

Un grupo de personas, los novatos, despertó sobre un autobús que comenzó a aparcar en el estacionamiento de un edificio de cristal. El sol de la mañana se reflejaba en ellos con todo su brillo.

Al descender, los recibió un Agente de Salud con una amplia sonrisa de dientes perfectos.

一 Bienvenidos a Newlife City. Hoy hablaremos de algo muy importante y luego se los guiará según sus intereses y estilo de vida de cada uno de ustedes. Por favor, acompáñenme por aquí 一

El grupo siguió al agente por la playa de estacionamiento hasta donde había un automóvil con el motor encendido y el conductor dentro.

一 Les presento a Mr. Ejemplo 一 el agente extendió una mano hacia el conductor sin abandonar su sonrisa 一 no se preocupen por él, es artificial, no es como nosotros.

Como bien dijo el Agente de Vida, Mr. Ejemplo no es como todos ellos. Siempre hace lo mismo sin hablar con nadie. Solo recibe órdenes. Su origen fue un diseño digital que el Sr. Matheu creó hace tiempo. En cambio ellos, alguna vez fueron humanos de carne y hueso, pero ahora también son digitales.

Como sucede siempre que debe montarse el espectáculo, Mr Ejemplo solo mira al frente, hasta donde se encuentra un grueso muro de concreto. Pero ese día, sus ojos se movieron hacia un costado hasta encontrarse con los de ella.

No sabe si fue el color de la blusa de aquella muchacha o el cadencioso sonido de sus pulseras. Le pareció hermosa.

¿Cómo sería mi vida con esa chica? se preguntó y mientras divagaba en sus pensamientos, el anfitrión les dijo al grupo.

一 Como sabemos, todos aquí presentes no estamos físicamente en el mundo real. Todo esto es una representación de aquel mundo en que vivíamos, pero mucho mejor 一 el agente río para animar al grupo a seguirlo y todos lo celebraron 一 Nosotros no somos más que nuestros recuerdos guardados en forma de conciencia en el Centro Tecnológico Matheu. Con el objetivo de que las cosas no se salgan de control, mantuvimos algo que conocemos muy bien. La muerte 一

Se hizo un silencio absoluto, solo se escuchaba el motor encendido. Pero si los pensamientos fueran música, Mr Ejemplo tenía una orquesta completa dentro de su cabeza.

El agente continúa 一 Deben ser cuidadosos para mantenerse aquí y para el resto de nosotros. Mr. Ejemplo, acelere por favor 一 ordenó echándole una mirada y siguiendo la trayectoria del automóvil.

El conductor en realidad estaba imaginando, cómo se llamaría la muchacha o cómo sería la primera vez que hablasen. Pero al escuchar la orden, hundió su pie en el acelerador. El vehículo recorrió unos cien metros y se estrelló contra el muro.

Hasta el más intrépido de los espectadores, considero respetar las normas de tránsito. El agente los llevó a observar de cerca el impacto, pero más de la mitad prefería ahorrarse ver un cadáver destripado.

El Agente de Vida los tranquilizó y les informó que no verán ningún cuerpo, pues si alguien muere en Newlife, solo desaparece. Así que deben ser cuidadosos o les pasará lo mismo.

Mr. Ejemplo, si bien había desaparecido de la escena, él no era como todos, no podía morir. Su cuerpo se recreó en la terraza del edificio, fuera de la vista de todos.

Desde allí, miraba como la suave brisa movía el cabello de esa chica, y dentro de su cabeza se dio cuenta que estaba enamorado. Su voz interior le dice 一 Estrellarme en un automóvil no me matara, pero si no hago algo pronto, moriré de amor 一.

FIN

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