UN PEON DE ALBAÑIL

UN PEON DE ALBAÑIL

Ruben Ielmini

08/05/2020

Asunto: Torre siglo XXI

Estimados: 10:00 hs reunión en salón de gerencia.

Tema: Demolición del inmueble ubicado en Vidal 1430 entre calles Moreno y Colon.

Presentación de planos, maqueta y presupuestos, programación fecha de inicio de obras

Se ruega puntualidad

Saludos Ing. Santiago Bermúdez

Gerente General

Así es el texto del mail enviado en el día de ayer, lei de nuevo dirección Vidal 1430, ahí está el bar Libertad; no lo podía creer, ese lugar es El Tortoni,o el Café de los Angelitos de Buenos Aires. La puta madre. ¿A nadie se le ocurrió dejarlo como patrimonio histórico? No tenía remota idea que la obra se realizaría en ese lugar. El progreso no perdona; demolición y cemento nuevo, esa es la consigna

La reunión está por comenzar, no llego a tiempo, seguramente el lord mayor esta mirando la hora y una silla vacía, mí silla, mientras suenan sus dedos al compás de un golpeteo en la mesa, así lo imagino mientras camino lo más rápido posible, (justo ese día me vengo a dormir); y esa puerta de entrada a la sala que parece estar a cien metros, me siento como en esas películas de suspenso donde el protagonista está en primer plano y lo que avanza detrás es el pasillo.

Son ocho minutos después de las diez, me acomodo el saco, la corbata y la solapa, todo en orden, (menos el horario), abro la puerta y usando la estrategia de llegada tarde; abro rápido y entro sonriendo.

— ¡Buenos días ingeniero, buenos días señores, buenos días arquitecta ¿ Qué tal como están? disculpen la tardanza, tuve un problema de transito y….

Dejo la frase cortada, porque las miradas filosas de mis colegas lo decían todo; imagino los calificativos.

Me siento, saco del maletín la tablet y una carpeta, miro por encima de mis gafas…cada movimiento que hago es estudiado por todos y el socio gerente con un certero latigazo dice.

— ¡Bueno…ahora que estamos “Todos”! — (¡Bingo!, ese “todos”
dolió como patada en el entrepiernas)
— Comencemos la reunión, Arquitecta Pérez, la escucho.

La arquitecta, la mas joven de los presentes mira a don Santiago — ¡Pérez Altamira ingeniero!—

— ¡Ah! perdón olvide mencionar su segundo apellido.

La arquitecta comienza su exposición descubre una maqueta y unas fotos en pantalla digital con los detalles del proyecto, una torre de 14 pisos con una vista panorámica a la ciudad y al rio mas los detalles en 3 D de los departamento de uno, dos y tres ambientes.

El jefe de ventas comenta el valor y la financiación; es mi turno, miro la carpeta de costos de materiales, contratación mano de obra, accesorios, muebles de cocina y sanitarios con jacuzzi de última generación. Quiero hablar y no puedo, cierro la carpeta y me la juego. todos están a la expectativa, sus miradas me dicen un— ¿Y …?—

— ¡Caballeros, no estoy de acuerdo con la demolición!

 Un efecto tsunami invade sus caras, la arquitecta solo atina a decir — ¿Perdón?—

— No me miren como a un bicho raro; demoler ese lugar es destruir parte de la historia de nuestra ciudad, estamos hablando del bar Libertad. ¿Quién de nosotros no paso por ese bar? vos Guille, te acordas cuando pusieron videocasetera, íbamos los viernes a la noche buena pizza y películas, — (Nadie opina, siguen en shock como el nock out de Monzón a Benvenutti; y antes de que reaccionen les aplico el último golpe)

— ¿Y la vez que Gotardo el dueño de la librería participó en el corte de la manzana de Sofovich? Era un domingo a las diez de la noche, las mesas del bar llenas, el ruso atento al corte, no ganó pero se dio el gusto de salir en la tele— Siguen todos en silencio, Guille me mira recordando aquel pasado y se une a mi comentario.

— Yo me acuerdo cuando después de actuar en la confitería Del Trópico, iban a comer al bar Rimoldi Fraga, Sergio Denis, Daniel Toro, Horacio Guarany…Guarany ¡Como chupaba este cristiano!..se tomo hasta la presión aquella noche jaja…perdón me vino un ataque recordatorio— Guille se acomoda en su silla y retoma la conversación pero en tiempo presente..

—Eso pasó hace más de veinte años Esteban, aflojemos con los recuerdos, esta torre es un proyecto a futuro, es una inversión!

—Sí pero lo recuerdo como si fuera ayer. Les propongo que en lugar de demoler el bar lo dejamos habilitado como patrimonio cultural, y compramos el terreno de los Manfredi que esta solo a dos cuadras frente al mercado La Gentileza, ese terreno está en venta y ahí hacemos la torre.

La arquitecta abre sus ojos como el dos de oro…

— ¿Dejar un bodegón como casa de cultura y construir la torre frente a un mercadito? ¡Ay por Dios que espanto! si fuera frente a un hipermercado, pero ¿Se imaginan la torre Siglo XXI y enfrente a un almacén de barrio? no vendemos ni un ambiente! — (Se escuchan risas burlonas aceptando la opinión de la arquitecta. El único que no se ríe es don Santiago).

Sin bajar la guardia enfrento la mirada autoritaria de la arquitecta — ¡Yo compro en el mercadito La Gentileza, buen servicio, calidad y precio. El lugar es terreno alto, además le damos una fuente de trabajo al mercado y categorizamos la zona, no es mala idea.

La arquitecta mira a todos con mueca burlona

— ¡Me extraña Esteban, le tengo que recordar que estamos en una reunión empresaria no en una mesa del bar Libertad!— lo mira a don Santiago

— ¡Por favor ingeniero obviemos esta propuesta de peón de albañil y continuemos con la reunión!

— ¿Peón de albañil me dijo? Gracias por el elogio y muy interesante su comentario porque ¿que hace un peón de albañil? preparar material para contra pisos, paredes, columnas, revoques y techo, una tarea de importancia para cada caso. Arena, cemento, piedra cal y agua mezcladas en sus proporciones exactas

La arquitecta me interrumpe —Disculpe ¿Me está dando una cátedra de construcción de edificio? , mire que soy arquitecta y algo conozco—

—Seguramente que conoce; pero lo que desconoce es hacia donde voy, si no me interrumpe le cuento.

Sin dejar su mirada irónica contesta— ¡Prosiga con su clase de albañilería!—

—Bueno…prosigo; decía que después viene el resto, puertas, ventanales, instalación eléctrica, pintura y muebles de cocina y decoración . La vivienda queda terminada; y aquí viene lo interesante ¿Para qué queda terminada?…para que la habite una pelotuda importante como usted que discrimina a un “peón de albañil”, no respeta la cultura de un bar al que llama bodegón; me pregunto ¿Quién tiene más relevancia en esa obra, su soberbia o el trabajo un peón de albañil?— Cierro mi maletín.

— ¡Caballeros, ingeniero; para mí la reunión terminó! Les dejo copias de la carpeta de costos, hagan lo que quieran. Buenas tardes.

Dos horas después, me llama el gerente.

— ¡Ingeniero si me llamó para darme el sermón de la montaña ahórrese el discurso. Ya sé que estuve mal, me deje llevar por la nostalgia de ese bar, pero hay cosas que no me banco,y una es la actitud de una creida como la arquitecta Perez Altamira Benavidez Bancalari Recoleta y no se cuantas estaciones más …me disculparé con la arquitecta pero no me arrepiento; el bar Libertad fue parte de mi vida y la de muchos.

— ¿Terminaste? ¡No te llamé para darte ningún sermón y dejate de joder con las formalidades que no estamos en reunión, sentate!

Junta sus manos, mira la ventana y me dice.

—La reunión de hoy termino con un giro a ciento ochenta grados. Me parece bien que te disculpes, pero será en otro momento porque la arquitecta Pérez Altamira, renunció al proyecto; en su reemplazo viene el arquitecto Francisco Ortiguera.

— ¡Ah buenísimo; Panchito Ortiguera, un tipazo! Perdón, quiero decir… me parece bien.

— Si, es un arquitecto de perfil bajo, buena persona y sin tanto pajarito ni protocolo.

—Tema dos, le hice una oferta a los hermanos Gino y Tulio Manfredi; llegamos a un acuerdo, nos vende el terreno, la torre XXI se edificará en ese lugar. Ocúpate del trámite de la compra venta por favor; y un último tema; anda preparando un proyecto de una puesta en valor del bar Libertad para que sea declararlo patrimonio histórico, cuando lo tengas listo, tráelo que lo elevamos al presidente del Concejo Deliberante. Vos me metiste en este un baile, y vamos a bailar juntos, anda nomas.

—Buenas tardes y gracias don Santiago—me retiro y no salgo de mi asombro al llegar a la puerta me dice.

— ¡No me agradezcas nada!— mira el portarretrato del escritorio, lo gira  — ¡Dale las gracias a Lucas, él estaría muy contento con esta decisión! ¿Te acordas de Lucas?

—Si Lucas, una gran persona, fuimos amigos y compas del colegio.

—Y buen hijo…me acuerdo una tarde cuando salimos de la clínica, le habían hecho un nuevo electro, fue una de la últimas salidas y me dijo — ¡Vamos al bar Libertad, te juego un pool, el que pierde paga la pizza y las birras!— y tuve que pagar; no gane ni una partida, me gastó ¡Qué bien jugaba el hijo de puta!—Mira la foto, una lagrima le brota, disimula mirando la ventana

— ¡El bar Libertad! Yo también tengo recuerdos de ese lugar; bueno anda che que tengo que hacer…ah y una cosa más.

—Si dígame don Santiago.

— ¡Muchas gracias por la lección de nostalgia que nos diste en la reunión! Construcciones Bermúdez y asociados, se honra de tener entre su gente a un “Peón de albañil”como vos.

FIN

Video: El cuento del las Comadrejas (Escena :la partida de Pool)

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