Callejuela gris.

Hago lo que amo, mientras camino entre las sombras de esta callejuela.

Me detengo a centrar mis sentidos en el sonido que llegué a captar.

Aveces la mente te pone trampas.
Aveces dejas que ella controle tu vida.

Quiero sentarme, pues mis pies no dan abasto. Mirar entre vapores de esta calle a diez personas caminar.

Escuchar sus risas, ver que entre copas disfrutan a lo que le llaman «vida».

Les envidio. Cuanto les envidio.

Mi corazón se encoje al verles brotar la felicidad. Y yo cansada en este altar, en esta esquina que llamo hogar. En este refugio que me encarcela.

No ven barrotes, ven un jardín.
Ven un jardín lleno de flores, colibrí que posa sus alas entre mis flores.

Ven luz, ven armonía. Ven el reflejo de sus vidas, de sus risas, de su paz.

Yo veo oscuro.
Pared interminable de trabas y miedos.

Sentada estoy, pues me cansé.
Hace rato la toalla esta en el suelo, arrugada y sucia. Sucia y empolvada.
Tal como el dueño.
Tal como nunca soñó el fabricante…

Pero aquí se esta. Nadie comió con sueños. Nadie respiro sin aire. Nadie soñó con mares y despertó en un río.

Callejuela gris. Odio caminarte. Odio pensarte, odio aferrarme. Aferrarme a ti que me tienes atada. Atada a unos miedos que solo a mi me parecen miedos.

Me ven débil. Me ven sumisa. Un saco de huesos caminando como zombi de la mañana.

¿Como siento que me pueden leer el alma? Si ella esta escondida.

Por que siento que mis ojos me delatan si finjo en mi rostro una sonrisa.

Mis piernas se entumecen. Mi cuerpo grita que continúe mi ruta. Pero un latir en mi cabeza imagina caer en un abismo…
En una abierta cloaca, de aquí a 100 metros.

Me turba mi mente. Me frena tanto pensar.
Maldición! ¿Como sé es inválido pudiendo caminar?

¿Cómo un mendigo ríe, mientras quien vive en gula llora en la esquina ?

Maldición. Hasta bella me suena la palabra.

Ya nada siento, ya nada digo, a todo asiento. Se que lo negativo danza en mi mente. Se que un arcoiris, al verle me da pesar.

Más bailo en la lluvia, mientras otros se refugian. Ya es hora de andar, gatear, arrastrarse, que se yo.

Pero como agua que evade roca de un río, Debo fluir, debo fluirme.
Por que sino, otros lo harán por mi.