Destrozado. 
Y pasa de nuevo
La vida escupe en mi rostro
Lo hace siempre
Veinte otoños de tristeza
Ningún verano de alegría
Melancolía a mil.
Pupilas negras llenas de desgracia
Miran lo que fui y seré
Nada más que un vil bastardo
Maldecido desde siempre.
Quizá lo merezca
Nadie elige su destino
El desdichado azar falla siempre
Cada vez falta menos.
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