Amor de pocas palabras

Contada en generación en generación de mi tatarabuelo, Vivía en Chochem era un pueblito ganadero, trabajaba arando la tierra para plantar trigo y pastoreando cabras, así nos dedicaba toda mi familia, yo no sabia leer y no escribía muy bien.

Pasaron 4 años, la señora de estas tierras llego a vivir con sus 3 hijas (Gretchen, Hilda y Imelda) rumores decían que era muy estricta con la elección de parejas, pero lo que ellos no conocían que había estado comprometida con un comerciante Judío muy adinerado antes de morir le dijo : “Oh, amada mía tu que eres el desvelo de este corazón, la concentración de mis pensamientos cuida muy bien de nuestras hijas, nos volveremos haber en el paraíso”.

Mis padres asustado porque podría subir la recolección de dinero, pero ella era un persona muy justa; lo que hizo fue mejorar esas tierras.

En primavera la señora había organizado un festejo por escoger parejas para sus hijas, llego el día de la celebración todo la villa esta bien colorida. Cuando de lejos vi un carroza que venia a la casa de mi padres era mi Hermano Hidwing que había sido informado de la fiesta de la señora y el intento de pedir la mano a un de sus hijas. Pero algo burlón le dijo “Pero nadie se casaría con gente pobre como nosotros”.

Mi padre me dijo que acompañara a mi hermano porque podría ser algo imprudente. Llegamos a la puerta de ingreso cuando entramos pudimos notar los lujos que poseían, no juntamos con los demás invitados, estábamos esperando la señora de esta fiesta.

Cuando de repente estaba sucediendo un escandalo en un esquina de la sala, era un sirvienta que estaba hacienda acosado por 3 hombres bien formido, yo algo asustadizo fui a intervenir porque nadie más lo hacia, me puse delante.

Cuando salió la dueña de la casa dijo: Tu será el esposo de mis hijas porque de mostraste…, y yo algo desconcertado me fui escabullendo para que nadie se alborote más. Y me salí del castillo y me dirigí a mis casa para olvidarme de este asusto.

Al día siguiente llegaron la señora Christa fue tocar la puerta de mi humilde morada mi padre algo asustado porque quien podría hacer abrió la puerta se dio con la sorpresa que era que era La señora, le dijo que sucederá mi señora.

Así hablo mi padre con la señora dentro de mi casa, cuándo me llamo y llegue vi a la señora i al lado estaba Gretchen. Mi padre me dijo que esta señorita de acá quiero casarse contigo porque tu fuisteis el único que la rescato de esa prueba que ella había puesto para encontrar a su futuro esposo. Yo algo conmocionado por la palabras que me había dicho acepto para no quedar mal con mi padre.