Lo conocí como el verdadero amor

Lo conocí como el verdadero amor

Tania Murillo

19/03/2021

Una cierta noche fui a un lugar que casi no recuerdo ahí estaba él tan hermoso, esa noche nos lanzamos varias miradas de ternura, ya en la noche cenamos junto a su familia y junto con mi familia, terminamos de comer y limpiamos la cocina, hablamos de algunas cosas y nos reímos, me sonreía de la manera más linda, luego de terminar me di un baño relajante salí de la ducha, había terminado de bañarme en aquel instante sentí sus manos en mis hombros sobre el camisón, él acercándose lentamente a mi espalda me ayudó a secar mi cabello estaba tan nerviosa que era inútil respirar y apenas podía hablarle, creo que fue amor a primera vista desde la cena, recuerdo que esa noche me invitó a salir un momento a tomar aire,nos tomamos de la mano mientras caminábamos mirando las estrellas de aquel cielo tan hermoso.

Observamos a la estrella más hermosa y brillante, sonreímos juntos, se acerco tanto a mi rostro que intentó besarme pero no lo hizo, yo creo que eso es de un caballero, mientras me llevaba de la mano hablamos y nos enamoramos, regresamos a casa el me invito a salir otro dia, yo con gusto acepté, al momento que se fueron con su familia nuevamente me lo recordó diciendo te veo mañana a las 3 pm , yo solo le sonreí, y me despedí con un abrazo.

Hoy tendré una nueva cita con aquel chico, estoy emocionada no sé qué ponerme, me pondré algo casual y lindo, iremos a dar un paseo y a comer helado.

Se acercaba la hora de la cita ya en la tarde llega una vecina cercana a su casa y me informaron que habían acribillado su casa buscándolo, estaba tan confundida y asustada que fui a buscarlo, estaba allí atado en una silla, hizo que su madre y su hermano se fueran del lugar, mientras el estaba siendo apuntado con un arma, uno de los asesinos lo amenazó con el arma justo en la cabeza, el chico solo le dijo que puede matarlo pero que no haga daño a su familia.

El despiadado asesino le disparó sin pensar, y escapó por la ventana, yo me quedé a su lado llorando e intentando despertarlo, pero el estaba con sus ojos cerrados.

En ese entonces mi alma y corazón se destrozaron por primera vez en la vida, yo era aún una adolescente, ahora tengo 80 años y aun no puedo olvidar aquel momento, sentir que te arrebatan algo tan grandioso no se lo deseo a nadie, y lo que más aún duele es que nunca supe de su madre y el nombre de aquel amor verdadero.

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