El amor encaja

Dicen que el cuerpo de una mujer es como un viaje del cielo al infierno.

La subida es mágica

Pero yo soy amante de las caídas desastrosas,

Aquellas que destruyen los huesos.

Quizá la muerte no sea tan mala

Y al fin nos reunamos en la barca de caronte,

Llevaré un vino,

Un par de velas

Y al final del recorrido te daré un beso,

Será el beso que recordaré toda mi muerte.

En el vaivén del andén de nuestros sueños,

Comparamos a la mujer con un ángel,

El ser más bello creado por el hombre.

Prefiero decir: «Son galaxia»,

Contienen 300 millones de estrellas(Imaginen eso),

Están llenas de resplandor,

Nos empapan con su luz

Y su centelleo nos cautiva.

Ellas son Floripondio,

Preciosas

Pero al beber de su manantial no sabrás que es real.

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