No puedes encontrar el amor en un corazón en el que no habita. Nadie puede ofrecer lo que no tiene en su alma. Las máscaras nos confunden, las palabras disfrazadas de promesas, los cuerpos envueltos en llamas prendidas solo de efímero deseo. No se puede confundir compañía con complicidad. No puedes esperar que luchen aquellos que siempre tiraron la toalla, esos que se niegan a mirar en el fondo de sus entrañas porque les da miedo. Donde no soporten el silencio, ahí no es. Tú qué has nadado en lo más profundo de los infiernos y has salido viva, no dejes que ninguna alma pérdida te arrastre. No dudes de ti misma por mucho que otros duden de ellos e intenten hacerte sentir de la misma manera. El amor, el amor es algo mucho más grande que una vida llena de sombras y espinas. Eso lo aprendiste hace mucho tiempo, no permitas que el olvido te ciegue y no puedas ver. Ya vendrá quién mire la vida de la misma manera que tú lo haces. Quién ya haya aprendido las mismas cosas que hace ya mucho tiempo aprendiste tú. No pretendas juntar dos mundos diferentes y hacerlos uno. Tú no naciste para ser mediocre, naciste para vivir el amor de la misma manera incondicional que afrontas cada situación de tu vida. No esperes menos, nunca permitas menos.

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