EN EL VIENTO.

Creés poder mantener clara tu mirada contra el viento, Creés que estás de pié mientras caes desde un acantilado, Creés tener gozo mientras abrazas un tamo de espinas. Creés dar aliento cuando los corazones realmente se llenan de decepción y vacío. El problema no es lo que Crees, sino lo que ocultas, mientras enfrentas la realidad.

Eres como ese libro atractivo, pero la tinta se ha desvanecido, pero no creas que es por el uso significativo, sino porque las letras mismas se negaron a revelar lo que no es verdad.

Cuida tus pasos, y pon atención a la dirección del viento, no seas para éste un obstáculo al que ciertamente con su fuerza derivará.

Cree en la Verdad, la cual es la que te hará parte de su realidad.

Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza,

Salmos 40:4