sonríe mientras por dentro te quiebras, bella muñeca debes mantener la cara de póker, porque cuando quise hablarte no escuchaste ahora mis palabras sobran, qué valor tendrá una lagrima, sincera cada palabra y tu, como si no fueran nada atravesando mi pecho con crueles palabras abrir los ojos, mirar al vacío, no recuerdo tu ayuda, tampoco tu presencia en mis momentos de tristeza, no te estoy diciendo quiéreme, simplemente no me destruyas, algún día en el silencio encontraras mi recuerdo, aquel que entre espesas nubes oculta la secuela que deja en infame paso del tiempo, porque me borras si a tu lado quiero sonreír, tanto que me sentía mala por alejarte del buen camino, dime cómo puedo seguir tus consejos después de ver lo poco que te importo, que no solo un color habita entre el blanco y el negro, detalles de los cuales ni siquiera yo me percate, pero tú a simple vista lo notaste, ahora si me necesitas, entonces que hay de mi cuando soy yo quien te necesita, el odio con el cual me miras, atraviesa mi pecho, sin saber porque, te pierdo, lagrimas como agujas en este desinflado corazón, el mundo no es nada si por ti lo doy todo, el libro de poesía que me regalaste, el lápiz en mi cuaderno aun duerme, un cambio climático que rápidamente va en descenso, mientras por dentro nos destruimos, tus garras atraviesan aquello que he dejado, es por eso, me recuerdan que de mi te has alejado, valor de lo esperado, hastío guardado, el momento en que ausente de mi te has olvidado, ni un adiós, ni un te extraño.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS