CAJAS EN FORMA DE CORAZÓN

CAJAS EN FORMA DE CORAZÓN

En la noche de Afrodita
Vas del sudor al llanto
Transpiro y me espanto
Tantos seres sin forma
Con tantas mentes sulfatadas
Me acerco a modo de exploración
Como un safari del corazón
Y no me ofrecen nada
¿Qué más puedo hacer?
Sugerilo vos
Que siempre estimo tu opinión.
Quizá, escribir un poema
Que no trate de mi dilema
Podria despistarme por un rato
Con un entretenimiento
Obsoleto y barato.
Tengo que vivir por mí
Sobrevivir a costa mía
Y no sufrir por trama tuya.
Tengo que sonreír sin ti
Crear sarcasmos retorcidos
Que causen unas risas
Y no acordarme de la tuya
(Resonando de fondo
Molesta y jocosa
Como la de un asmático)
Tengo que gozar sin ti
Y encontrar en otros cuerpos
La promiscua tentación
Que me causaba el tuyo.
Tengo que desligar la parte
Mas profunda de mi templo
En la que habitas.
En primera instancia
Tengo que dejar de escribir esto
Y no hacer tanto embrollo
Si es que arranco otro trozo
De esta costra, mi amor.
Cajas de madera
En forma de corazón
Recién nuevas recién rotas
Contra tu cabeza la más bella
Explotó.
Esa rabia me la dedicaste
Y con sus astillas me penetraste
Y sé que ese odio aun anida en vos.
Haga lo que haga por detenerlo
Es un flujo imparable
Lo que te sale de adentro.
Ese día horadaste un limite
Y siempre seras vulnerable
En el mismo punto impulcro.
Porque te he perforado
Y ese hueco en tu pecho
Lleva mi nombre marcado.
Los »Para siempre»
A todos nos aterran
Aunque a mi en especial me acongoja
Que no haya un mañana muy intenso
Que en mi presente no encuentre motivos
Para acabar obnubilada
En el borde de tu cama,
Cuando llegue el »Para siempre»,
Se pare cual estatua frente a mí,
Y extendiéndome su mano me anuncie,
»La única verdad es que siempre llego»
Era el siempre, tan perpetuo como el fin.
Por fin lo entendí.
Aunque ya sería tarde.
Y esta ensoñación,
No permitiré que se torne en realidad
O se repita en algo más,
En alguna faceta amada de mi vida,
Algún trozo donde encajes vos.
No desperdiciaré ningún instante,
En el que tu respiración se expande,
Abrazando mi cuello al desnudo.
No hay quien nos conozca,
Que no nos haya llamado ilusos,
Y boicoteado nuestra relación,
Pero lo que jamas se pudo negar,
Es que era amor…
Sin mas advertencia
Fue por una suerte de inercia
Y el dolor se volvió calor
Lo incómodo en bizarro
Lo inaceptable en preferible
Lo intolerable en agradable
Lo morboso en placentero
Lo sano en insano
Y si mas te cuento,
¡Más la espina me clavo!
Mi asquerosa anémona.
Mi condena temprana.
Mi alma fragmentada.
Y mis partes separadas
Y desparramadas por la ciudad
No se tocan.
Estas se anhelan,
Por las noches como esta,
De cruel insomnio se desvelan,
Y un tanto obcecante te desean…
Mi vida merece un fundamento,
Y nuestra enseñanza si no es compartida,
No existe.
Dame razones para vivir en este instante,
Y dame más que ilusión para alimentarme.
No quiero un día despertarme
Y que seas irrecuperable
Y que todo lo vivido
Quede en el olvido
Y que tristes y lejanos
Lagrimeemos
Sin poder lamer nuestras sales
Y cumplir lo que dicta il cuore
Solitarios y extrañados
Con el hueco en nuestro pecho
Lleno de gusanos
Carcomiendo lo poco humano
Que nos queda
Y con el arrepentimiento tiritando
Gritos apagados y relamidos por la hiel
Se desesperan por salir de nuestras bocas
Intentando recuperar
Aquello que extraviamos
Y que siempre supimos
que era nuestro.
Mi acorazonada anémona.
Un día despertaremos,
Ojalá desmemoriados
Y ya solo mediocres testigos
De nuestro lazo,
Queden y no quieran recordarnoslo,
Y que nuestra vida pase
Se desarrolle
Se desenvuelva
Y dé su ultimo giro ilusorio
Así podremos despedirnos tranquilos
Como buenos ignorantes
Sin saber lo que es dar
Sin entregarse al amar
Sin consumirnos en nuestro fuego
¿De esta forma tu cabeza
Ya no se estrellaría contra
Mis cajas en forma de corazón?
¿Solo así?

JULIETA IALLORENZI

PATENTADO EN SADAIC

DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS