Cómo haces para apagar lo que sientes por alguien?, cómo es tan fácil para ti mentirle tan cínicamente como si se tratara de un idiota? Ciertamente disfrutas burlarte en su cara cuando sabes que te ha dado todo y aún no renuncia a lo asquerosamente devastadora que eres. Todos los días pones un grano de arena, como construyendo un castillo cercado de una muralla china, todos los días lo haces infeliz, lo jalas y empujas como si fuese un perro encadenado a tus sucios sentimientos. Eres como tu madre… Fría, calculadora, interesada y chocante, ordinaria, interesada, contenta porque te dan atención cuando sabes que causas un daño irremediable. Nadie nunca te obligó a querer pero nunca quisiste dar cariño a nadie, no, al contrario, sólo te has dedicado a arruinar la vida de la gente, como un súcubo en las noches crueles de soledad. Lo estás provocando todos los días, estas creando un monstruo que va a implosionar en cualquier momento. Cómo haces para dormir en las noches? Nunca te has sentido culpable?. Te has dedicado a dañar, hundir, humillar, lastimar sentimentalmente a este perro faldero que ha dado todo lo que tiene por ti, mendigando un abrazo, llorando por un «te quiero», pensando cada noche en cuando tomabas su mano para que al día siguiente tuviese que verte besando a otro, riéndote en su cara. Ahora cada noche visita el infierno, sus emociones se han torcido como un tubo al rojo vivo, deformado, malogrado… Ahora él sólo quiere ver el mundo arder.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS