Hoy vuelvo a ecribir
y lo hago para ella
para esa dama curiosa
misteriosa y bien hermosa
que cuando llega la noche
aparece por el este
con ese brillo celeste
Solitaria mensajera
que luce capa de plata
que se pasea por el monte
perfilando el horizonte
iluminando caminos y calles
de pueblos y de ciudades
sin olvidar mares ni valles
Sabe atravesar la ventana
como una sigilosa maga
y lo hace todas las noches
hasta que llega la mañana
despertando sensaciones dormidas
sacando pasiones escondidas
recordando experiencias vividas
Cual fiel testigo
de un descanso en el camino
de una tregua en la rutina
de un beso que se escapa
de una caricia perdida
de un deseo que te atrapa
de una lágrima vertida
Leyendo una carta
ojeando una vieja fotografía
olvidadas en el tiempo
o escribiendo esta poesía
siempre me hace recordar
los muchos grises que tiene el día
con perfume de melancolía
Ella bien sabe entender
el inmenso placer
de esa lágrima perdida
por una persona querida
que hace al alma estremecer
mientras llamas al olvido
para borrar algún recuerdo vivido
Es la novia de la noche
la que cuando llega el día
se ocupa de cerrar su broche
la que va recogiendo su manto
la que va apagando su canto
porque ya se retira a dormir
con su misterioso encanto
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