Lejos así me sentía, no habia nada que pudiera hacer o decir para estar mas cerca de ello, me sentia ajena, fuera de lugar.

Ese había sido mi hogar desde que nací sin embargo ahora me axficiaba tan sólo entrar a la sala de estar, peor si ellos andaba al rededor me sentia incomoda, lejana sobre todo sola.

No se como paso, ni cuando sólo se que apenas me quedaba ahí, en esa casa con ellos, «Mi familia».

El trabajo, los amigo y la pareja todo eso ocupaba todo mi tiempo, para mi suerte a veces no iba a dormí allí, de todos modos a nadie le importaba, cada uno velaba por si mismos, yo hice lo mismo.

Para nadie fue sorpresa verme hacer las maletas, mi seca respuesta fue .-Me voy de vacaciones, con Grabiela.-Mi mejor amiga.

Las vacaciones fueron días, luego semanas, meses, años, nunca los volví a ver, tampoco me buscaron fue como un pacto silencioso de dejarnos en paz.

Era difícil explicar la relación que teníamos, era un campo de guerra, uno en el que o te defiendes muy bien o atacas primero, difícil de sobrellevar sin perder la cordura, te envenenan el alma olvidándose que son padres e hijos, hermanos, primos, nada importa era un todos contra todos.

No quería más, sólo quería ser feliz, encontrar mi lugar, mi hogar, mi vida.

Hoy en día lo denominarian, «Familia Toxica», eso eran, culpando al mundo de sus propios errores, destruyendo la inocencia de todo al que que se cruzará en su camino, así eran ellos, pensando que son seres intocables, frívolos insaciables de poder, hiriendo sin piedad, dañando todo a su paso al punto de hacerte dudar quien eres.

Al fin de cuentas la sangre sólo es eso, es un lazo que te une biológicamente pero no pueden atarte, no pueden contagiarte de su genes infectados, a tiempo entendi esto, el amor es un lazo del alma no puedes decidir a quien amar pero puedes desintoxicarte de quienes te hacen daño, creo fielmente que uno puede cortar este lazo biológico, por supuesto no habló literal pero si me refiero al irse lejos, al marcharse ya es el primer paso para salir del ciclo, el más duro porque aceptas que ahí, en ese lugar todo esta podrido, que tu no quieres ser igual y ahí es donde comienza la desintoxicación de ese lugar, de lo negativo, de ellos.

Empiezas a ver todo diferente, ves matices donde antes había gris, el dolor de a poco lo vas suplantando con amor de aquellos que ahora te rodean, que son sinceros contigo, que te integran, que si te pasara algo enseguida estaría ahí para ti, ahí ese lugar es al que deberíamos llamar Hogar, un lugar donde la paz reine, la armonía y la compacion por el otra, el amor por sobre todo.

Pasara el tiempo y entenderás que fue lo mejor que pudiste hacer, que perdonar no significa volver a ese lugar, si no que es liberarte de todo ese rencor que te sigue atando al pasado, es doloroso, difícil pero no imposible, así es como comienzas a irte, a veces ya te has ido, antes de desaparecer de marcharse, porque el alma sabe donde si y donde no.

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